Los dos distritos que decidirán las elecciones en el Ayuntamiento de Madrid
La mayoría estará muy ajustada. Los bloques están prácticamente empatados y puede ser un puñado de votos lo que decida finalmente hacia dónde se inclina la balanza
En el Ayuntamiento de Madrid las sumas de bloques van muy justas. Todas las encuestas, también la de El Confidencial, apuntan a que un solo concejal podría decidir hacia qué lado se inclina la balanza en la capital. Traducido en votos, puede ser apenas un puñado de ellos. Por eso, cada distrito y cada barrio cuentan. Los resultados de las generales del 28 de abril arrojaron la victoria a las fuerzas de la derecha. PP, Ciudadanos y Vox sumaron 995.995 votos, frente a los 809.471 que alcanzaron PSOE y Unidas Podemos.
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El voto en clave municipal, sin embargo, cambia. Todos los partidos coinciden en que el empuje que obtuvo Pedro Sánchez en Madrid lo tendrá la candidatura de Manuela Carmena en esta ocasión (los sondeos también apuntan a que la mayor parte de votantes socialistas se pueden inclinar por la regidora). De manera que, aunque las preferencias cambien, los votos obtenidos en la izquierda se distribuirán entre Carmena, Pepu Hernández (PSOE) y Madrid En Pie Municipalista (Carlos Sánchez Mato).
También es previsible que Vox acuse una caída fruto de los peores resultados que consiguió el 28-A en comparación con las expectativas generadas. Las encuestas demuestran que el recuerdo de voto es escasísimo y que un tercio de los electores retornaría al PP y, en menor medida, a Ciudadanos. De ahí, que el cambio en el equilibrio de fuerzas pueda ser determinante en una plaza, la de Madrid, que ya estuvo muy ajustada en las municipales de 2015. Un concejal le dio la mayoría a Carmena y al PSOE aunque el PP fue el partido más votado.
Con los resultados de las generales en la mano, hay dos distritos que parecen ser la clave de lo que pasará este domingo. Tetuán y Ciudad Lineal. Los únicos dos en los que PSOE, PP y Ciudadanos están muy igualados y las diferencias entre la primera y segunda fuerza es de apenas dos puntos. De ahí que cualquier cambio en el voto pueda suponer que la suma de los bloques se decante por uno u otro lado. En Tetuán, los socialistas fueron la primera fuerza el 28 de abril con el 25,7% de los votos. El PP quedó segundo (22,5%) y Ciudadanos consiguió el 20% de los sufragios. Hay dos barrios del distrito, Cuatro Caminos y Castillejos, en los que los populares quedaron primeros. En Valdeacederas y Berruguete los naranjas quedaron por delante del PP, aunque el PSOE fue la primera fuerza. Y en otros como Almenara, el partido de Martínez-Almeida solo sacó dos votos al de Villacís.
En el caso de Ciudad Lineal, el escenario es similar. Los socialistas consiguieron el 26,8% de los votos, el PP obtuvo el 23% y Ciudadanos, el 20,5%. De los 9 barrios que se encuentran en este distrito, el PSOE fue primero en seis y el PP en tres. Colina, Atalaya y Costillares se tiñeron de azul, seguidos de Ciudadanos. En algunos como Pueblo Nuevo o Ventas, el ganador claro fue el PSOE con 10.500 votos y 8.152 respectivamente. Pero en otros como Quintana, Concepción o San Pascual el PSOE fue primero por muy poco: le separó del PP 972 votos, 275 y 266 votos respectivamente. Las formaciones entienden que estas zonas serán clave para ver si el PSOE o Carmena retienen esa mayoría o, por el contrario, populares y naranjas dan la campanada y se colocan en cabeza.
El 28-A dejó, en la práctica, un empate técnico de bloques. En 9 distritos de la capital la victoria fue de la izquierda claramente (básicamente los del sur), y en otros 9 ganó la derecha (sobre todo, en el norte). En algunos como Arganzuela y Latina, a pesar de que PP, Cs y Vox sumaron más (cuestión de décimas) la victoria está prácticamente asegurada en la izquierda. Prueba de ello es que la primera fuerza, el PSOE, obtuvo una clara victoria: 27% en el primer caso, frente al 20% en el que se situó la segunda fuerza (que fue Podemos), y 29,4% frente al 20% con el que le siguió el PP. Estos casos, coinciden las distintas formaciones políticas, son claros.
La verdadera batalla de votos está en los distritos como Tetuán y Ciudad Lineal, en los que unas cuantas papeletas pueden dar la vuelta al 'ranking' de partidos. Si PP o Ciudadanos crecen lo bastante como para situarse alguno de los dos como primera fuerza, podrían darle la vuelta al resultado. Por el contrario, si la izquierda (PSOE o Más Madrid) mantiene los resultados del 28-A y uno de los dos permanece como el primer partido en ese conjunto de barrios, Carmena podría quedarse como regidora.
El caso de Tetuán tendrá especial relevancia por la división de voto que se puede generar en la izquierda. PP y Ciudadanos han apostado por este distrito en precampaña y en estas dos semanas previas a las elecciones, conscientes de que en sus barrios puede jugarse la alcaldía de la capital. Más Madrid lo tiene complicado: en el lado de la izquierda, el distrito es territorio de Madrid En Pie, teniendo en cuenta que su concejala Montserrat Galcerán (antes de Ahora Madrid, y este 26-M en el equipo de Sánchez Mato) tiene más fuerza que la candidatura de Carmena. La principal asociación de vecinos apoya a Galcerán y Madrid En Pie ha desarrollado una campaña muy volcada en este distrito. Por el contrario, la candidatura de Más Madrid apenas ha pisado el distrito en estas semanas, centrados en grandes actos en los que la fuerza es evidente como el distrito Centro.
Algo similar ocurre en Arganzuela. Aunque, a priori, la izquierda no tendrá problemas para vencer, otra fiel de Sánchez Mato, Rommy Arce, —concejala de este distrito— pretende hacer un 'agujero' importante a Carmena en esta zona. La fuerza que logren retener los socialistas en estos territorios pueden ser determinantes para compensar la caída de Más Madrid. En Madrid habrá que seguir el recuento de votos hasta el final para hablar de un resultado definitivo.
En el Ayuntamiento de Madrid las sumas de bloques van muy justas. Todas las encuestas, también la de El Confidencial, apuntan a que un solo concejal podría decidir hacia qué lado se inclina la balanza en la capital. Traducido en votos, puede ser apenas un puñado de ellos. Por eso, cada distrito y cada barrio cuentan. Los resultados de las generales del 28 de abril arrojaron la victoria a las fuerzas de la derecha. PP, Ciudadanos y Vox sumaron 995.995 votos, frente a los 809.471 que alcanzaron PSOE y Unidas Podemos.
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