¿Adelanto electoral en Galicia? PSOE y Sumar, sin candidatos oficiales y con la alerta activada

Bastó una broma de Feijóo desde el estrado del Congreso para poner a Galicia en modo preelectoral. En la segunda sesión del debate de investidura, y en respuesta al diputado del BNG, Néstor Rego, el candidato del PP se refirió a los supuestos problemas de la oposición en el Parlamento gallego. “Espero que al presidente de la Xunta no se le ocurra convocar, porque menudo lío van a tener ustedes”, lanzó. La afirmación del presidente de los populares provocó una catarata de reacciones desde todos los ángulos de la política gallega y abrió el melón de unas autonómicas antes de la fecha prevista inicialmente, en el verano de 2024.

De disolver el Parlamento de forma anticipada, el PSdeG deberá enfrentarse a la ausencia de un candidato oficial y el proyecto Sumar, a la incertidumbre sobre la forma que tomará en el feudo de Yolanda Díaz. El Bloque se perfila como la única formación opositora con candidata confirmada, Ana Pontón. El calendario apunta al 12 de julio como fecha límite, aunque podría sufrir un adelanto técnico para coincidir con las Europeas del 6 de junio. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, no tardó en salir al paso para afirmar que “para nada” se plantea un anticipo electoral, aunque sus declaraciones solo permiten descartarlo a muy corto plazo.

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Las elecciones supondrán la primera reválida para Alfonso Rueda, que sucedió a Feijóo en la Xunta a mitad de legislatura tras su dimisión para liderar el partido en Madrid. A juicio de Pontón, la tormenta desatada por las palabras de Feijóo es “un culebrón” que deja en evidencia “el escaso peso político de Rueda, que ni siquiera es capaz de marcar la fecha electoral en Galicia sin que le marquen el paso desde el PP de Madrid”. En el PSdeG están convencidos de que sus intenciones pasan por disolver la Cámara y convocar a urnas. “Tras el fracaso de Núñez Feijóo, el pánico se va a apoderar del PP en Galicia, yo estoy completamente convencido. Y eso nos lleva previsiblemente a un adelanto electoral, lo que será entendido por la ciudadanía gallega como una muestra de debilidad”, manifestó el exdelegado del Gobierno.

“Tras el fracaso de Núñez Feijóo, el pánico se va a apoderar del PP en Galicia", señaló Besteiro

En su respuesta a los comentarios de Feijóo, Rueda descartó una convocatoria inmediata, con referencias al inminente debate sobre el estado de la Autonomía y a la Ley de Presupuestos. Pero no disipó las dudas sobre si agotará la legislatura. Es una posibilidad con la que trabajan los equipos de todos los partidos, incluido el PP, en el que, al menos en privado, nadie niega la estrecha vinculación existente entre el calendario electoral gallego y lo que ocurra con la investidura de Pedro Sánchez.

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En el caso de que no haya Gobierno, Rueda podría optar por convocar elecciones en enero, coincidiendo con las generales, para aprovechar el factor Feijóo en Galicia y reducir la incertidumbre que rodea su propia candidatura. Las elecciones de julio, en las que los populares gallegos arrebataron tres diputados a los socialistas, juegan a favor de esa decisión. Pero también en el caso de que Sánchez sea reelegido, el presidente de la Xunta se vería tentado a un anticipo que castigue el precio del pacto con los independentistas. El propio Rueda deslizó este escenario, al afirmar: “Intuyo que quieren que votemos cuanto antes para no asimilar las enormes cesiones que van a hacer”.

El camino de las autonómicas en el PSdeG está trazado con una bicefalia entre el secretario general, Valentín González Formoso, que también preside la Diputación de A Coruña, y el propio Gómez Besteiro, aunque no se descarta la aparición de algún otro candidato que fuerce unas primarias. El calendario señalaba el pasado 17 de septiembre para esas primarias, pero en agosto Ferraz decidió posponerlas hasta que se desbloquee la situación política nacional. La duda está en saber si Besteiro será el único aspirante –a pesar de no haber confirmado todavía su disposición– o si algún crítico como el exsecretario general Gonzalo Caballero le disputará la candidatura y obligará a los militantes a pasar por las urnas.

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El otro frente de la oposición está abierto en el ámbito de Sumar, donde Yolanda Díaz tendrá más fácil el entendimiento con Podemos que a escala nacional, dada la afinidad entre la dirección de la formación morada en Galicia y la vicepresidenta segunda. Eso no quiere decir que el camino esté ni mucho menos despejado, ya que deberá aglutinar también a Esquerda Unida y a las mareas locales y, sobre todo, elegir candidato. Díaz no descarta a la nueva portavoz en el Congreso, Marta Lois. Pero ni la decisión depende solo de ella, ni le será fácil evitar unas primarias abiertas como las que reclamaba la dirección nacional de Podemos para las generales.

La competencia entre socialistas y nacionalistas por liderar un gobierno alternativo al PP no contribuyen a una campaña como la liderada por Sánchez y Díaz

También se presenta difícil de lograr un entendimiento entre las fuerzas de izquierda, como el que exhibieron el PSOE y Sumar en las pasadas generales, puesto de ejemplo por Yolanda Díaz para Galicia. “El mensaje que lanzo es que podemos ganar, que aunque tengamos diferencias lógicas, caminemos juntas, que transmitamos a los gallegos que la Xunta puede ser ganada”, declaró. La clara competencia entre socialistas y nacionalistas por liderar un eventual gobierno alternativo al del PP no contribuyen a una campaña como la liderada por Sánchez y Díaz. De hecho, los nacionalistas tiraron de ironía para afirmar que lo que la vicepresidenta pide es “el voto para el BNG”, en tanto que el PSdeG, a través de su portavoz parlamentario, Luis Álvarez, replicó a Díaz: “Los socialistas no necesitan que ningún señor o señora nos indique el sendero por el que transitar”.