Málaga, Sevilla… y también Granada: ¿El Hermitage ruso pintará andaluz?

¿Qué tiene el Hermitage que tantas ciudades lo quieren? En esta eterna disputa por acoger eventos y continentes culturales, esta colección rusa, una de las mejores del planeta, se ha convertido en una de las piezas más codiciadas tras la renuncia del Ayuntamiento de Barcelona. La competición se centra en Andalucía, pero no hay que olvidar nunca a Madrid.

Málaga, Sevilla y Granada es el tridente que cuenta con más posibilidades para acoger el Hermitage, que preveía en Barcelona más de 800.000 visitas el primer año (el 70% de ellas turistas). Fuentes próximas a las negociaciones reconocen a El Confidencial el enfriamiento de los contactos de las instituciones con los responsables de la institución rusa, con hilo directo con el presidente Vladimir Putin.

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En las conversaciones reina la opacidad. El oscurantismo es la norma. Todo se hace 'sotto voce', no solo para que ninguna ciudad sepa lo que está haciendo la otra con el objetivo de conseguir el museo, sino por las dudas sobre la viabilidad de un proyecto en el que los representantes del Hermitage no han dado la cara y prefieren una discreción que raya en el secretismo.

Colau y Abogacía del Estado

La sociedad Museo Hermitage, controlada en un 80 % por el fondo de inversión suizoluxemburgués, Varia, dio los primeros pasos para desembarcar en Barcelona hace diez años. En mayo de 2021 consiguió una autorización de la Autoridad Portuaria para instalarse frente al mar, en el barrio de la Barceloneta, pero el Ayuntamiento dirigido por Ada Colau lo paró. También hubo un reparo legal de un representante de la Abogacía del Estado.

Es ahí cuando el proyecto se abre a distintas alternativas. Aparte de las ciudades ya mencionadas, también Valencia y Lisboa han sido candidatas. En Málaga se estudian con lupa las conexiones de la sociedad Stoneweg Spain SL, filial Stoneweg SA, con sede en Ginebra (Suiza) e impulsora del Hermitage español junto al fondo de inversión Varia. "No sé si hay gato encerrado, pero igual que hay que ver si salen las cuentas de la Copa América en Málaga, también convendría analizar si merece la pena que venga el Hermitage", subrayan a El Confidencial fuentes del Ayuntamiento andaluz.

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Fuera del entorno local cunde la sensación de que habría espacio para otra franquicia museística internacional más, sobre todo por el posicionamiento de la marca de Málaga que ha supuesto el Museo Pompidou y el Museo Ruso San Petersburgo Málaga, que es sede del Museo Estatal Ruso. El recinto se inauguró hace siete años y mantiene un acuerdo de permanencia al menos hasta 2035. Los responsables de este último centro ven con buenos ojos la posible presencia del Hermitage y admiten que el museo da la bienvenida al turista ruso, pero no es su principal foco de atención.

El Ayuntamiento de Sevilla es quien se ha movido más en los últimos meses con más empuje para conseguir el museo para la capital andaluza

Fuentes cercanas a la jefatura del Hermitage consultadas por El Confidencial admiten que hay parón en estos momentos por la situación bélica en Rusia. El Ayuntamiento de Sevilla es quien se ha movido en los últimos meses con más empuje para conseguir el museo para la capital andaluza. Las gestiones las ha capitaneado el alcalde Antonio Muñoz ya desde su anterior puesto de teniente de alcalde de Juan Espadas.

Por su parte, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, se ha reunido con el embajador de Rusia en España, Yuri Korchagin, para que la ciudad nazarí acoja la sede del museo. "Pocas ciudades de Europa atesoran lo que Granada y eso interesa. Ni lo tiene Málaga ni otras ciudades. Aparecemos como espacio patrimonial histórico de los más demandados y visitados y estamos en esa carrera y en esa línea".

Oligarquía rusa

En el consejo de directores del Hermitage existe el convencimiento de que las candidaturas de Madrid y Sevilla son las que ahora mismo tienen más posibilidades para ganar la partida, pero aún queda tiempo para la decisión. "Todo está abierto. Ahora mismo no hay nada claro", confirman a este diario estas fuentes con hilo directo con la cúpula del museo.

El factor Putin también es fundamental. No hay que olvidar que el presidente ruso es natural de San Petersburgo y tiene capacidad ejecutiva e influencia sobre los nombramientos en el museo y el establecimiento o no de futuras sedes. Pero antes de que una propuesta formal llegue al Kremlin, algún miembro relevante de la oligarquía rusa sería el encargado de convencer a Putin de la viabilidad de un Hermitage español.