El Ibex se queda descolgado del festival de máximos históricos de EEUU y Alemania

El Ibex 35 se metió entre pecho y espalda una comida alcista superior al 30% entre finales de junio y finales de octubre. Tras semejante carrera, necesitaba energía adicional para dar continuidad a las subidas. Y confiaba en que la temporada de presentación de resultados empresariales proporcionara ese combustible. Pero no lo ha hecho.

Si bien es cierto que las empresas que lo conforman han visto crecer su beneficio, no lo es menos que la parte de arriba de las cuentas, la más vinculada a los ingresos y la actividad directa de las compañías, aún no despega.Y como la cosecha de resultados ha sido buena, pero no sobresaliente, ha servido la excusa que el Ibex necesitaba para digerir el subidón anterior.Como consecuencia, ha cerrado su segunda semana consecutiva de caídas, algo que no sucedía desde agosto. No ha sido un descenso dramático, ni siquiera importante, pero su retroceso del 0,5%, hasta los 9.696 puntos, confirma cierta sensación de agotamiento a la espera de que entren en escena nuevos catalizadores.

Entre los damnificados de los resultados, empresas como Sacyr, OHL,FCC o IAG, con caídas comprendidas entre el 4 y el 6,5% en la semana en la que han presentado sus cuentas trimestrales. En el otro lado de la balanza se ha colocado Técnicas Reunidas, que ha recibido el apoyo de los inversores tras un repunte de sus márgenes de beneficio. En el conjunto de la semana, las acciones de la empresa de ingeniería han repuntado un 3,1%, hasta los 39,43 euros, el precio más alto desde 2011.

Pero no sólo de los resultados ha vivido el Ibex. También ha habido movimientos empresariales... saldadas con distinto premio por parte de los inversores. Grifols, con una subida semanal del 5,2%, ha recibido el aplauso de los inversores tras comprar la unidad de diagnóstico de sangre de Novartis. Por el contrario, CaixaBank ha sido la cruz después de que La Caixa vendiera un 8,6% del capital del banco. Los títulos de CaixaBank han acumulado un descenso semanal del 7,6%.

Máximo tras máximo en Alemania y Wall Street

La falta de fuerza del Ibex ha sido común con el Mit italiano, que se ha dejado un 1,4%, pero ha contrastado con el comportamiento alcista de la mayor parte de los índices europeos. El Dax alemán ha sumado otro 1% y ha escalado hasta los 9.168,7 puntos. Nunca antes había caminado por estos niveles.

Otro mercado que no deja de marcar un máximo histórico tras otro es el estadounidense. Con unas subidas semanales superiores al 1%, el Dow Jones y el S&P 500 han marcado los registros más altos de todos los tiempos. El primero acaricia los 16.000 puntos por primera vez y el segundo, los 1.800 puntos. Han llegado a estos niveles sin precedentes tras seis semanas alcistas consecutivas, una secuencia que desemboca en un dato de especial relevancia: hasta la fecha, ambos acumulan subidas superiores al 20%, con lo que en 2013 podrían cerrar su mejor ejercicio desde 2003.

De este modo, Wall Street ha dado su particular aprobación a que Janet Yellen se convierta en la primera mujer en presidir la Reserva Federal (Fed) a partir de febrero. Sobre todo, después de que la candidata confirmara el jueves, en su comparecencia en el Senado, su compromiso con el mantenimiento delos estímulos monetarios hasta que la recuperación económica y del mercado laboral no sea más fiable.

Sin sobresaltos en la deuda

En cuanto a la deuda pública, ha firmado una semana sin grandes sobresaltos. Y como ocurre con el caso del Ibex, permanece a la espera de algún apoyo adicional que empuje al bono español a prolongar la mejoría de los últimos meses. Así, el rendimiento de los títulos a 10 años se ha moderado del 4,11 al 4,07%, pero continúa sin el empuje suficiente como para colocarse por debajo del 4%.

Siguiendo su estela, la prima de riesgo, que mide la diferencia entre esa rentabilidad y la de los bonos alemanes a 10 años, tampoco ha registrado cambios importantes. En concreto, ha despedido la semana en los 236 puntos, en línea con los 235 puntos del viernes anterior.

En el mercado de divisas, el euro ha digerido con rapidez la sorprendente decisión del Banco Central Europeo (BCE), que el 7 de noviembre redujo de forma inesperada los tipos de interés al mínimo histórico del 0,25%, y ha retornado a cotas próximas a los 1,35 dólares. En concreto, se ha apreciado un 0,8%, hasta los 1,348 dólares.

Las dudas vistas esta semana en los mercados se han mostrado claramente en el petróleo. Mientras el barril Brent, de referencia en Europa, ha rebotado un 3%, hasta los 108,2 dólares, el barril estadounidense WTI ha sufrido su sextodescenso semanal consecutivo. Ha bajado cerca de un 1%, hasta los 93,7 dólares.

El que ha ido de menos a más en la semana es el oro. Tras haber descendido hasta los 1.268 dólares, ha terminado remontando hasta los 1.288 dólares, el mismo nivel al que había cerrado la semana anterior. Con mes y medio por delante para despedir el año, acumula una caída del 23% en 2013.