¿Podría Puigdemont ser detenido en Dinamarca?

La Fiscalía del Tribunal Supremo ha presentado un escrito para reactivar la orden de detención contra el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que se encuentra en Dinamarca para asistir a un debate sobre la situación catalana. Esta orden, anulada el pasado mes de diciembre, actúa de manera similar en Dinamarca que en Bélgica, dado que en ambos países los delitos de rebelión y sedición están previstos por las leyes y en los dos se requiere, para un caso como el de Puigdemont, un examen de la solicitud por la Fiscalía antes de detenerle.

Entonces, el juez consideró que se debían retirar las órdenes europeas que había emitido contra Puigdemont y sus 'exconsellers' en el 'exilio' belga porque la fórmula de entrega de Puigdemont a las autoridades españolas podría condicionar la evolución de la investigación y los posibles delitos por los que se pueda procesar a los imputados. La clave es que la entrega por parte de un país europeo a España sería por unos delitos concretos, lo que impondría que solo pudieran ser juzgados por esos y no por cualquier otro tipo penal que surgiera de la investigación, que todavía está en marcha.

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Esa condición no varía por tratarse de Dinamarca o Bélgica, según han explicado a la agencia EFE fuentes jurídicas que han añadido que, en principio, la detención de Carles Puigdemont en la capital danesa difícilmente podría ser inmediata, dado que la Fiscalía danesa debería estudiar el requerimiento antes de actuar. No sería lo mismo si se tratara de un huido con sentencia firme, pero es que en el caso de Puigdemont, se trata de un investigado por la Justicia que aún no ha sido juzgado.

En cualquier caso el abogado de Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas ha considerado "arriesgado" el viaje del 'expresident' a Dinamarca. En declaraciones a la emisora catalana RAC1, Alonso-Cuevillas ha explicado que se han valorado "muchos escenarios" y que "todo es casi posible". Además, ha asegurado que no descarta que la Fiscalía y el juez "ya tengan pactado" que la euroorden no se pueda cursar a tiempo porque "España no se puede arriesgar a hacer otra vez el ridículo".

Eso sí, señala, "que no se curse la euroorden hoy no quiere decir que no se pueda hacer en otro lugar. Lo pueden hacer en cualquier momento". Por último ha explicado que si el país, en este caso Dinamarca, recibe la orden europea de detención debe evaluar si hay doble incriminación y si el país que exige la entrega "ha cumplido con todas las garantías procesales exigibles mínimas". "Eso es lo que Bélgica consideró que no había ocurrido", ha concluido.

Finalmente, el juez del Supremo Pablo Llarena ha rechazado la petición de la fiscalía para que dictara de urgencia una nueva orden de detención europea, siguiendo así fiel a su idea de no hacer uso de este instrumento hasta que el procedimiento se encuentre más avanzado.