Multas por disfrazarse de pene o juegos en la calle: así prohíbe España las despedidas de soltero

Los meses de verano son la temporada oficial de las despedidas de soltero. La llegada del buen tiempo suele ser el pistoletazo de salida para este tipo de celebraciones y, durante los fines de semana estivales, las calles de muchos municipios españoles se llenan de grupos de amigos que celebran el fin de la soltería de uno de ellos (o ellas). El boom que han experimentado este tipo de festejos, sin embargo, no siempre es mirado con buenos ojos. Para los vecinos de algunas ciudades, este perfil tan concreto de turismo no es bienvenido y cuentan con normativas específicamente dirigidas a acotar ciertos comportamientos habituales en las despedidas.

Logroño: "Prohibidos juegos molestos"

Al analizar las diferentes ordenanzas de ciudades españolas, la de Logroño destaca como una de las más estrictas en lo que respecta a estos eventos. El ayuntamiento de la ciudad decidió poner coto a este tipo de celebraciones en 2018 con la aprobación de una normativa municipal sobre "fomento de la convivencia ciudadana". El texto es toda una declaración de intenciones y ya en las primeras líneas se indica que el objetivo de la normativa es dar solución a los escenarios "correspondientes a las despedidas de soltero/a", así como las "acumulaciones de personas en las vías y espacios públicos comúnmente denominadas botellones".

Las restricciones más llamativas aparecen reguladas en el artículo 13, que directamente prohíbe los "comportamientos realizados por grupos de personas que, con motivo de despedidas de soltero/a u otras celebraciones, provoquen la alteración de la convivencia ciudadana o el orden público". Pero no solo eso. En los siguientes apartados hace mención a actividades frecuentes en este tipo de eventos, como los juegos en la calle. En concreto, restringe la "práctica de juegos en espacios públicos que, por su naturaleza, puedan causar molestias a los vecinos y peatones". En especial, especifica la ordenanza, quedan vetados los juegos "con instrumentos o con objetos que puedan poner en peligro la integridad física de los usuarios de espacios públicos, de bienes, servicios o instalaciones, tanto públicos como privados".

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La vestimenta es otro de los puntos en los que suelen fijarse los ayuntamientos, limitando o prohibiendo el tipo de disfraces que pueden llevar los futuros cónyuges. En este sentido, la ordenanza logroñesa no permite "transitar o permanecer desnudo/a de manera integral por los espacios públicos" o llevar atuendos o disfraces que "no cubran los órganos genitales" o sean abiertamente xenófobos, racistas u homófobos. Esta misma restricción vinculada a las celebraciones de despedidas de soltero también figura en ordenanzas de otros municipios españoles como Conil de la Frontera (Cádiz)

Por último, la ordenanza riojana prevé varias sanciones por conductas ruidosas, como "gritar, cantar o vociferar en la calle", así como llevar altavoces o megáfonos, a no ser que las autoridades competentes lo hayan autorizado expresamente (si, por ejemplo, hay una manifestación). Las multas por realizar cualquiera de estas conductas varían dependiendo de la gravedad, aunque la cuantía más alta no supera los 600 euros.

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Marbella, contra los disfraces de pene

En Marbella, la preocupación principal de los vecinos no está dirigida tanto al ruido o el consumo de alcohol como al atuendo de los visitantes que vienen a celebrar el fin de la soltería de un amigo. A finales de 2018, el ayuntamiento de la ciudad aprobó una ordenanza sobre convivencia ciudadana en espacios de uso público en la que multa a aquel que transite "desnudo o desnuda, con torso desnudo o en ropa interior". Adicionalmente, también pone coto a los manidos disfraces sexuales tan habituales en las despedidas al prohibir los "complementos que representen los genitales o zonas íntimas del ser humano", así como los "muñecos/as, aparatos, símbolos o elementos de carácter sexual", los disfraces "ofensivos" y, adicionalmente, los megáfonos. Una línea similar sigue Mojácar, en Almería, cuya normativa hace referencia expresa a las "actitudes indecorosas con muñecas hinchables".

Marbella multa los disfraces o complementos "que representen los genitales" y Mojácar, las "actitudes indecorosas con muñecas hinchables"

Por su parte, Granada —uno de los destinos más populares para este tipo de eventos— también sanciona ciertas conductas relacionadas expresamente con las despedidas, como el consumo de alcohol y drogas en la calle, el uso de megáfonos y otros ruidos molestos y la realización de "necesidades fisiológicas" en la vía pública. Las multas por estas actitudes pueden alcanzar los 3.000 euros.

Cebreros y Talayuela, autorización previa

La localidad de Cebreros, en Ávila, es otro de los lugares que no miran con buenos ojos las despedidas. En una ordenanza aprobada en 2011 para regular la seguridad y convivencia ciudadana, el ayuntamiento exige a los grupos que quieran celebrar el fin de soltería pedir previamente una autorización municipal en la que especifiquen la franja horaria de la celebración, el responsable del evento, el lugar o lugares donde tendrá lugar la celebración, el número aproximado de participantes y si disponen de "ambientación musical".

Una exigencia similar a la que pide el consistorio de Talayuela, en Cáceres, que desde 2010 obliga a contar con una autorización para celebraciones de carácter privado, "como es el caso de las despedidas de solteros/as y otras similares". En todo caso, y como matiza el acuerdo, estos permisos no podrán otorgarse en horarios comprendidos entre las 12 de la noche y las nueve de la mañana del día siguiente. Las multas por incumplir este punto pueden alcanzar los 3.000 euros.