KYMCO AK 550, la nueva referencia de los maxiscooters

A la hora de hablar del nuevo KYMCO AK 550 resulta inevitable hacer referencia a la competencia, porque el objetivo que se ha marcado el fabricante taiwanés es establecer una nueva referencia en el mercado de los maxiscooters.

A juzgar por las cifras de ventas en su primer mes de comercialización (septiembre) no cabe duda que la introducción de este nuevo modelo por parte de KYMCO ha sido todo un acierto. En su debut, el AK 550 se ha situado entre los diez modelos más vendidos, colocándose como la primera moto de más de 125 c.c., superando a varios modelos de 125, que es el segmento más consolidado del mercado motociclista español.

Hasta ahora, el modelo que reinaba en el sector de los maxiscooter deportivos era el Yamaha T-Max, que desde su llegada al mercado en 2001 ha sido un éxito de ventas. Desde ahora, tiene una alternativa evidente, y es el KYMCO AK 550, porque hasta ahora los diferentes maxiscooters que han ido apareciendo a lo largo de los años tenían otro carácter. El AK 550 es también un scooter deportivo, pero al mismo tiempo no renuncia a ninguna de sus posibilidades, porque también es útil y válido en ciudad, y permite viajar cómodamente.

Servicio a demanda

Nunca es sencillo poner un modelo nuevo en el mercado. Hasta ahora, KYMCO no tenía ningún otro scooter equivalente al AK 550, con lo que ha partido de cero. Pero hay que decir que ha sido un acierto, y lejos de padecer los inevitables y habituales problemas de una primera serie, el AK 550 se presenta completo, ultimado y al detalle, sin nada grave que reprocharle.

Podemos decir que KYMCO ha ofrecido un servicio a demanda del usuario. Es evidente que los maxiscooters deportivos tienen su público en el mercado español, y la marca de Taiwán ha trabajado para ofrecerles el producto preciso. La calidad de sus acabados es excelente, con un diseño moderno y vanguardista. No cabe duda que el AK 550 entra por los ojos.

KYMCO ha hecho una apuesta importante por las prestaciones. Su motor bicilíndrico de 550 c.c. ofrece nada menos que 54 CV a 7.500 rpm, con un par motor de 55 Nm a 5.750 rpm. El empuje es notable, y responde al primer golpe de gas con determinación. Además, cuenta con dos modos de conducción: uno en el que entrega toda la potencia, y otro en el que se suaviza (modo lluvia). Para eliminar las vibraciones, KYMCO emplea ejes de balance, ya que dispone de cárteres separados para motor y transmisión.

Estética oriental

Lo cierto es que el sistema resulta muy efectivo y el AK 550 no vibra más allá que cualquier otra moto. La respuesta del motor es excelente, está muy lleno en toda su curva de potencia, con medios y altos, y un comportamiento deportivo que invita a salir de la ciudad y no limitarse a su uso diario como medio de transporte. El AK 550 es tan deportivo que sorprenderá en recorridos por carreteras secundarias, llenas de curvas, y no se achica ante las motos deportivas de cilindrada media.

A diferencia de otros scooters de gran cilindrada, el motor no bascula con la rueda, lo que mejora la estabilidad y reduce la masa no suspendida, potenciando las cualidades de su más que notable bastidor tubular de aluminio. Además, la transmisión por correa dentada es suave y precisa, y no requiere mantenimiento, lo cual siempre es una ventaja frente a la cadena, que precisa de engrase y tensado periódico.

Una sorpresa por parte del AK 550 es que monta neumáticos Metzeler, algo poco habitual entre los fabricantes asiáticos, pero la elección es todo un acierto, porque su agarre es excelente. En la parte ciclo, KYMCO se ha decantado por suministradores europeos, porque también emplea frenos Brembo flotantes de 270 mm de diámetro, con una notable pinza de cuatro pistones de anclaje radial, y una horquilla invertida que confiere gran rigidez al tren delantero. Con el respaldo de los Metzeler, el conjunto es excelente, porque la moto se apoya delante con una seguridad extraordinaria. Y ya sabemos que cuando hay confianza delante, todo va sobre raíles.

La estética del KYMCO AK 550 es inconfundible con sus afiladas líneas de marcado estilo oriental. Tiene un parabrisas que es ajustable en dos posiciones y ofrece una gran protección aerodinámica. La posición de conducción es muy buena, y el pasajero también viaja cómodo en el asiento trasero, que es bastante amplio y dispone de agarraderas. Tiene pata de cabra y caballete central, y cuenta también con freno de estacionamiento.

Llave de proximidad

El cuadro de instrumentos es digital, y ofrece tres lecturas simultáneas de la velocidad, algo que al principio resulta desconcertante, aunque te terminas acostumbrando, fijándote en la que te resulta más cómoda de leer. Funciona con llave de proximidad, otro detalle muy práctico, aunque la forma de poner en marcha el sistema resulta un poco complicada. Confieso que me costó adaptarme y en ocasiones tardé en ponerlo en marcha o abrir el asiento. Pero no hay nada que el hábito no consiga.

Bajo el asiento hay un amplio espacio para el casco y más cosas, y además cuenta con dos espaciosas guanteras, algo ya habitual en los scooters de KYMCO. Otros detalles a considerar son los puños calefactables, y el empleo del sistema Noodoe, que permite interactuar al teléfono con diferentes aplicaciones.

El PVP del KYMCO AK 550 es otro de sus atractivos. Por debajo de los 10.000 euros (9.949), la marca taiwanesa asesta un duro golpe a su competidor directo, porque el T-Max en su versión básica cuesta 12.999 euros. Es decir, más de 3.000 euros de diferencia. La economía siempre es una cuestión importante, y más en estos tiempos, y el hecho de poder competir con un producto de calidad, como es el AK 550, a un precio muy competitivo, explica sencillamente el por qué de su notable éxito nada más llegar al mercado. Habrá que seguir su evolución en el último cuatrimestre de 2017, pero no cabe duda que el KYMCO AK 550 apunta muy alto.

Ficha técnica

Motor: 2 cilindros en línea.

Potencia máxima: 54 CV a 7.500 rpm.

Par máximo: 55 Nm a 5.750 rpm.

Cilindrada: 550 cc.

Dimensiones: 2.220 x 795 x 1.450 mm.

Distancia entre ejes: 1.580 mm.

Neumáticos: 120/70 R15 delante y 160/60 R15 detrás.

Depósito de combustible: 15 litros.

Peso en orden de marcha: 232 kg.

Precio: 9.949 euros.