Villarejo, a Cospedal: "El hermano de Rubalcaba es el punto débil que podéis usar"

Las relaciones con la agencia de detectives Método 3 de Alejandro Pérez Rubalcaba, el hermano del que fuera ministro del Interior y vicepresidente del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba, preocupaban mucho a este último dirigente socialista. Así al menos lo asegura el comisario José Villarejo en las conversaciones que mantuvo en 2009 con el empresario Ignacio López del Hierro y con la mujer de este último, la entonces número dos del PP, María Dolores de Cospedal, como ponen de manifiesto los audios publicados hoy por el diario digital 'Moncloa.com', a los que ha tenido acceso El Confidencial.

Tanto antes del encuentro que el 21 de julio de ese año mantuvieron Cospedal, su marido y Villarejo en la sede central del PP de la madrileña calle Génova como en las reuniones previas y posteriores a esa cita que concertaron López del Hierro y el comisario, el asunto del hermano de Rubalcaba era uno de los temas más recurrentes. Los tres parecían muy interesados en abordar el asunto, como muestran las citadas grabaciones. La primera en el tiempo tuvo lugar el 20 de julio de aquel 2009, un día antes de la visita secreta del policía a la sede de los populares, cuando el empresario y el comisario quedaron para preparar cómo este último accedería a la reunión de la jornada siguiente.

En este encuentro preliminar, Villarejo explicó a López del Hierro la vinculación de Alejandro Pérez Rubalcaba con la dueña de la empresa de investigadores, María Teresa Fernández Lado, conocida como 'Marita'. "El hermano... resulta que hay una pava que tiene una agencia de detectives que se llama Método 3 (...) que ya ha investigado cosas del Canal y tal contra la Espe [Esperanza Aguirre, entonces presidenta de la Comunidad de Madrid] y compañía... pues está todos los días en el Pigmalión con la dueña de esta agencia de detectives, que es una argentina, Marita o no sé qué y tal", describe el comisario a su interlocutor, que explica a continuación el papel que él considera que tiene el hermano de Rubalcaba en Método 3.

"Le utilizan como si fuera un Juan Guerra de la vida; 'oye, que estoy en... me contratas o no sé qué'; o sea, como en su día Juan Guerra hablaba de su hermano, pues este igual habla de Alfredo, que está tremendamente preocupado con este tema; le acojona", asegura el policía antes de que López del Hierro le pregunte cómo se podría probar lo que le está contando y Villarejo se explaye en detallar el que a su juicio sería el mejor modo de acreditar lo que le ha contado, que según él sería acudir a sus contactos en Telefónica para interceptarle las llamadas a "la tipa esa de Método 3".

Al día siguiente, ya en Génova ante Cospedal, Villarejo relata la misma historia. "La dueña [de Método 3] es una choriza; la conozco de hace veintitantos años; una choriza, una delincuenta y lo va utilizando (al hermano de Rubalcaba) como si fuera... como Juan Guerra", insiste el comisario ahora encarcelado de manera preventiva por orden de la Audiencia Nacional en el marco de la operación Tándem. Según el policía, Marita estaba utilizando su amistad con Alejandro para conseguir adjudicaciones. "Si no me dais el contrato o no sé qué, se lo digo al hermano de Rubalcaba (...); o sea, la leche; están todas las noches en el Pigmalión, que es un sitio de putas muy afamado", precisa el agente encubierto, que apenas un año antes se había sentado con el entonces juez Baltasar Garzón para preparar el caso Gürtel.

Según le expresó Villarejo a Cospedal ese 21 de julio, la preocupación del entonces ministro por las relaciones de su hermano era máxima. "Yo lo sé porque hace como un mes y pico o así coincidí en la entrega de despachos de comisario y tal con Rubalcaba, y en un aparte, como él sabe que yo estoy en la empresa privada, me dijo 'oye, tal, mi hermano, échale una mano'; le digo 'una mano al cuello', jejeje; me dice 'estoy acojonado, si el hijoputa se fuera a no sé dónde'; o sea, muy preocupado; eso sí que es un punto débil que podéis utilizar", concluye el comisario.

