Borja Thyssen y Blanca Cuesta irán a juicio por delito fiscal al perder su último recurso

Borja Thyssen y Blanca Cuesta tendrán que sentarse en el banquillo acusados de delito fiscal. La Audiencia Provincial de Madrid ha desestimado su último recurso para salvar la acusación y no ir a juicio. Thyssen justificó que los cinco millones de dólares que recibió de Caravaggio Trust, de la herencia del barón, estaban exentos de IRPF y trató de tumbar una operación con un préstamo de 1,5 millones de euros que, según Hacienda, era simulado para pagar menos impuestos. Además tiene otro caso pendiente por fingir la residencia en Andorra.

La sección de delitos económicos de la Fiscalía Provincial de Madrid solicita tres años de prisión para Borja Thyssen-Bornemisza y para su esposa, Blanca Cuesta, Además, reclama una multa de un millón de euros. Les acusa de defraudar 336.417 euros en 2010. Ese año la empresa Cas Capetó, transmitió sus acciones, propiedad de Borja, Blanca y un 10% de una empresa, Caribean Breeze, a sociedades en Holanda, un escalón tradicional de camino a paraísos fiscales como las Antillas Holandesas.

La defensa de Borja sostiene que cinco millones de dólares de la herencia del barón son libres de impuestos

La Fiscalía destaca que el activo de Cas Capetó SL estaba constituido fundamentalmente por una casa en Ibiza, pero no tenía personal ni actividad económica. Los Thyssen recibieron 9,7 millones por esa operación y, según el matrimonio, procedía de un crédito que Borja había concedido a la empresa. En la renta de 2010 declararon una ganancia de 2,2 millones por la venta de las acciones, aunque según la fiscalía la ganancia real era de 3,8 millones "ocultando por tanto a la Hacienda Pública la cantidad de 1.586.037,39 euros".

La fiscalía considera que simularon que parte de las acciones eran de Caribean Breeze, pero esa sociedad era en realidad de ellos (70% de Borja y 30% de Blanca). "La adquisición de las participaciones sociales de Cas Capetó del modo descrito constituyó un negocio jurídico simulado", según la fiscalía. Otra de las operaciones por las que les acusan el por la tributación de los cinco millones de dólares que recibió Borja desde The Caravaggio Trust, el fondo que gestiona la herencia del barón Thyssen.

Cuando el juzgado de instrucción mandó el caso a juicio, Thyssen y Cuesta recurrieron a la Audiencia Provincial. Alegaron que el préstamo a Cas Capetó era "absolutamente real y existente y no pretendido, no acreditado o falto de credibilidad como mantiene" la Agencia Tributaria, según una resolución del pasado 23 de septiembre de la Audiencia a la que ha tenido acceso El Confidencial.

Sobre la herencia del barón, señalaron que "se ha aportado prueba de descargo indubitada e incontestable respecto a que la cantidad de cinco millones de dólares no son rendimientos como mantiene la Agencia Tributaria, sino una disposición de patrimonio y en consecuencia exenta de tributación en el IRPF". Para la defensa, sus pruebas son "absolutamente contundentes".

Otro juzgado lo ha investigado por fingir la residencia en Andorra y cobrar allí 1,4 millones en exclusivas del '¡Hola!'

Sin embargo, la sección nueve de la Audiencia Provincial no lo ve así. Recuerda que el auto del juzgado que daba por terminada la instrucción "es una resolución de impulso procesal que el instructor dicta una vez analizadas todas las diligencias practicadas y llega a la conclusión de que existen indicios suficientes para continuar el procedimiento y llegar a la fase de enjuiciamiento".

La Audiencia señala que no es el momento de zanjar el asunto sin ir a juicio. "No cabría acordar el sobreseimiento libre interesado, salvo que se asumieran íntegramente las conclusiones de la pericial de la defensa, descartando las demás, sin someterlas conjuntamente a contradicción y sin análisis del conjunto de la prueba, todo lo cual es propio del momento del enjuiciamiento".

El resultado es que Borja Thyssen y Blanca Cuesta se sentarán en el banquillo de los acusados. Hasta el momento se han negado a buscar una condena en conformidad a menos de dos años, que supone en la práctica la suspensión del ingreso en prisión. Borja Thyssen tiene además otra causa en la que la fiscalía y la Agencia Tributaria le acusan de fingir la residencia en Andorra y de cobrar allí 1,4 millones de exclusivas del '¡Hola!' en 2007, cuando se casó.

En las causas en los juzgados hay documentación que acredita que Borja Thyssen se acogió a la amnistía fiscal. Su nombre aparece en los papeles de Panamá como dueño de una sociedad en Nevada (EEUU) creada por el despacho Mossack Fonseca. Esa sociedad, Gobrach LLC, manejaba cuentas en Andorra.