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Feijóo, a cubierto: ni convoca protestas, ni acude a manifestaciones
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Feijóo, a cubierto: ni convoca protestas, ni acude a manifestaciones

El líder de la oposición no ha asistido personalmente a ninguna concentración desde que aterrizó en Génova y no prevé ningún cambio. El 11 de diciembre, PP y Vox coincidirán en una protesta en Navarra en defensa de la Guardia Civil

Foto: El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. (EFE/Sergio Pérez)
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. (EFE/Sergio Pérez)
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Alberto Núñez Feijóo ha huido de los bandazos estratégicos que caracterizó especialmente la última etapa de Pablo Casado al frente del PP. Su predecesor en Génova intentaba discurrir también por la vía centrada, pero sin dejar de mirar a su retrovisor derecho. En su último año al frente de la oposición, al dirigente le dio tiempo, por ejemplo, a reeditar la foto de Colón en mayo de 2021 para protestar contra los indultos a los líderes del procés o a dirigir una campaña de firmas por todo el territorio nacional con el mismo objetivo; iniciativa que, por otra parte, terminó en fracaso. Nada de eso está en la cabeza del gallego, que no dará orden a los suyos para agitar el descontento social —como está acostumbrado a hacer Vox—. Él no ha participado en una sola protesta desde que llegó a Génova. Y así pretende seguir.

Esa estrategia del líder de la oposición volverá a materializarse el próximo 11 de diciembre, cuando está prevista una manifestación de apoyo a la Guardia Civil en Navarra después de que el Gobierno pactase con Bildu la retirada a la Guardia Civil de las competencias de tráfico y seguridad vial en esta comunidad autónoma a cambio del apoyo de los abertzales a los Presupuestos. Tanto PP como Vox han confirmado asistencia, pero no habrá foto de Feijóo y Abascal.

Foto: Diputados y senadores del PP en un acto contra Irene Montero y la ley del sí es sí. (EFE/Javier Lizón)

Las agendas no están cerradas, pero lo más probable es que acuda una delegación de los populares a la protesta, y no el propio líder, que no es asiduo a este tipo de convocatorias. En el caso de Vox sucede lo contrario, y en su equipo subrayan que Santiago Abascal acudirá si su agenda lo permite. La última vez que sucedió algo parecido fue en la manifestación convocada en Barcelona en defensa del uso del castellano en las aulas catalanas. A pesar de que acudieron representantes de Génova, como Cuca Gamarra, la ausencia de Feijóo fue denunciada y explotada por Ciudadanos y Vox, cuyos líderes sí viajaron a la ciudad condal para ponerse tras la pancarta.

El PP se ha desmarcado también de todas las movilizaciones organizadas por su homólogo de la derecha en contra del Gobierno de Sánchez, especialmente al hilo de la tramitación de la rebaja del delito de sedición. Vox convocó a los suyos en Barcelona y Madrid, pero no recibieron el apoyo de los populares. "No participamos en protestas de otros partidos políticos", suscriben. Los de Abascal, sin embargo, siguen una estrategia opuesta y no dudan en criticar la "tibieza" o los "complejos" con los que, a su juicio, actúa el primer partido de la oposición.

Foto: El líder de Vox, Santiago Abascal, en el Congreso. (EFE/Fernando Villar)

Este jueves, cuando el PP convocó a todos sus diputados y senadores para protestar frente al Congreso por la ley del solo sí es sí, varios dirigentes de Vox, como Iván Espinosa de los Monteros o Carla Toscano, decidieron colarse en la foto que los populares tenían programada junto a los leones de la Cámara Baja. No estaba pactado, pero en la formación verde justifican que, sea quien sea el promotor, acudirán a todas las convocatorias con cuyos postulados estén de acuerdo. Y este caso no fue una excepción. Feijóo se ausentó, según su equipo, por "motivos de agenda".

En Génova insisten en que la hoja de ruta del partido no pasa por convocar manifestaciones bajo el sello del PP contra el Gobierno. Tampoco impulsarán recogida de firmas por el mal precedente que sentó Pablo Casado. La vía de oposición predilecta de Feijóo, volcado en acentuar un perfil moderado frente al histrionismo de Vox, es la institucional y parlamentaria. Con todo, no desatiende las peticiones que llegan desde el partido de no perder "el contacto con la calle", y ha lanzado en las últimas semanas un calendario de mítines por diferentes puntos del territorio nacional —especialmente en los feudos del PSOE— para cargar contra la "deriva institucional" de Sánchez.

Alberto Núñez Feijóo ha huido de los bandazos estratégicos que caracterizó especialmente la última etapa de Pablo Casado al frente del PP. Su predecesor en Génova intentaba discurrir también por la vía centrada, pero sin dejar de mirar a su retrovisor derecho. En su último año al frente de la oposición, al dirigente le dio tiempo, por ejemplo, a reeditar la foto de Colón en mayo de 2021 para protestar contra los indultos a los líderes del procés o a dirigir una campaña de firmas por todo el territorio nacional con el mismo objetivo; iniciativa que, por otra parte, terminó en fracaso. Nada de eso está en la cabeza del gallego, que no dará orden a los suyos para agitar el descontento social —como está acostumbrado a hacer Vox—. Él no ha participado en una sola protesta desde que llegó a Génova. Y así pretende seguir.

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