Andalucía se ve obligada a retirar 2 modelos de mascarillas distribuidas en hospitales

El Servicio Andaluz de Salud (SAS) se ha visto obligado a retirar de la circulación dos modelos de mascarillas FFP2 que había distribuido la propia Consejería de Salud y Familias entre los médicos de hospitales andaluces, después de que comprobara que no cumplían los requisitos de protección suficientes. El SAS no ha confirmado el número total de mascarillas que llevarían en circulación desde hace casi una semana y han tenido que ser retiradas, o cuántas de ellas ya habían sido utilizadas por los facultativos andaluces.

Los modelos afectados son el Elite Respirator EB09.049 y el KN95 Mask de la marca Purvigor, "que cumplen con condiciones distintas a las indicadas para determinar su equivalencia a una FFP2" (una de las de mayor protección, utilizadas en hospitales). La retirada de estas mascarillas defectuosas se une a otros casos anteriores como los modelos 'verdes' de la marca Garry Galaxy distribuidos desde el Gobierno central y que tuvieron que ser devueltos tras demostrarse que no ofrecían la protección suficiente.

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Un mercado "complejo"

El SAS ha detallado que, tras la retirada el 17 de abril de las mascarillas defectuosas Garry Galaxy, de las que 68.400 fueron destinadas a Andalucía, ha incorporado en sus protocolos un sistema de verificación de los equipos de protección individual adquiridos "para comprobar su calidad y adecuación a los criterios especificados en sus fichas técnicas". Unas verificaciones tras las que estos dos nuevos modelos han tenido que ser retirados. Uno de los modelos no cumple con las condiciones indicadas por la normativa para las mascarillas FFP2, mientras que el otro modelo cumple como FFP1 (menor capacidad de protección), pero no como FFP2.

El Servicio Andaluz de Salud ha justificado este paso en falso en la compra y distribución de material de protección a los sanitarios andaluces en "la complejidad actual del mercado", que "lleva a adquirir estos productos a proveedores no habituales, por lo que se hace necesario este sistema de comprobación que supone el envío de muestras al Centro Nacional de Medidas de Protección para su correspondiente validación".

Cádiz, Córdoba y Málaga

Tras la orden de retirada de mascarillas, el SAS ha solicitado a los hospitales donde fueron distribuidas que identifiquen las unidades donde han sido utilizadas y que practiquen test de diagnóstico de coronavirus PCR a los médicos y personal sanitario "de las áreas habilitadas para pacientes con sospecha o infecciones covid que hayan utilizado dichas mascarillas durante la realización de procedimientos que generen aerosoles", según confirman fuentes del Hospital Reina Sofía de Córdoba, uno de los centros afectados, a El Confidencial.

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"En las Garry Galaxy, mandaron foto de cómo eran y por lo menos las podías reconocer, pero en este segundo aviso son varias y no sé que forma tienen, y, además, parece que son varias marcas", se lamenta una doctora que prefiere permanecer en el anonimato.

Estas mascarillas fueron distribuidas en la mayoría de los centros sanitarios de Cádiz, en el Hospital Regional y en la UCI del Hospital Clínico de Málaga, y en el Reina Sofía de Córdoba (las del tipo Elite Respirator EB09.049), donde se utilizaron en pruebas funcionales de Neumología en la UCI y en la unidad de covid. Un número indeterminado fue enviado a la UCI del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada y otras al Hospital Torrecárdenas de Almería, donde no llegaron a utilizarse, según ha informado el sindicato CSIF Sanidad Andalucía, quien también ha denunciado su "total indignación por que se haya jugado de nuevo con los profesionales de la sanidad, entregando material cuya efectividad no está contrastada".