El PP prepara la batalla de Madrid con el ascenso de Ayuso y Almeida... y la 'tercera vía'

El PP de Madrid sigue teniendo pendiente su gran batalla interna. La situación de interinidad se mantiene desde hace dos años, cuando Cristina Cifuentes dejó la presidencia 48 horas después de abandonar la Puerta del Sol tras el caso máster y la publicación de su polémico vídeo. Entonces, Mariano Rajoy optó por un veterano de toda confianza, Pío García Escudero, hasta que se pudiera celebrar el congreso regional. Después llegaría la moción de censura, la marcha del expresidente nacional, las primarias y la victoria de Pablo Casado, además de dos elecciones generales y las autonómicas y municipales en medio.

El proceso se fue dilatando por todas esas razones, igual que en otros lugares en situación similar. Pero hace dos semanas, la Junta Directiva Nacional del PP —máximo órgano entre congresos— dio luz verde a los congresos provinciales de Valencia y Alicante, que arrastran gestoras desde hace años. Según ha podido saber este diario, el partido está trabajando en el lanzamiento del congreso de Madrid, que se celebraría el año que viene.

El momento actual tampoco es el más adecuado, tras la pandemia del coronavirus y una situación de cierta inestabilidad en el Gobierno que dirige Isabel Díaz Ayuso. Por eso, Génova tiene en sus planes comenzar la organización del congreso, aunque todavía pasarán meses hasta que se celebre. Las quinielas ya se empiezan a disparar dentro del PP con dos líderes que se saben consolidados —la presidenta y el alcalde de Madrid— y una 'tercera vía' por la que apuestan otros muchos dirigentes.

TE PUEDE INTERESAR

Casado marca el camino a sus filas: "No voy a liderar un PP bronco ni desestabilizador"

Paloma Esteban

Ayuso no se ha pronunciado acerca de las primarias por ahora y, aunque fuentes de su entorno reconocen que está centrada en la gestión del covid-19, aseguran que se encuentra "preparada para dar el paso" y que su condición de presidenta regional la avalaría. Su núcleo duro le insiste en que debe ser ella quien ocupe el puesto y recuerdan que es la fórmula más repetida hasta el momento: quien preside la Comunidad, dirige el partido.

De hecho, apuntan que la bicefalia —promovida en el pasado por José María Aznar— puede provocar "errores de gestión" y "lo complica todo", señalando como ejemplo cuando Gallardón estaba al frente del Gobierno regional y Pío García Escudero en el partido. Piensan que Ayuso ya representa a los 179 municipios madrileños y que tendría "todo el sentido" que también actuara como principal representante del PP de Madrid.

Por otro lado, también está la figura ascendente de José Luis Martínez-Almeida, convertido en una de las referencias políticas de esta crisis tras haber liderado los consensos en la institución municipal, acaparando muchas miradas. Los defensores de su candidatura dan por hecho que será muy difícil si Ayuso da el paso. "Si la presidenta quiere liderar el PP es complicado que la dirección apueste por el alcalde. Eso podría generar enfrentamientos importantes", explican.

En realidad, el regidor no se ha postulado. De hecho, hace unos días afirmó en una entrevista, en el diario 'El Mundo', que veía con buenos ojos mantener la tricefalia actual de Comunidad, Ayuntamiento y partido por otro lado. No es el único alcalde de la región que lo ve así en aras de defender un equilibrio entre el poder institucional y el orgánico, evitando el impulso de una 'superbaronía' como es la de Madrid, con liderazgos tan señalados en otras comunidades como es el caso de Alberto Núñez Feijóo en Galicia e incluso el andaluz Juanma Moreno Bonilla. También se evitaría una lucha de liderazgos. Por eso, la idea de la tercera vía vuelve a sonar con fuerza como una opción más que plausible.

En realidad, antes de que estallara la crisis del coronavirus, Casado tenía esa idea en la cabeza. La actual secretaria general de la gestora madrileña, Ana Camins, —muy cercana al presidente del PP— lideraba las quinielas en ese momento. Casado confía mucho en la diputada y senadora por designación autonómica —ya fue su secretaria general cuando dirigía Nuevas Generaciones— y les une una amistad personal.

Todo el mundo habla bien de ella y es, ante todo, una persona de partido y leal al presidente. Su perfil "de consenso", como lo definen muchos en el PP, encajaría en esa tricefalia, no confrontaría con el liderazgo de las instituciones y evitaría una concentración de poder territorial. Desde el mes de septiembre su nombre empezó a sonar con fuerza cuando ascendió en la gestora y fue ganando adeptos dentro del partido en los meses posteriores. Aún hoy son muchos dirigentes y regidores que la ven como mejor opción.

A pesar de que siempre resuenan otros nombres, como el de Antonio González Terol; diputado, exalcalde de Boadilla y 'peso pesado' de Génova cercano también al secretario general, Teodoro García Egea, en la formación consideran que este cometido no sería para él, como tampoco lo terminó siendo la candidatura de la Comunidad.

El liderazgo del PP madrileño es uno de los asuntos pendientes que tiene Casado. Si el congreso estaba previsto para este 2020, el coronavirus lo frenó. Pero, con toda seguridad, el año que viene deberá resolverse con las primarias. Mientras la 'tercera vía' sigue llamando a muchos, el equipo de Ayuso se mantiene preparado y Almeida, por ahora, no da señales de querer dar un paso al frente. Algunos recuerdan que tras la marcha de Esperanza Aguirre del Ayuntamiento y cuando todos daban por único candidato a Íñigo Henríquez de Luna, el concejal se decidió y venció.