El juez pide a Interior más detalles sobre la compra de la pistola y el portátil de la Kitchen

El juez del caso Villarejo, Manuel García-Castellón, se ha dirigido de nuevo a la Secretaría de Estado de Interior para solicitar detalles sobre la justificación de los fondos reservados que se destinaron a la conocida como operación Kitchen, el espionaje policial a Luis Bárcenas y su entorno familiar durante la etapa de Gobierno del PP. El magistrado reclama en concreto más detalle sobre los conceptos con los que se justificaron los pagos mensuales abonados al chófer del extesorero, Sergio Ríos, y la compra de una pistola y un ordenador.

En un auto al que ha tenido acceso El Confidencial, el instructor detalla que, después de escuchar la declaración de distintos testigos vinculados con la utilización de estas cantidades para investigaciones secretas, existen indicios de la existencia de disfunciones e irregularidades en la gestión y el control de estos fondos, que habrían permitido "su utilización ilícita, propiciando tanto la financiación de una operación policial intrínsecamente ilegal como el enriquecimiento personal de altos mandos policiales".

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Iván Gil

Por ello, en respuesta a una solicitud de la Fiscalía, reclama al departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska que le informe si Ríos fue considerado colaborador fijo u ocasional, el concepto al que se atribuyó la adquisición del arma y del material informático y la clasificación que se dio a esos pagos efectuados entre el mes de julio de 2013 y de septiembre de 2015 para conocer si se justificaron como cantidades destinadas a información y no como cantidades de operaciones.

Según explica el auto, la documentación intervenida en el caso permite suponer que Ríos, bautizado como el 'cocinero' o K2, percibió pagos mensaules de los fondos reservados. La documentación acreditativa de los pagos efectuados fue localizada en el registro del domicilio del excomisario Villarejo. Además, el material desclasificado incluye ocho recibos que apuntan a que el comisario Enrique García Castaño recibió, entre el 1 de julio de 2014 y el 18 de mayo de 2015 un total de 50.000 euros en efectivo entregados por la Dirección Adjunta Operativa con cargos a los fondos reservados del Ministerio del Interior.

García Castaño siempre ha negado que esa cantidad perteneciera a la operación, sin embargo, sí ha admitido que se compró una pistola para el colaborador Ríos por importe de 700 euros y material informático por importe de 1.905,82 euros. Pese a ello, Interior ha informado que no ha encontrado rastro de la documentación acreditativa.

"Enmascarar su uso"

El magistrado deduce que los fondos reservados se solicitaron sin cumplimentar debidamente su petición. "También que los fondos que fueron efectivamente utilizados en la operación policial se solicitaran con cualquier otra designación" o que los fondos empleados fueron solicitados bajo la cobertura de otra investigación policial completamente ajena al operativo conocido como Kitchen o bajo la cobertura de cantidades de información, "con objeto de enmascarar un uso desviado de los fondos reservados", indica.

El juez no atiende, sin embargo, la petición de Anticorrupción para que se cite de nuevo al que fuera director adjunto operativo, Eugenio Pino, para preguntarle por este extremo. En el escrito asegura que el investigado ya compareció el 14 diciembre de 2020, por esta misma pieza separada y también para el esclarecimiento de los hechos que se investigan en otra pieza separada. "Cuando se efectuó la solicitud anterior, el Fiscal ya tenía conocimiento de las cuestiones que se exponen en la presente resolución, por lo que pudo habérsele preguntado en aquel acto", indica.