Citroën celebra 70 años del 2 CV y 50 del Mehari

Con motivo del Salón Retromobile, una de las ferias más importantes del coche clásico en el mundo que cada año se celebra en París, la marca francesa ha hecho un gran despliegue para celebrar dos efemérides importantes, el 70 aniversario del Citroën 2 CV y, algo más cercano, el 50 cumpleaños del Mehari. Dos modelos importantes para una marca que en 2019 celebrará el centenario de su creación.

Citroën es una marca que siempre se ha caracterizado por hacer todo de manera distinta a los otros fabricantes de automóviles. Ha empleado tecnologías distintas y estilos muy alejados de los del resto de marcas. Y todo ello con modelos siempre marcados por la innovación. La tracción delantera, la suspensión neumática o la carrocería de termoplástico son solo algunos ejemplos de esa constante evolución. Como también lo son el 2 CV o el Mehari, que ahora están de cumpleaños.

El 2 CV comenzó su andadura antes de la II Guerra Mundial y el objetivo fue el de hacer un coche de precio ajustado pero muy confortable, capaz de rodar por cualquier terreno y en el que la clave era su suspensión que le hacía un coche especial. Aunque los primeros prototipos datan del año 1937, la contienda bélica paralizó el proyecto y el vehículo fue presentado como un modelo de producción en el Salón de París de 1948.

“El coche que dobla pero no vuelca”

Una de las frases que definía el comportamiento de este modelo era la de “el coche que dobla pero no vuelca”. Y es que incorporaba una suspensión flexible de gran recorrido que permitía rodar deprisa y que el coche se inclinara mucho en las curvas. Su motor bicilíndrico refrigerado por aire, su palanca de cambios en el salpicadero o sus asientos de lona le convirtieron en un coche legendario. Este modelo se mantuvo en producción en diferentes partes del mundo, y también en España, durante 42 años, en los que se fabricaron más de cinco millones de unidades de sus diferentes versiones.

El otro modelo que celebra su cumpleaños es el Mehari, un vehículo también legendario en el que a la mecánica tomada del 2 CV de dos cilindros se sumaba una carrocería construida en termoplástico y unos asientos de muy fácil lavado. Era, por ello, el vehículo ideal para utilizar en zonas de playa donde un simple manguerazo permitía poner todo nuevamente en su estado original tras una jornada de fiesta.

El coche se lanzó en 1968 cuando en las calles de París la juventud se levantaba en busca de nuevas libertades, y este modelo representa como ningún otro la libertad de movimientos de las personas. El Mehari estaba basado en la plataforma del Dyane y era un vehículo sin pretensiones, un descapotable que consiguió renovar los códigos del automóvil de la época. Su peso era de 525 kg.

Clubes de coleccionistas

Para celebrar estos dos aniversarios la marca ha elaborado dos estructuras en las que se imita lo que los aficionados del mundo de las maquetas conocen perfectamente, esas planchas en las que van unidas las diferentes piezas que luego se deben montar y pintar. La gran diferencia es que en este caso las piezas son de tamaño real, a escala 1:1, y corresponden a piezas originales de vehículos de ambos modelos, el 2 CV y el Mehari.

Además, Citroën aprovecha el Salón Rétromobile 2018 para agrupar a los clubes de coleccionistas de la marca en torno a los preparativos de su centenario, que se celebrará durante todo el año 2019. Y muestra el logo de celebración del centenario, basado en el escudo Citroën Origins. Este logotipo es un guiño a la historia e integra el emblema de los chevrones en un óvalo, como existía en los orígenes de la marca en 1919, y que a su vez provenía de la primera compañía que fundó André Citroën que estaba dedicada a la fabricación de engranajes.