CaixaBank revoluciona la banca privada con comisiones directas por asesoramiento

Si en Estados Unidos los ricos pagan comisiones por el asesoramiento y la gestión, aquí acabará pasando. Esta es la tesis de CaixaBank, que aspira a combinar un crecimiento en banca privada con duplicar el peso de las carteras gestionadas y el asesoramiento independiente entre sus clientes.

Esta idea supone popularizar el cobro explícito con asesoramiento independiente, carteras gestionadas y transmisión y recepción de órdenes. Un deseo de los supervisores que fomenta la nueva regulación de MiFID II, pero que es igualmente rompedor con el ‘statu quo’ de la banca privada, que se ha basado tradicionalmente en el modelo de las retrocesiones (parte de la comisión de gestión que se queda el distribuidor). CaixaBank está tratando de tomar el liderazgo de esta tendencia, lo que también es revolucionario, ya que los profesionales más veteranos siempre señalan a Banco Santander como el que solía marcar la pauta.

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Óscar Giménez

Actualmente, CaixaBank tiene un volumen de 63.000 millones de patrimonio bajo gestión en banca privada —por debajo de Santander y BBVA—, según datos de la entidad a cierre de 2017, mientras que en lo que llama ‘banca premier affluent’ gestiona otros 120.000 millones. El primer servicio está dirigido a clientes con más de 500.000 euros disponibles para invertir, mientras que el segundo se enfoca entre los que disponen de entre 60.000 y 500.000 euros.

Entre este público, también está creciendo el ‘robo advisor’ que presentó en marzo. Según fuentes de la entidad, la herramienta Smart Money ha alcanzado los 25 millones bajo gestión. “Hay pocos ejemplos en Europa con más patrimonio y ninguno que ya sea rentable, ya que se diseñó con tecnología y recursos”, apuntan las mismas fuentes.

Objetivo de duplicar

La meta de la entidad no solo es crecer en este segmento, clave para la banca ya que la rentabilidad que ofrecen las comisiones es más alta que el margen de intereses en el contexto de tipos al 0%. También quiere que la clientela se oriente hacia el pago explícito, lo que es un cambio de tercio importante en un sector articulado en torno a las retrocesiones. Con la normativa MiFID II, los asesores deben declararse independientes o no independientes. Los primeros no podrán recibir retrocesiones y deberán justificar un valor añadido para el inversor.

La división que dirige Víctor Allende, director ejecutivo de CaixaBank Banca Privada y Banca Premier, planea así duplicar el peso del pago explícito de comisiones, que actualmente suponen el 25% del área de banca privada y el 10% del área ‘premier’. Pero la meta del banco presidido por Jordi Gual es alcanzar ratios del 40% en banca privada y de entre el 25% y el 35% en banca 'premier'.

“Ya somos líderes en el pago explícito, pero la idea es seguir aumentando la cuota”, aseguran en CaixaBank. También sucede con las carteras gestionadas, otro producto que está ganando relevancia en la banca. El patrimonio bajo gestión con este servicio es de 22.000 millones, mientras que el total de fondos de inversión es de 51.000 millones.