Feijóo comunica a Sánchez la elección de Esteban González Pons para negociar el CGPJ

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha oficializado este lunes la designación de Esteban González Pons como interlocutor del PP para negociar con el Gobierno la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Constitucional. El dirigente sustituye así a Enrique López, anterior responsable de Justicia durante la etapa de Pablo Casado. El PP se ha comprometido a retomar las conversaciones para renovar el órgano de gobierno de los jueces, pero entienden que el Gobierno debe priorizar la interlocución en materia económica, ya que el Ejecutivo no ha dado aún una respuesta al plan alternativo económico que remitió el pasado viernes a Moncloa. El PP vincula el sentido de su voto el próximo jueves, cuando se debatirá el decreto 'anticrisis' del Gobierno, a que Sánchez se abra a debatir algunas de sus propuestas.

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Ana Belén Ramos

A través de un mensaje de Whatsapp, el líder de la oposición ha comunicado al presidente del Gobierno el cambio de negociador en materia de Justicia, y ha aprovechado para presentar a Juan Bravo, como interlocutor económico. Moncloa, por su parte, ha comunicado a Feijóo que, por la parte del Gobierno, será el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, el encargado de las negociaciones para renovar el CGPJ; y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la responsable del área económica. "Ambos se pondrán próximamente en contacto con las personas designadas por el PP", avanzan fuentes gubernamentales, que lanzan un órdago al líder popular. "Las obligaciones constitucionales, como es la renovación de sus órganos, se cumplen, no se negocian".

Fuentes del partido señalan, además, que el presidente del PP le ha recordado que "tratar la cuestión económica es urgente dada la proximidad de la votación sobre el decreto con que el Gobierno plantea solventar la crisis de inflación que vive nuestro país", pero el intento ha sido en vano. El PSOE ha cerrado la puerta a debatir un plan que tachan de "populismo fiscal", lo que complica el respaldo del PP al proyecto 'estrella' de Sánchez.

"Hemos pedido que Sánchez lo estudie, y la respuesta que hemos obtenido ha sido silencio y desprecio", lamentaba el vicesecretario económico, Juan Bravo, durante una rueda de prensa en Génova. "¿De verdad pretende el Gobierno decir que no hay ni una sola propuesta que pueda asumir?", cuestionaba. Los populares defienden que rechazar el plan de Feijóo -que remitió a Moncloa el pasado viernes sin el logo del PP- implica "ir en contra de los españoles" ya que, como reconocen fuentes del partido, el PP ha moderado sus recetas fiscales aplicadas en las comunidades donde gobierna -donde se defienden bajadas generalizadas de impuestos- con el objeto de atraer al acuerdo no sólo a Sánchez, sino al resto de fuerzas y a los agentes sociales, con los que se ha discutido el fondo del documento.

La iniciativa económica planteada por Feijóo incluye una deflactación del IRPF a rentas medias y bajas "con carácter temporal", así como una reducción del IVA al tipo superreducido del 4% para suministros básicos mientras duren los efectos económicos derivados de la guerra de Ucrania o la aplicación de una ayuda directa de hasta 300 euros anuales para las rentas más desfavorecidas, iniciativa esta última que recuerda a otra en el mismo sentido que planteó Unidas Podemos en el mes de marzo. Los populares proponen también estudiar fórmulas para agilizar la ejecución de los fondos europeos o la reducción del Impuesto de Sociedades para dar libertad a las empresas para dar libertad a las empresas para amortizar inversiones en materia energética.

Feijóo prioriza la economía al CGPJ

En la primera reunión entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo en Moncloa, ambos adquirieron el compromiso de "retomar las conversaciones" para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El líder del PP pidió "tiempo" al presidente del Gobierno, que fijó en el 12 de junio el plazo máximo para llegar a un acuerdo tanto para el órgano de gobierno de los jueces como para el Tribunal Constitucional.

Los populares entienden que ningún asunto, incluida la negociación del CGPJ, puede opacar la cuestión económica, a la que Feijóo ha dedicado todos sus esfuerzos desde su aterrizaje en Génova. Por eso entiende que el asunto de los jueces no corre tanta urgencia como llegar a un acuerdo en materia fiscal, que Sánchez se resiste a abordar. La premisa del 'nuevo PP', no obstante, pasa por mantener la mano tendida y no fijar líneas rojas en la negociación del CGPJ como sí hizo Pablo Casado, cuyas condiciones sumieron al órgano en un bloqueo que ya dura años.