Bancos ganadores y perdedores de la guerra por captar depósitos de clientes

Los grandes bancos se han sumado tarde, y de forma tímida, a la guerra de depósitos que iniciaron meses atrás pequeñas y medianas entidades. Estas ofertas, especialmente tras el verano, han sido suficientes para provocar un trasvase de liquidez minorista entre los bancos.

Cajas rurales y bancos pequeños o medianos como ING, EBN, MyInvestor, BIG, BFF, Openbank o WiZink han tenido ofertas que han llegado a superar el 4%. Esto les ha permitido crecer a costa de la gran banca, que hasta verano rechazó mover ficha. Y cuando lo hizo, fue de forma menos agresiva.

Las entidades trasladaron la subida de tipos, desde el principio, a los clientes institucionales y a los de banca privada. Pero no al gran público minorista, que se resignó a comprar fondos de inversión garantizados o de renta fija a vencimiento, o a perder poder adquisitivo con la inflación.

Ha habido ofertas para remunerar la cuenta y depósitos a plazo. Bankinter lleva muchos años remunerando el 5% a nuevos clientes que domicilian la nómina. El año pasado incrementó el tope remunerado de 5.000 a 10.000 euros. Sabadell ha optado por remunerar la cuenta online. La oferta actual es del 6% los tres primeros meses y el 2% después, con un TAE del 3%.

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En cuanto a los depósitos a plazo, CaixaBank abrió la veda en septiembre con un producto que, a partir de 5.000 euros, paga entre el 1% y el 2% a un año en función de la vinculación del cliente con el banco. La primera oferta de la gran banca no llegó hasta el verano. Bankinter se abrió entonces a pagar más del 2,5% a algunos clientes. BBVA irrumpió en noviembre con un depósito al 2,75%.

Los bancos se han pasado año y medio diciendo que los clientes tenían opciones para rentabilizar su ahorro, como los fondos de rentabilidad objetivo o los garantizados, productos con los que han inundado el mercado y que han provocado un récord de captaciones en la industria española en 2023 de 18.362 millones, y han seguido a este ritmo en enero de 2024, con otros 2.343 millones.

Las entidades tenían liquidez de sobra en este ciclo, por los LTRO del BCE, que ya han devuelto, las emisiones preventivas de 2020 y 2021 a tipos bajos o negativos, y el exceso de ahorro de los españoles durante la pandemia. A esto se une la falta de apetito por el crédito, con la caída en hipotecas. No había mucha ambición en crecer. Hasta la CNMC analizó la ausencia de remuneración de los depósitos.

En cualquier caso, la remuneración del pasivo provoca movimientos. Así se ha visto en la presentación de resultados de la banca. BBVA ha sido la entidad, junto al Sabadell, que más ha caído en volumen de depósitos, pese a remontar en el último trimestre, coincidiendo con el lanzamiento de un depósito a plazo al 2,75%.

El banco presidido por Carlos Torres registró un descenso del 2,2%, hasta los 216.198 millones. Sin embargo, en el cuarto trimestre había crecido un 1,63%, suavizando el descenso en el ejercicio. El coste de los depósitos en España de BBVA pasó del 0,21% al 0,86%.

La otra entidad que ha registrado mayor volumen de salidas en depósitos ha sido Banco Sabadell, que también se ha quedado atrás en venta de fondos. El banco dirigido por César González-Bueno, que no da cifras sobre la captación en la cuenta online remunerada, ha terminado 2023 con 119.781 millones, un 2,2% menos que el ejercicio anterior. El coste de los depósitos, excluyendo TSB en Reino Unido, subió del 1,49% al 2%.

Así, entre los grandes bancos cotizados, Sabadell y BBVA tienen los peores registros. En positivo solo están Bankinter y CaixaBank, con captación de pasivo a lo largo del año.

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Bankinter viene siendo uno de los bancos que más crece en los últimos años con su cuenta online remunerada, y ha repetido en 2023, con un aumento del 2,1%, hasta los 70.270 millones. El coste del pasivo ha subido del 0,1% al 0,89%. Se posiciona cerca ya del volumen de pasivo de Unicaja, que cayó un 1,2%, hasta los 73.475 millones. En el banco andaluz, el coste de los depósitos ha pasado del 0,05% al 0,6%.

En el caso de CaixaBank, que fue la primera entidad entre las cotizadas en ofrecer un depósito a toda la clientela, aumentó el pasivo en un 1%, hasta los 387.499 millones. El crecimiento se sustenta en la captación del último trimestre, ya con el depósito en su oferta, con un incremento del 1,5%, hasta los 397.499 millones. El coste de los depósitos se elevó desde el 0,16% al 0,89%.

Por último, en Banco Santander ha habido un resultado negativo, aunque inferior al de Sabadell o BBVA. El grupo cántabro incrementó el coste del pasivo desde el 0,22% al 1% en España, pero el volumen de depósitos cayó un 1,6%, hasta los 324.099 millones, a pesar de la recuperación en el cuarto trimestre, con un impulso del 0,5%.