Kichi caldea la huelga del metal: "Tuvimos que meterle fuego para que en Madrid se fijen"

El hilo en Twitter con el que arrancaba la mañana era toda una declaración de intenciones que remachó después. Megáfono en mano, y ante los huelguistas, el alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi' caldeaba la tercera jornada de conflicto laboral en el sector del metal con unas polémicas declaraciones. “Hemos tenido que meterle fuego para que en Madrid se fijen en nosotros”, manifestó, para añadir que “eso es una lástima” y aliarse con los manifestantes al recalcar que “somos obreros y no delincuentes”: “Lo que hacemos es defender el plato de comida encima de la mesa y nada más”.

El regidor, de esta manera, cobraba protagonismo en una tercera jornada de paro indefinido marcada en su inicio por la ruptura de las negociaciones entre los sindicatos y la patronal y que prosiguió con nuevos cortes de carretera que volvieron a colapsar la red viaria en la capital gaditana.

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“Violencia es que en Madrid solo nos escuchen cuando arde nuestra tierra harta de aguantar fatigas. Esto no es nuevo. Esto llevamos tiempo sufriéndolo y hasta que no han visto una barricada y humo, no se han dignado a bajar de la M30”, publicaba el primer edil en la citada red social, para después, a las puertas de la Subdelegación del Gobierno, con unos trabajadores a los que sus representantes pedían que escucharan con respeto, avisar que “no venga nadie a insinuar siquiera que en Cádiz se montan barricadas y que son cuatro exaltados los que están quemando coches”.

Kichi justificó que “hemos tenido que meterle fuego para que en Madrid se fijen en nosotros”, mientras que en su 'post' afirmó que “no es solo un convenio, se trata del presente y el futuro de la Bahía”. “Conservar lo poco que nos queda tras el anuncio, también, del cierre de otra multinacional”, ha incidido.

El regidor reafirmó su compromiso con los huelguistas “desde el papel y la trinchera que me toca ahora disputar y combatir”. “Tenéis todo mi apoyo. Porque sois los míos. Porque soy de los vuestros. Por un convenio laboral digno, contra el cierre de Airbus, por la carga de un trabajo y por nuestros hijos y nuestras hijas. Que viva la lucha de la clase obrera”, concluyó.

Paralelamente a estos gestos, las distancias entre las partes parecen agudizarse. La Federación de Empresarios del Metal de la provincia de Cádiz (Femca) criticó este jueves la posición inmovilista de las organizaciones sindicales e informó de que no seguirá negociando hasta que no aprecie un cambio en sus reivindicaciones.

El secretario general de esta organización empresarial, José Muñoz, calificó como “inasumibles” las exigencias planteadas hasta el momento y aseguró que las compañías “no pueden soportar el cambio en las tablas salariales que solicitan los sindicatos y que supondría la quiebra para la mayoría de ellas”.

En declaraciones a Canal Sur, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, respondió describiendo como “cerril” y “provocadora” la postura de la patronal.

"Tenéis todo mi apoyo. Porque sois los míos. Porque soy de los vuestros", dijo el alcalde

Es algo que “viene haciendo desde septiembre, cuando intentó, incluso, quitar la vigencia del convenio”, insistió, para añadir que “es una situación muy violenta contra la negociación del convenio colectivo”. Los empresarios “tienen que ser conscientes de que se piden unas reivindicaciones muy razonables”, como “el incremento del salario de acuerdo con el coste de la vida”. “Espero que en las próximas horas se presione, de verdad, donde hay que presionar, no a los huelguistas, sino a la patronal, que es la verdadera responsable de esta situación”, ha sentenciado.

Si las declaraciones de las últimas horas no abortan el encuentro, las partes en conflicto están citadas a una nueva reunión después de romperse las negociaciones.