Iglesias pide al PSOE respeto y no "humillar" a sus votantes: "Toca llegar a un acuerdo"

Para Unidas Podemos, el posible acuerdo con el PSOE sigue pasando por conformar un Gobierno de coalición en el que "compartir responsabilidades" entre ambos socios. Y por eso el secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha puesto en valor "la voluntad de ceder" que tuvo la formación morada en las negociaciones con el Partido Socialista durante la anterior investidura y ha asegurado que ahora, a menos de tres semanas de que se tenga que celebrar la siguiente, "leerán con atención" las medidas que presentará en unas horas en Madrid el presidente en funciones Pedro Sánchez.

Iglesias ha recordado, en una entrevista en Los Desayunos de TVE, que él ya se humilló al asumir el veto que le impuso Sánchez como condición para negociar con Podemos un Gobierno de coalición, por lo que ahora "toca acuerdo y reparto de responsabilidades" entre ambos partidos. Lo que no está dispuesto a admitir es "la humillación" a sus votantes y que el PSOE impida que entren en el Gobierno después de haber dicho que él era "el principal escollo".

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"Yo estoy dispuesto a asumir una humillación - que te presentes como candidato a un partido y el secretario general del PSOE te vete -, pero que se humille a los 3,7 millones de votantes que han votado a Podemos no lo voy a aceptar", ha afirmado el secretario general de la formación morada, que ha pedido respeto por los ciudadanos que apoyaron a su formación al recordar que el PSOE les ofreció gestionar "solo un 5 % de los presupuestos frente al 33 %" que representarían en esa coalición.

Para Iglesias, tal y como se encargó de destacar ayer la portavoz del partido Noelia Vera, un acuerdo de Gobierno implica hablar de programa pero también de equipos, porque si no "las palabras se las lleva el viento" y ellos ya tienen experiencia en que el PSOE "no cumpla sus promesas".

A pocas horas de que el PSOE presente las más de 300 medidas de su 'Propuesta abierta de programa común progresista' en un intento de persuadir a los de Iglesias y al resto de formaciones, el secretario general ha admitido que aunque las propuestas que se han empezado a conocer en principio "no suenan mal, suenan bien", ellos consideran que esta batería de medidas también pueden resultar ser "promesas, promesas, palabras bonitas que después no se cumplen", como sucedió en el anterior Gobierno con la regulación del precio de los alquileres o el intento de evitar los desahucios.

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Por eso, ha pedido respetar la cultura de la coalición "que se ha impuesto en España, que es más democrática y que es compartir responsabilidades". Frente a las críticas de que ellos solo querían sillones, Iglesias replica que en Podemos quieren "competencias para cambiar las cosas" y que para ellos hacer política es "construir garantías".

Iglesias ha seguido insistiendo en lo que dijo en una anterior entrevista, que si el PSOE proponía las mismas competencias que la otra vez, pero sumadas a las políticas activas de empleo, se pondrían de acuerdo con el Partido Socialista "en pocas horas". Sin embargo, la puerta que el PSOE abrió en julio para formar con Unidas Podemos un Gobierno de coalición en el que tendrían una vicepresidencia y tres ministerios (el de Sanidad con las competencias transferidas en su mayoría y dos secretarías generales reconvertidas en ministerios) sigue permaneciendo completamente cerrada.

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Para evitar ir a las urnas el 10 de noviembre, Iglesias y Sánchez deberían ponerse de acuerdo en las próximas tres semanas (el último día para la segunda votación de investidura sería el 23 de septiembre), pero el secretario general de la formación morada cree que el líder socialista "da muestras de que quiere elecciones" y de no haber entendido "el mandato de las urnas" en los últimos comicios.

"Los Gobiernos de coalición no dependen de tradiciones, sino de los votos", ha explicado Iglesias, para quien el tablero político actual de España obliga a considerar este tipo de fórmulas en el Ejecutivo central que hasta ahora no se han llevado nunca a cabo: "Cuando uno no tiene mayoría absoluta tiene que aprender a ceder".

El líder morado también ha criticado que el PSOE no haya parado de suplicar "a los corruptos del PP" que se abstengan, mientras que lo "inédito", en su opinión, es haber vetado al candidato de su posible fuerza aliada como hicieron con él.

Además, Iglesias ha negado que exista una mala relación entre él y Sánchez: "La relación siempre ha sido cordial y nos hemos dicho las cosas con mucha claridad. Esto no es un problema de 'feeling', sino de que el PSOE quiere tener todo el poder, todos los sillones, no quiere compartir responsabilidades", ha destacado.