Santander tendrá que responder ante la Justicia de EEUU por el caso Madoff

El Banco Santander no consigue librarse del fantasma de Madoff. Pese al acuerdo con el liquidador de los fondos y al sobreseimiento de la demanda colectiva (class action) en Miami, un tribunal de Nueva York ha decidido admitir parcialmente la presentada en esa ciudad. Por tanto, Emilio Botín tendrá que responder ante la justicia norteamericana por la actuación de su fondo Optimal, aunque sólo en algunas de las demandas; los que invirtieron a través de la unidad de Optimal en el paraíso fiscal de Bahamas quedan fuera y tendrán que litigar en esa jurisdicción.

De todas formas, la admisión a trámite no es definitiva. El día 10 la jueza de Manhattan Shira Scheindlin celebrará una audiencia en la que el Santander podrá presentar sus argumentos para evitar ir a juicio. Además, fuentes jurídicas aseguran que los inversores demandantes tendrán que reformular su demanda incluso si la jueza decide seguir adelante con el proceso.

No obstante lo anterior, los abogados que han demandado al Santander, el despacho norteamericano Labaton Sucharow, se han mostrado satisfechos con que el tribunal haya admitido "el núcleos de nuestras alegaciones" y señalan la importancia de que sea uno de los primeros jueces que acusan a un gran banco por el fraude de Madoff.

La demanda, revisada el 15 de noviembre, acusa a Optimal de ignorar las señales que alertaban de un posible fraude y de engañar a sus clientes sobre la vigilancia que ejercía sobre el estafador, a pesar de que el banco español cobraba millones anualmente en comisiones por ejercer esa labor (no había gestión, puesto que todo el dinero que entraba en el fondo se entregaba a Madoff para que lo gestionara). Cuando se descubrió el fraude en diciembre de 2008, el dinero del fondo se evaporó.

Santander ha intentado todo para evitar demandas

Santander ha sido muy activo para evitar demandas relacionadas con sus inversiones en el fondo de Madoff, que resultó ser una estafa piramidal. En España, ofreció unas preferentes con una rentabilidad muy baja a sus clientes a cambio de su renuncia a emprender acciones judiciales, oferta que aceptó la práctica totalidad de los afectados por aquello de que más vale pájaro en mano. En EEUU, acordó pagar 235 millones de dólares al liquidador del patrimonio de Madoff también para evitar demandas (curiosamente, éste sí ha demandado a la sociedad de valores del yerno de Emilio Botín).

Sin embargo, no pudo impedir la presentación de dos demandas tipo class action (aunque demande una sola persona, si gana se pueden sumar todos los afectados que quieran y cobrar la indemnización decretada) en Miami y Nueva York. La primera fue desestimada y la segunda es la que acaba de ser admitida a trámite, a la espera de la audiencia del día 10.