La ropa de hombre más cara del mundo llega a Madrid: abrigo, 44.000€; cinturón, 124.000€

La marca de ropa de hombre más cara del mundo, la italiana Stefano Ricci, abrirá su primera tienda en España. La compañía constituyó el pasado 5 de julio una sociedad mercantil, Stefano Ricci Spain SL, para articular su implantación en territorio nacional. Aún no ha decidido la ubicación de su nuevo establecimiento, pero estará localizado en el centro de Madrid. El artículo más barato de su catálogo son unas chanclas de playa que cuestan 300 euros y tiene abrigos que valen más de 44.000 y un cinturón de 124.000.

El desembarco de Stefano Ricci en la capital se produce en una época de enorme incertidumbre económica, pero su mercado opera en un plano ajeno a las inquietudes del mundo terrenal. Está considerada una de las firmas preferidas por las grandes fortunas y oligarcas. Cuenta con más de una decena de tiendas en Rusia, casi una veintena en el mercado asiático y dos en Dubái y otra en Abu Dabi. También está presente en Nueva York, Miami y Beverly Hills. En 2017, invirtió seis millones de euros en la apertura de una tienda en el barrio londinense de Mayfair, uno de los más exclusivos de la capital británica. Madrid se sumará en los próximos meses a esa lista.

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E. Sanz

La empresa tiene su cuartel general en Florencia (Italia) y produce el 100% de su muestrario en suelo transalpino. De momento, ha fijado su domicilio en España en un barrio residencial a las afueras de la capital, según ha podido averiguar El Confidencial. Su aterrizaje ha sido pilotado por el despacho Business & Law, que ya representa en territorio nacional a clientes como el magnate y extenista rumano Ion Tiriac y el grupo familiar austriaco con intereses en los sectores inmobiliario y cafetero Julius Meinl, entre otros.

Stefano Ricci no es uno de los fabricantes más conocidos en el mundo del lujo, pero la discreción forma parte de su política. No hace publicidad, ni está asociado a rostros famosos, porque estos suelen pedir ropa gratis. Tampoco hace rebajas, porque lo considera una falta de respeto para los clientes que adquieren sus referencias sin descuento. Emmanuel Macron y Vladímir Putin figuran entre los dirigentes que visten sus prendas.

La habitual reserva de la marca contrasta con la extravagancia de su inventario. En 2020, lanzó un humidificador de viaje para el transporte de puros con ocho cigarros en su interior de una edición especial. El estuche y los ocho puros cuestan 5.350 euros. El coste de una camisa ronda los 1.700 euros, y el de un traje, los 6.000. Se pueden comprar unas chanclas de playa por 300 euros y unas zapatillas de deporte por unos 800.

El mascarón de proa de la firma son los productos ultracaros. Por ejemplo, un simple frasco de perfume de 100 mililitros está a la venta por 450 euros. Ofrece unas botas elaboradas a mano con piel de cocodrilo por 10.000 euros, un abrigo de piel de visón por 44.000 y un cinturón de oro de 18 quilates con diamantes incrustados y correa de piel de cocodrilo que alcanza los 124.000.

En 2019, Niccolò Ricci, hijo del fundador y actual consejero delegado de la compañía, declaró a la televisión estadounidense CNBC que el tique medio de sus cajas registradoras oscila en torno a los 4.000 euros y que un cliente llegó a pagar con su tarjeta 450.000 euros en una sola visita. La empresa asegura que sus ingresos se han disparado en los últimos años.

“Hemos estado trabajando en este proyecto durante meses porque creemos que España es uno de los lugares más elegantes del mundo. Esta apertura es una parte de un plan de expansión que incluye nuevas tiendas en Nueva York, Pekín, Londres, París, Florencia y Milán. Celebramos este año nuestro 50 aniversario y, pensando en el futuro, Madrid es un sueño que se hace realidad”, asegura Niccolò Ricci a este diario en una contestación por correo electrónico.