Dos meses después del encuentro de Génova, López del Hierro y Villarejo vuelven a hablar y es cuando el primero encarga al segundo investigar la fundación a la que está vinculado Javier Arenas y el asunto del entonces ministro del Interior. "El segundo tema es el del hermano de Rubalcaba", le indicó el empresario aquel 21 de septiembre de 2009. "Con la chica esta...", le interrumpió el comisario. "Con la chica esta y con cómo se llamaba este...", continúa Del Hierro. "Sí, Método 3; sí, esto me lo había apuntado hace mucho tiempo, ¿te acuerdas?", concluye el policía. No hay constancia, sin embargo, de documento alguno que acredite que esas pesquisas fueron finalmente realizadas y entregadas por Villarejo a Cospedal.

Durante la conversación entre López del Hierro y el policía el día previo al encuentro de ambos con Cospedal, la figura de Rubalcaba salió en varias ocasiones más, aunque ya no tanto ligada al asunto de su hermano. El comisario niega que él sea el "instigador" de todas las filtraciones que hay a la prensa y del caso Gürtel. "Alfredo es un estratega; el 90% del partido cree que es un perfecto cabrón; sin embargo, acuérdate de que Alfredo no era partidario de esa línea dura (...); acuérdate de que cuando María Dolores habla con él, el tío baja la presión y de alguna manera reestructura el tema, porque dentro de todo es el más sensato, es la línea realmente pura del PSOE; estos son unos advenedizos, el Blanco, Zapatero... todos pasarán como una mala racha", afirmó el policía.

"Eso es línea radical trotskista, eso no es Alfredo; Alfredo es un maquiavelo y tal", definió Villarejo, que consideró ante López del Hierro que todo lo que estaba haciendo el Gobierno en cuanto a filtraciones venía de otro lado. "Porque es demasiado evidente, se les ve el plumero a todos (...); el otro es más sutil, mucho más hijo de puta, más sibilino, más vaticanista... más de que te levanta el brazo, te clava la estocada y luego te baja el brazo para que no sangre", aseguró el comisario, quien admitió en la misma conversación haber "hecho maldades con él". "Rubalcaba la hace tan bien que no se nota que ha sido él", subrayó el policía, quien al día siguiente, ya en presencia de Cospedal, entró en más detalles sobre la figura del entonces ministro del Interior y del funcionamiento de su departamento.

"Camacho [Antonio Camacho, entonces secretario de Estado de Seguridad] es el que da instrucciones; cuando Juan Antonio [González, comisario general de Policía Judicial en la época] dice que ha hablado con el ministro, en el 90% de las ocasiones ha hablado con Camacho o con Goyo [Gregorio Martínez, jefe de gabinete de Rubalcaba]", explicó en Génova el agente encubierto, quien aseguró también que Rubalcaba no se fiaba de González porque cuando este bebía demasiado decía que sabía mucho. "Eso Alfredo se caga, se pone muy nervioso; a mí me llega que dice 'oye, estoy preocupado, dile a Juan Antonio que deje de filtrar cosas", le explicó Villarejo a Cospedal, que se mostró también interesada por cómo veían los policías al entonces ministro.

"Ya hay gente de la Policía que está muy cabreada y la gente se le está rompiendo a él por dentro", dejó caer la número dos del PP, que recibió la respuesta inmediata del comisario. "Claro, no, no, no, perdóname", interrumpió Villarejo. "María Dolores, es de los peores ministros que tienen 'feeling' con el gremio; el SUP [en referencia al Sindicato Unificado de Policías, que por aquel entonces dirigía José Manuel Sánchez Fornet], que es rojo rojo bermellón, no lo quiere nada; si pudiera, le colgaría por los pulgares", le dice el agente encubierto, que a preguntas de López del Hierro define a Rubalcaba como "un genio de la estrategia (...) de los que en el último momento, si va perdiendo, te apulaña". "Luego el 'fair play' le gusta (...), le gusta pasar desapercibido", sentencia.