La banca aprovecha el tirón de los test de estrés para abrir el grifo de la financiación

Los bancos vuelven a tantear el mercado en busca de liquidez una vez conocidos los resultados de sus test de fortaleza. De hecho, las entidades que han salido airosas de las pruebas se han lanzado a colocar su deuda, pese a que todavía tengan que pagarla más cara. Los primeros en hacerlo ayer fueron BBVA, Credit Suisse y Rabobank, pero se espera que otros bancos sigan sus pasos en los próximos días aprovechando la inyección de confianza a los inversores.

Los resultados de estrés han demostrado que 84 de los 91 bancos examinados superarían los escenarios económicos más duros planteados y han arrojado más transparencia de la esperada por los analistas sobre los tenedores de deuda soberana.

No obstante, el cerrojo continúa echado. En este sentido, Fitch destacaba en su último informe la dificultad que los bancos de España, Portugal, Irlanda y Grecia encuentran en el acceso a los mercados de deuda y capitales para conseguir financiación.

De hecho, estos países copan el 40% del total otorgado por el Banco Central Europeo y “la apelación de financiación al BCE es difícil que baje si los mercados no se abren”, aseguraba ayer el consejero delegado de BBVA, Ángel Cano, durante la presentación de las cuentas trimestrales del banco.

Tal es así que, la entidad presidida por Francisco González ayer pagó 170 puntos básicos por encima del ‘mid-swap’ –el tipo de referencia de esta clase de operaciones- en la colocación de 1.250 millones de euros en bonos senior a cinco años, frente a los 85 puntos básicos sobre ‘mid-swap’ que pagó el pasado mes de abril por 1.000 millones.

Pero no han sido los únicos. Rabobank ha emitido 250 millones con una rentabilidad 90 puntos básicos superior al tipo de referencia y Credit Suisse ha vendido deuda híbrida en dólares con un cupón de entre 7,875% y el 8%, según publica Bloomberg.com.

Hoy la cita con los mercados la podría tener Deutsche Bank, según asegura la agencia haciendo referencia a fuentes cercanas al asunto, así como las estadounidenses Bank of America y Morgan Stanley, que podrían aprovechar la cierta relajación de las tensiones para encontrar financiación.