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El letrado que dejó Cuatrecasas para montar el 'cobrador del frac' de la información
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Sus clientes, grandes firmas y asesorías

El letrado que dejó Cuatrecasas para montar el 'cobrador del frac' de la información

Durante casi una década, Derek Lou ejerció en el área de Fiscal del bufete, pero se fue para poner en marcha su proyecto personal. Ahora, trabaja con grandes despachos y asesorías jurídicas de primer nivel

Foto: Equipo de Parallel.
Equipo de Parallel.
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Se suele decir que los grandes bufetes de la abogacía de los negocios funcionan como un engranaje. Su modus operandi recuerda al de una máquina bien engrasada donde cada cual tiene su función y se busca trabajar mano a mano para lograr la máxima eficiencia y productividad. La rentabilidad se ha convertido, de hecho, en una obsesión para las grandes estructuras. Y Derek Lou, CEO y cofundador de Parallel, es consciente de ello. Este abogado de formación ejerció en el departamento de Fiscal de Cuatrecasas durante más de ocho años. Durante ese tiempo, se dedicó a identificar todas aquellas tareas tediosas, pero no demasiado complejas, que robaban tiempo a sus compañeros, y hubo una que llamó especialmente su atención: la recopilación previa de los datos necesarios para la llevanza de un asunto. "No podía ser es que alguien que estaba facturando 400 o 500 euros la hora a su cliente tuviera que estar detrás de ellos continuamente para conseguir datos básicos; era algo que me frustraba mucho", rememora. Así nació Parallel, una startup barcelonesa que presume de ahorrar un 75% del tiempo de trabajo de los abogados y acelerar el cierre de los asuntos casi cuatro veces. "Somos algo así como el cobrador del frac de la información legal", resume Lou.

La idea estuvo rondando su cabeza durante bastante tiempo. "Se perdían muchas horas en esto, y ya no solo persiguiendo al cliente para que te enviara la información que necesitabas para trabajar; también era una lata estar buscando en una cadena de correos interminable un documento concreto", detalla Lou en conversación con El Confidencial. Durante un año, el letrado dedicó sus ratos libres para trabajar en la herramienta, inspirándose en diferentes plataformas ya existentes, como Airtable Finalmente, en diciembre de 2019 decidió dar el salto al vacío y, junto con sus compañeros y cofundadores, Alex Romera —actual COO de la compañía— y Santi Albo —CTO— crearon Parallel.

En septiembre de 2020, la startup barcelonesa consiguió cerrar una ronda de financiación por valor de 350.000 euros, tras lograr el apoyo de business angels del ecosistema tecnológico y legal de España. Entre ellos, fundadores de compañías como Captio, Doctoralia o Force Manager y Bankinter a través de su programa Venture Capital. A día de hoy, su equipo está formado por ocho profesionales —de los cuales, ninguno supera los 35 y muchos de ellos tienen experiencia previa en firmas— y entre sus clientes se encuentran desde bufetes como Cuatrecasas, Andersen o Broseta hasta grandes asesorías jurídicas de empresa.

Foto: José María Olivares, Úrsula García, Gloria Hernández y Jorge Ferrer, socios de FinReg360. (Alejandro Martínez Vélez)

El funcionamiento de la herramienta es sencillo. Se trata de una plataforma que, a través de inteligencia artificial, centraliza el intercambio de información, de forma que, tanto el letrado como el cliente tienen un espacio en el que pueden consultar y visualizar rápidamente los documentos. En el momento en el que entra un asunto en el despacho (y una vez ha pasado los filtros correspondientes), el programa identifica de manera automática qué tipo de documentación se requiere y la solicita al cliente. En caso de no enviarla, la misma plataforma manda recordatorios periódicos y avisa al abogado conforme los datos van llegando. En cifras, Lou asegura que Parallel consigue resolver en dos y tres días lo que antes podía demorarse entre dos y tres semanas.

En un principio, el CEO de la startup cuenta que la herramienta estaba pensada únicamente para bufetes. Sin embargo, las tradicionales reticencias de estas organizaciones les obligaron a abrir las miras. "Sabíamos que iba a ser uno de los grandes retos. Aunque es algo que está cambiando, en el momento en el que empezamos, los bufetes no eran por lo general muy tecnológicos. Cuando nos reuníamos con ellos, admitían que también sufrían esa ineficiencia a la hora de conseguir información de los clientes, pero a la hora de la verdad decían que no les interesaba", confiesa.

Foto: Laia Moncosí, CEO de Lawyers for Projects. (Cedida)

Estos recelos les obligaron a adaptar sus servicios a los departamentos legales de las compañías, que parecían mostrar un mayor entusiasmo hacia lo digital. "En ese proceso de reunirnos con potenciales clientes de empresa, nos comentaron que también tenían ese problema de recopilar información", detalla. En concreto, las trabas se centraban en los procesos de know your costumer, o KYC. Se trata de un procedimiento de identificación y verificación de la identidad de los clientes de las compañías con el objetivo de evitar relaciones comerciales que deriven en el blanqueo de capitales, la corrupción y la financiación del terrorismo, o entre otros. Esta medida viene exigida por ley para organizaciones de determinados sectores, como el asegurador, banca o inmobiliario.

Tras varios meses de trabajo, lanzaron su nueva función, que resultó ser un éxito. Consiguieron consolidar el proyecto y empezar a pensar en el futuro. La pandemia también contribuyó en cierta medida a mejorar la penetración de su proyecto entre los grandes bufetes, ya que generó cierto cambio de mentalidad, "aunque todavía creo que está en un momento de madurez tecnológica temprano", apostilla.

En todo caso, el objetivo de los cofundadores de Parallel a medio y largo plazo pasa por seguir investigando y desarrollando su plataforma. Y la inteligencia artificial va a jugar un papel importante en este sentido. "Lo que a mí me gustaría conseguir el día de mañana es que todos estos flujos de intercambio de información sean completamente automáticos. Que solicites toda la documentación y al receptor le saliera una pantalla en la que le pregunte: ¿aceptas enviar toda esta información? Y al aceptar, lo busque entre los archivos y lo envíe. Para mí, esa debería ser la experiencia ideal", zanja.

Se suele decir que los grandes bufetes de la abogacía de los negocios funcionan como un engranaje. Su modus operandi recuerda al de una máquina bien engrasada donde cada cual tiene su función y se busca trabajar mano a mano para lograr la máxima eficiencia y productividad. La rentabilidad se ha convertido, de hecho, en una obsesión para las grandes estructuras. Y Derek Lou, CEO y cofundador de Parallel, es consciente de ello. Este abogado de formación ejerció en el departamento de Fiscal de Cuatrecasas durante más de ocho años. Durante ese tiempo, se dedicó a identificar todas aquellas tareas tediosas, pero no demasiado complejas, que robaban tiempo a sus compañeros, y hubo una que llamó especialmente su atención: la recopilación previa de los datos necesarios para la llevanza de un asunto. "No podía ser es que alguien que estaba facturando 400 o 500 euros la hora a su cliente tuviera que estar detrás de ellos continuamente para conseguir datos básicos; era algo que me frustraba mucho", rememora. Así nació Parallel, una startup barcelonesa que presume de ahorrar un 75% del tiempo de trabajo de los abogados y acelerar el cierre de los asuntos casi cuatro veces. "Somos algo así como el cobrador del frac de la información legal", resume Lou.

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