Es noticia
La bomba latente que amenaza la Operación Campamento: el futuro de Cuatro Vientos
  1. Mercados
  2. Ibex Insider
Ibex insider

La bomba latente que amenaza la Operación Campamento: el futuro de Cuatro Vientos

El mundo del dinero encierra claves de poder y de intereses que explican el sentido de muchas operaciones y movimientos. Ibex Insider ofrece pistas para entender a sus protagonistas

Foto: Vista de la torre de control de Cuatro Vientos. (Europa Press/Alberto Ortega)
Vista de la torre de control de Cuatro Vientos. (Europa Press/Alberto Ortega)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Cuando, el 11 de enero de 1911, una comisión militar propuso al Ministerio de la Guerra adquirir terrenos en Cuatro Vientos para instalar una escuela de pilotos que alumbró uno de los primeros aeródromos de España, la Gran Vía de Madrid apenas era un proyecto, cuyas obras habían sido inauguradas nueve meses antes por el rey Alfonso XIII.

Un siglo después, aquel aeropuerto sigue operativo, tanto para uso militar como civil, a pesar de haber sido engullido por el crecimiento de la ciudad y de sumar varios informes recomendando su cierre por cuestiones de seguridad. Una bomba latente que, ahora, cobra el doble de importancia al sobrevolar una de las grandes apuestas del recién estrenado Ministerio de Vivienda: la Operación Campamento.

Este plan urbanístico fue una de las grandes bazas que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lució hace un año, cuando anunció su arranque definitivo con la foto de rigor, y a falta todavía de numerosos hitos. Este esperado megadesarrollo promete sacar al mercado 12.000 de viviendas, el 60% de las cuales contará con algún tipo de protección, en el corazón de Madrid, una de las ciudades que más problemas de acceso a la vivienda tiene de España.

El problema viene cuando se recuerda que gran parte de la superficie de Campamento se encuentra bajo la afección de la superficie limitadora de Cuatro Vientos, en concreto, de lo que se conoce como superficie cónica, que es por la que despegan y aterrizan los aviones, las operativas más incompatibles con la presencia de viviendas, por ser las más peligrosas.

Foto: Un pasajero observa los paneles informativos del aeropuerto de El Prat. (EFE/Enric Fontcuberta) Opinión

Este problema, lejos de ser nuevo, se conoce desde hace 20 años, cuando se aprobó el plan director para Cuatro Vientos y arrancaron desarrollos como el PAU de Carabanchel o el Ensanche Norte de Alcorcón. Ya entonces, se puso sobre la mesa calificar como suelo no urbanizable gran parte de los terrenos que rodean el aeródromo y que forman parte de la actual Operación Campamento.

Suma y sigue, porque en 2007, el Plan de Infraestructuras Aeroportuarias de la Comunidad de Madrid estableció como una de las prioridades el cierre de Cuatro Vientos, debido a la cercanía de desarrollos. "Ya no reúne las necesarias condiciones de seguridad, las instalaciones son insuficientes y carece de posibilidad de ampliación", decía. Incluso, la ficha urbanística de Campamento que elabora el Ayuntamiento de Madrid advierte de las servidumbres aeronáuticas.

Hace tres años, la Dirección General de Aviación Civil presentó una modificación de las servidumbres aeronáuticas de Cuatro Vientos, con Alcorcón, Brunete, Boadilla del Monte, Leganés, Madrid, Pozuelo de Alarcón y Villaviciosa de Odón como municipios afectados...

placeholder Terrenos de Operación Campamento. (EC)
Terrenos de Operación Campamento. (EC)

Hace una década, cuando el Gobierno de Ignacio González en la Comunidad de Madrid negoció con el magnate Sheldon Adelson promover una suerte de Eurovegas en Alcorcón, ya se estudió el cierre de aeropuerto o, al menos, su conversión en helipuerto. La propia Aena, empresa pública encargada de gestionar la infraestructura, se ha mostrado en el pasado a favor de quitar lo que se conoce en la jerga del sector como alas fijas (aviones y avionetas) y dejar solo helicópteros.

De este modo, convirtiendo Cuatro Vientos en helipuerto, se solucionaba el problema principal de afección, ya que no impacta en los helicópteros, pudiéndose trasladar las escuelas de vuelo a otros aeropuertos, como el proyectado segundo aeropuerto de Madrid o Madrid City Sur. Además, una helisuperficie no necesita tanta pista, lo que abre también la puerta a que pudieran destinarse terrenos de Cuatro Vientos a otros usos más lucrativos, frente a las pérdidas de cinco millones de euros anuales que genera actualmente.

Foto: Parte de los terrenos de los antiguos cuarteles de Campamento. (EFE/Chema Moya)

Sotto voce, ante las recurrentes presiones de asociaciones vecinales y de los municipios afectados por cerrar Cuatro Vientos, desde la Administración se reconoce el negativo impacto del aeródromo y la necesidad de encontrar una solución. Pero, cuando toca ponerse frente a las cámaras, se juega al gato y al ratón, alegando que a priori se podría mantener la actividad, pero que todavía está todo pendiente de la configuración del plan urbanístico definitiva de Operación Campamento.

Unos trabajos llamados a ver la luz bajo el recién estrenado mandato de la nueva ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, que parece llamada a ser quien active definitivamente la bomba que late bajo los terrenos de los antiguos cuarteles del Ejército. Un aterrizaje tan forzoso como necesario.

Cuando, el 11 de enero de 1911, una comisión militar propuso al Ministerio de la Guerra adquirir terrenos en Cuatro Vientos para instalar una escuela de pilotos que alumbró uno de los primeros aeródromos de España, la Gran Vía de Madrid apenas era un proyecto, cuyas obras habían sido inauguradas nueve meses antes por el rey Alfonso XIII.

Noticias de AENA Operación Campamento
El redactor recomienda