Infiniti Q60, un elegante cupé de cuatro plazas con un potente motor de 405 caballos

La marca Infiniti sigue creciendo en España y en Europa tras renovar completamente su gama y lanzar al mercado modelos más acorde con los gustos de los conductores europeos. De los grandes motores V8 pensados solo para el mercado norteamericano, ha pasado a hacer coches más pequeños y asequibles, menos consumidores y también mucho más dinámicos.

Y este que hemos probado esta semana, el Q60S, es un buen ejemplo, en el que nos encontramos con un modelo con carrocería de tipo cupé pero muy racional, en el que caben bien cuatro personas, aunque en estas plazas traseras, bastante amplias para las piernas, la altura disponible no sea excesiva. Pero cuatro personas de un tamaño normal pueden viajar a gusto. También encontramos un maletero razonable para el tipo de coche que es. No es el de un monovolumen o un gran todocamino, pero sus 342 litros disponibles, bien aprovechados, son suficientes para poder hacer una escapada, algo para lo que este modelo resulta ideal.

A nivel mecánico, encontramos un muy buen coche. La gama del Q60 cuenta con dos opciones mecánicas muy diferentes. La primera es la de un propulsor de cuatro cilindros con una potencia de 211 caballos que resulta un poco limitada. Es un buen motor, pero quizás es algo justo para lo que se supone que ofrece un coche de este tipo. Además, este modelo con la motorización pequeña es de propulsión trasera.

Sin embargo, el bueno, el que de verdad es un cupé firmado por Infiniti, es la variante Q60S que hemos probado. En este caso, encontramos un propulsor V6 con turbocompresor que proporciona una potencia de 405 caballos. Una cifra ya a tener en cuenta entre los vehículos de este tipo. Es, además, un motor brillante por la forma de entregar el par, ya que ofrece todo su potencial desde las 1.600 vueltas. Con ello, es un motor muy fácil de conducir. Todas estas características hacen del Q60S un buen cupé, capaz de competir con sus rivales más conocidos del mercado.

Asociado con este motor, encontramos un cambio automático de siete marchas, de los tradicionales con convertidor de par, y, lo más importante, un sistema de tracción a las cuatro ruedas. No es un coche pensado para ir de carreras, no es su filosofía, pero cuando queremos ir deprisa, resulta muy rápido y efectivo en cualquier trazado, con unas suspensiones muy firmes y un equipo de frenos realmente bueno, capaz de detener este cupé en muy pocos metros. A ello también contribuyen sus levas en el volante para gestionar el cambio de marchas de manera más rápida.

En cualquier caso, su conductor tiene un amplio abanico de opciones para decidir cómo quiere conducir en cada momento. Nada menos que seis posibilidades diferentes, desde el modo nieve, muy suave, hasta el modo Eco, dos modos Sport, con el segundo que desconecta ya buena parte de las ayudas a la conducción.

También tiene un modo personalizado en el que el conductor pone todos los sistemas a su gusto. A todos los atributos que les contaba al principio, un coche elegante, confortable y llamativo, hay que añadir uno más, y es que este modelo puede ser muy divertido si se buscan los límites en una zona de muchas curvas.

Pero como todos los coches buenos, exclusivos y divertidos, tiene una pega, su precio. Pagar 65.000 euros por un coche de este tipo, cargado de tecnología, con un motor de 405 caballos con tracción 4x4, frenos Brembo, y con todo lo que esto supone, tampoco creo que sea un precio excesivo.

Ficha técnica

• Motor: seis cilindros en V.
• Potencia máxima: 405 CV a 6.400 rpm.
• Par máximo: 480 Nm desde 1.600 rpm.
• Cilindrada: 2.997 cc.
• Combustible: gasolina.
• Velocidad máxima: autolimitada en 250 km/h.
• Aceleración de 0 a 100 km/h: 5,0 segundos.
• Tracción: 4x4.
• Consumos homologados (uUrbano/ extraurbano/ mixto): 13,3/ 7,1/ 9,4 litros.
• Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,70 x 1,85 x 1,40
• Capacidad maletero: 345 litros.
• Peso en vacío: 1.850 kg.
• Precio: 65.300 euros.