Los informes de las prisiones catalanas para el indulto: “Es un defensor de la negociación”

Las cárceles catalanas impulsaron la concesión del indulto a los líderes del 'procés' con unos informes que elogian la conducta de los dirigentes independentistas. Los documentos a los que ha tenido acceso El Confidencial ponen en valor la “reflexión autocrítica” de los políticos presos, su predisposición al entendimiento o el riesgo bajo de reincidencia. También destacan factores como su “defensa de los derechos humanos desde la adolescencia”, su “capacidad empática” o su participación en talleres de “diálogos socráticos”, fotografía o cerámica.

“Es un defensor acérrimo de la negociación y muestra un absoluto rechazo de la violencia como estrategia para la resolución de conflictos”, dice la cárcel barcelonesa de Lledoners sobre Jordi Sànchez. Cumple una condena de nueve años de cárcel por un delito de sedición por su papel como presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC). Actualmente, es secretario general de Junts per Catalunya y uno de los hombres de confianza del expresidente de la Generalitat, el fugado Carles Puigdemont.

El centro penitenciario, sobre Jordi Sànchez: "Ante un conflicto, tiende al diálogo"

Sànchez ha sido una de las personas clave en las negociaciones con ERC para la formación de Gobierno en Cataluña, con una apuesta por reeditar la estrategia independentista de 2017. “El conflicto entre Cataluña y el resto de España se resolverá con la amnistía y la autodeterminación", dijo este domingo en una entrevista concedida a 'El Periódico'. La cárcel aprecia en él “una conducta ejemplar” y dice que “los riesgos son bajos", ya que "en las salidas al exterior responde perfectamente a la confianza en él depositada”.

El informe añade que “cuenta con un sistema de valores y creencias desde la juventud y muy inmerso en el activismo social”. Aprecian en él “un alto grado de responsabilidad”, un “pronóstico de reinserción favorable” y “un bajo riesgo de reincidencia”. “Ha desarrollado pensamientos autocríticos (...) ante un conflicto, tiende al diálogo”, insisten desde el centro penitenciario.

Informes de conducta

Una vez que el Gobierno activó el proceso de indulto, el Tribunal Supremo solicitó informes a la Fiscalía, la Abogacía del Estado y las prisiones catalanas de las que dependen los condenados por sedición y malversación. En el caso de las cárceles, se trata de informes de conducta para calibrar las circunstancias personales de los internos. Fueron remitidos al alto tribunal en octubre.

Sobre la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, condenada a 11 años y medio, el centro penitenciario destaca que “ha contribuido a ayudar a que otras internas aumenten su autoestima y a que tomen conciencia de su valor como personas”. “Se prestó voluntaria a participar en todo tipo de actividades”, acumula “cinco recompensas” y “ha obtenido siempre niveles 'A' en las evaluaciones”.

"Su inhabilitación imposibilita que se vuelva a cometer el mismo delito"

Dicen sobre ella que “asume su responsabilidad y las consecuencias de sus acciones” y que las focaliza “en su propia persona y no en los otros”. Ha hecho una “reflexión autocrítica” y “percibe la realidad sin distorsiones”. La cárcel entiende que su riesgo de reincidencia es bajo, entre otras cosas porque permanecerá inhabilitada hasta los 75 años: “Imposibilita que se vuelva a cometer el mismo delito en las mismas circunstancias”.

En la mayoría de los casos, destacan que es la primera vez que delinquen y su capacidad de reinserción cuando salgan de prisión o su apoyo familiar. Otro punto en el que coinciden los informes es no entrar a valorar el fondo de su discurso político: “El pensamiento social y político del interno no es punible ni es la causa de la actual condena”. En este punto, coinciden con las tesis expresadas tanto por el Tribunal Supremo como por la Fiscalía, que siempre han acotado sus condenas a los hechos concretos cometidos en el desafío soberanista del otoño de 2017.

Así se explica, por ejemplo, en el informe sobre el líder de ERC, Oriol Junqueras. De él destacan su capacidad para “promover la cultura y la formación como una herramienta importante para la reinserción laboral y social”. "Se puede afirmar que su dedicación a ayudar y colaborar con el resto de reclusos ha sido plena en todas las vertientes: altruista, siempre dispuesto a ayudar y especialmente positiva”, añaden.

Junqueras y Cuixart

Le describen como una "persona respetada y querida tanto en el módulo de residencia como en el resto del centro, tanto por las actividades docentes que lleva a cabo como por su talante conciliador, integrador y cercano". Junqueras, muy presente también en las negociaciones entre su formación y la de Puigdemont las últimas semanas, cuenta con 13 años de condena, la más alta. Teniendo también en cuenta sus años de inhabilitación, el informe resalta que uno de los aspectos abordados durante su estancia en prisión es “la reorientación de su actividad profesional en el sector privado”.

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Los documentos explican la metodología que han seguido para llegar a sus conclusiones. Una de las actividades programadas para los políticos presos fueron las “excavaciones permanentes”. Por un lado, se trabaja la “escucha activa”, y por otro, “poder tener una experiencia de creación conjunta logrando altos niveles de empatía y respeto”. “Las diferencias individuales dejan de ser importantes y forman parte de un todo, lo importante es el grupo”.

Otro son los llamados “diálogos socráticos”, un método dialéctico que busca dar respuesta a una pregunta o el acercamiento a la verdad filosófica. El objetivo es “romper los prejuicios instaurados” y “permite superar estigmas o límites establecidos en la dialéctica cotidiana, y debe facilitar el entendimiento entre las personas de la comunidad”.

Cataluña es la única comunidad autónoma que ejerce de manera efectiva desde hace años su competencia en la gestión de las prisiones. Depende de la Consellería de Justicia de la Generalitat, que hasta ahora dirigía Ester Capella, de ERC. Desde el pasado 26 de mayo, depende de Lourdes Ciuró, de Junts per Catalunya. Estos informes fueron elaborados por los equipos multidisciplinarios de las cárceles.

En varios de los documentos se repiten los argumentos y las expresiones casi de forma literal. En el caso del líder de Òmnium Cultural, afirman que "ha podido reflexionar, siendo capaz de valorar las consecuencias de sus actos y asumiendo su responsabilidad". En su turno de última palabra del juicio en el Tribunal Supremo, advirtió de que lo volverían a hacer.

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo se opuso de forma contundente la semana pasada a indultar a los dirigentes independentistas. El dictamen de los jueces fue muy crítico con el criterio trasladado por la Administración penitenciaria, y llegó a insinuar que las cárceles incumplieron la ley al informar sobre cada uno de los presos. "Bajo la apariencia de una valoración diferenciada, ha unificado de forma contumaz el régimen y tratamiento de los presos del 'procés', sin atender a la evolución personal e individualizada de cada uno de ellos", decía el alto tribunal. Sostiene que la Administración penitenciaria catalana ha entorpecido de forma notable el cumplimiento de los fines de la pena.