¿Llegarán los juguetes a tiempo para esta Navidad? Solo si pagas el precio del transporte

Los bloqueos en los puertos de todo el mundo están dejando a algunas empresas de juguetes luchando este verano por asegurarse de que las estanterías de los minoristas dispongan de una oferta suficiente cuando llegue la temporada de compras navideñas de este año. Los juguetes que lleguen a tiempo seguramente tengan precios más altos.

Hasbro, Mattel y otros fabricantes dicen que están navegando entre alteraciones de la cadena de suministro y unos crecientes costes de materiales y mano de obra, lo que los lleva a aumentar los precios para recuperar parte de los costes añadidos.

Los veteranos de la industria juguetera declaran que los trastornos de este año son peores que los del año pasado, cuando el brote de covid-19 cerró temporalmente muchos puertos, fábricas y tiendas. "En 2020, pensamos que no podía empeorar, y 2021 dijo: 'Sujétame el cubata'", dice Joshua Loerzel, vicepresidente de ventas y 'marketing' en Hog Wild, pequeña empresa de juguetes con sede en Oregón (EEUU).

Las jugueterías acuerdan los precios con una antelación de entre seis meses y un año

Los bloqueos en el transporte marítimo han conducido a largos retrasos en envíos desde China, donde se fabrica la mayoría de juguetes vendidos en EEUU, y a precios que son mucho más elevados de lo habitual. El precio 'spot' diario, incluidos los recargos a la prima, para un contenedor de 12 metros de China a la costa oeste de EEUU era este miércolesde 18.346 dólares, en comparación con cerca de 2.680 dólares en julio del año pasado y de 1.550 dólares en julio de 2019, según el Freightos Baltic Index.

Hasbro, que externaliza casi toda su producción, dice que la empresa está utilizando varios puertos y rutas marítimas y extrayendo más juguetes de varios países para evitar retrasos durante el segundo semestre. "Voy a estar un poco menos centrado en la procedencia exacta del inventario y más en que tengamos el 'stock' para satisfacer la demanda", declaró el CEO de Hasbro, Brian Goldner, a los analistas esta semana.

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Mattel, que tiene varias fábricas en Asia, declara que estaba aprovechando su huella de fabricación geográficamente diversa para minimizar el efecto de los bloqueos en el transporte. "Podría seguir habiendo problemas de la cadena de suministro inesperados, y es difícil saber lo que puede deparar el futuro", declara el CEO de Mattel, Ynon Kreiz, en una videoconferencia.

Los minoristas y las empresas de juguetes suelen acordar los precios con una antelación de entre seis meses y un año. Las compañías ahora luchan por renegociar precios con los minoristas, declara Loerzel, de Hog Wild, que tiene unos 30 empleados. El tamaño de una empresa de juguetes afectará a su éxito negociador, afirma.

"Lógicamente, no podemos vender e incurrir en pérdidas", dice Loerzel. Apunta que el nuevo artículo de la empresa, Handy Grabs, que costaba 14,99 dólares cuando se lanzó a principios de año, ahora se vende a 17,99 dólares en algunas tiendas para ayudar a compensar unos mayores costes de envío.

Los juguetes destinados a ser vendidos en el cuarto trimestre deberían normalmente enviarse desde China en julio y llegar a EEUU en agosto

La industria juguetera se ha enfrentado a desafíos del coronavirus desde que las primeras olas de la pandemia cerraron fábricas chinas y retrasaron la producción. El sector los gestionó con éxito, y registró un crecimiento de ventas del 16% el año pasado en EEUU, según la firma de investigación NPD Group, ya que los padres compraron juegos de mesa y muñecas Barbie para los niños que se quedaron sin colegio, quedadas con amigos para jugar y vacaciones.

Los juguetes destinados a ser vendidos en el cuarto trimestre, cuando las jugueterías consiguen una parte considerable de sus ingresos, deberían normalmente enviarse desde China en julio y llegar a EEUU en agosto para estar en las estanterías de las tiendas en octubre, declara el consultor de juguetería independiente Chris Byrne. En cambio, algunos envíos se están retrasando semanas o meses, poniendo en peligro la capacidad de las jugueterías de tener sus productos en los estantes de las tiendas para octubre.

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Algunas empresas de juguetes participan en guerras de ofertas para conseguir espacio en contenedores de envío. Curtis McGill, copropietario de una empresa de Texas que vende 'kits' para que los niños decoren con adornos de Navidad y huevos de Pascua, dice que reservó un contenedor de 12 metros por 19.500 dólares la semana pasada, casi cinco veces más caro que lo que le costó el verano pasado, antes de ser informado de que consiguió una oferta mayor. Esta semana, pagó 22.500 dólares para reservar otro contenedor. "Es un momento interesante para tipos pequeños como yo", dice McGill.

McGill declara que cualquier producto navideño que no haya zarpado el 15 de agosto se quedará en China, lo enviará más adelante este año y lo almacenará hasta la temporada navideña de 2022. Prevé que dejará la mitad de sus productos navideños en el extranjero. Pero ahora mismo, "no hay nada en nuestros almacenes para vender", declara McGill, cuya empresa, Hey Buddy Hey Pal Investments, tiene cinco empleados a tiempo completo. "El consumidor no va a tener muchas opciones este año".

Algunas plantas chinas que fabrican juguetes están cobrando más de un 20% extra

Isaac Larian, fundador y CEO de MGA Entertainment, declara que su negocio está siendo golpeado por unos costes crecientes. Además de unos elevados costes de transporte, algunas plantas chinas que fabrican juguetes están cobrando más de un 20% extra para compensar unos costes de materias primas y de mano de obra más altos.

MGA, la compañía detrás de las muñecas L.O.L Surprise y Little Tikes ha aumentado los precios para compensar los costes más elevados. Algunas muñecas de 10 dólares ahora valen 12 dólares, mientras que los artículos de 29 dólares pasarán a valer 35 dólares. Larian declara que le preocupa que aumentar demasiado los precios enfade a los consumidores. "Si lo elevas demasiado, el producto va a estar fuera del alcance de los consumidores", afirma Larian.

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Es poco probable que muchas empresas de juguetes empiecen a trasladar la producción fuera de China, declara el consultor de juguetería Byrne, ya que las fábricas e instalaciones llevan establecidas allí décadas y los problemas de logística ya afectan también a otros países asiáticos. "Transportar contenedores a través del océano va a ser un reto sin importar de dónde procedan", declara.

Por último, Byrne dice: "Santa Claus va a volar. Lo que llevará en el trineo está en el aire ahora mismo".

*Contenido con licencia de 'The Wall Street Journal'.