Junqueras y Rovira pisan el acelerador y llaman a superar la división de bloques

ERC mete presión a la CUP y a Puigdemont y Comín de cara a la posible investidura de Jordi Sànchez el próximo lunes 12 de marzo. El líder del partido republicano, Oriol Junqueras, y la secretaria general del partido, Marta Rovira, han llamado este viernes a superar la división de bloques y las debilidades del republicanismo a través de la creación de una mayoría amplia y transversal para entrar "en una nueva fase de país". Tanto ERC como JxCAT buscan atraer a la CUP, que dijo que no apoyaría ningún candidato ni ningún programa que no pasara por impulsar la república. Por otro lado, la renuncia a su acta de Puigdemont y Comín también podría abrir la puerta a una investidura de Sànchez.

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"Hemos medido nuestras fuerzas, hemos constatado nuestra fortaleza pero también nuestras debilidades. Si nuestra fortaleza permanece intacta y somos capaces de superar nuestras debilidades, saldremos adelante. Para hacerlo necesitamos más consistencia y una mayoría sólida, amplia y transversal para superar la división de bloques", escriben en un artículo a cuatro manos dirigido a su militancia.

Se muestran convencidos de que sólo podrán transformar la realidad si acumulan una suma democrática y pacífica ingente, y concluyen: "Como país tenemos que entrar en una nueva fase. Todo lo que hagamos -todo- a partir de ahora tiene que servir para ampliar la base". Es decir, añaden, "la creación de la república tiene que superar una inercia enorme de una multitud de grupos conservadores que quieren continuar disfrutando de los privilegios que han acumulado durante generaciones".

Según Junqueras y Rovira, "como país tenemos que entrar en una nueva fase, y todo aquello que hagamos a partir de ahora tiene que servir para ampliar la base", de modo que "lo que genere consensos y complicidades hacia el proyecto republicano, adelante, y lo que no los genere, descartémoslo". "Sabemos que sólo podremos transformar la realidad si acumulamos una suma democrática y pacífica ingente", apuntan ambos líderes de ERC antes de pedir alejarse de "las declaraciones altisonantes y de los fuegos artificiales que, después del espectáculo, no dejen en herencia a nuestros hijos ninguna herramienta concreta".

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Advierten, en este punto, que "la vía más directa para volver al autonomismo es que el independentismo vuelva a ser una minoría ruidosa que se aleje de la centralidad", por lo que recomiendan "abrazar a los que piensen diferente y convencerlos para construir colectivamente el futuro de todos". "Estamos ante una nueva etapa", destacan, "que requiere acumular fuerzas para ganar el país entero" el cual, explican Junqueras y Rovira, "hay que construir cada día, paso a paso, sin desfallecer, empezando hoy por hacer el Govern", y hacer de este último "un instrumento efectivo al servicio del interés general para construir un país para todos".

Atraer a la CUP

ERC y JxCAT buscan atraer a la CUP. Para ello han llegado a un acuerdo de legislatura que incide en aspectos del pasado como crear leyes en ámbitos en que la Generalitat no tiene competencia o activar normas suspendidas por el TC, El programa es de izquierdas sin tapujos: renacionalización del agua, plan de vivienda pública, leyes de pobreza energética, apostar por la banca pública y como gran anzuelo: un nuevo 9-N que remate un proceso constituyente para crear la nueva república, algo que sería delito y que comprometería a los diputados con causas pendientes como Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva o Carme Forcadell.

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Agencias

Para conseguir el apoyo de los 'cupaires' se vuelve a plantear un programa de izquierdas y de choque con el Ejecutivo de Mariano Rajoy. Con otra consulta que tendrá “todas las garantías”. Sin embargo,fuentes del independentismo avanzan que el sacrificio del PDeCAT ha sido estéril. La CUP no comprará. Y ayer el desánimo era importante en las filas soberanistas. Para la CUP, el proyecto carece de credibilidad.