El Gobierno da luz verde a dos nuevos buques de acción marítima (BAM-III) por 550 M

El Consejo de Ministros autorizó el martes la compra de dos buques de acción marítima (BAM-III) para la Armada por un importe de unos 550 millones de euros hasta 2027. Este plan de adquisición, que han sorprendido a los expertos porque no estaban contempladas en los presupuestos del Ministerio de Defensa ni en los planes especiales de armamento, tienen como objetivo reemplazar a los veteranos patrulleros clase 'Infanta Elena' que dejan de estar en servicio en 2023.

El Gobierno, en sus últimas semanas en ejercicio, está acelerando algunos de los planes de actualización de equipos para las Fuerzas Armadas. La semana pasada, el Ejecutivo aprobó otros dos importantes programas para la compra de 16 aviones de vigilancia y patrulla marítima Airbus C295 por 1.700 millones de euros y la licitación de 4.500 vehículos militares tácticos todoterreno (VMTT) por 315,7 millones.

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"La antigüedad de los patrulleros de la clase 'Infanta Elena' haría necesaria una elevada inversión para mantenerlos en servicio; además, con esa inversión no se podrían recuperar sus capacidades por la obsolescencia de la plataforma y de los sistemas de a bordo. Por ello ha sido necesario adelantar la baja del buque 'Infanta Elena' al primer trimestre de 2023 y la del 'Infanta Cristina' al segundo semestre de 2023", explica la referencia del Consejo de Ministros.

Los BAM pueden ser configurados para una amplia variedad de misiones como protección y escolta -dispone de un cañón de 76 milímetros, dos cañones de 25 milímetros y ametralladoras de 12,7 y 7,62 milímetros-, lucha contra el terrorismo, la piratería, el narcotráfico y la trata de personas o a control marítimo, salvamento y rescate. Con casi 94 metros de eslora y unos 14 de manga, en su cubierta pueden aterrizar varios modelos de helicópteros, incluyendo el NH90, el SH-60 o el AB-212.

La principal novedad de estos dos nuevos BAM respecto a los seis previos es que contarían con capacidades antisubmarinas (ASW) mediante la incorporación de un sonar modular. La primera generación de BAM -el Meteoro, el Rayo, el Relámpago y el Tornado- tiene su base en el Arsenal de Las Palmas, mientras que la segunda -Audaz y el Furor- operan desde el Arsenal de Cartagena y son los buques de superficie más modernos de la Armada.

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Defensa y Navantia firmaron en 2021 la orden de ejecución de un buque de acción marítima de intervención subacuática por 166,5 millones de euros. Esta unidad es una variante de los seis BAM que ya opera la Armada, pero especializado en inteligencia, investigación oceanográfica y apoyo y rescate para los submarinos S-80. El proyecto del A-21 Poseidón superó en octubre del año pasado la revisión inicial de diseño y se le asignaron 70 millones para 2023. La Armada también avanza con Navantia la renovación de los buques hidrográficos costeros, que se encargan de levantar nuevas cartas marinas y explorar el relieve submarino, con un presupuesto de 162,7 millones de euros entre 2023-2026.