Podemos desdeña las primarias y las bases críticas se organizan para crear otro espacio

Sectores de Podemos, junto a bases críticas, activistas y fuerzas aliadas en anteriores procesos electorales preparan un proyecto de oposición y "desborde" al sistema de primarias que se desarrollará en la Comunidad de Madrid para refrendar la candidatura que encabezará el diputado estatal Íñigo Errejón. Presión tanto desde dentro como desde fuerza de la organización para reconducir una situación por la que entienden que el espíritu de las primarias se ha pervertido, convirtiéndolas en un simple plebiscito a un "reparto de sillones" diseñado desde los despachos. Otro de los objetivos para salvar tanto la esencia participativa como plural y con una toma de decisiones desde abajo, que marcó los orígenes del partido, es posicionarse como muro de contención para que el formato de primarias en Madrid no se reproduzca en otros territorios.

Está previsto que en los próximos días se ponga sobre la mesa este proyecto de "unidad popular" para desbordar las primarias. Se trata de construir un "nuevo espacio" al margen de Podemos que genere "otro tipo de candidatura en 2019", mirándose en el espejo de la experiencia fundacional de Ahora Madrid y tratando de reproducirla en la Comunidad de Madrid. Su hoja de ruta se anunciará mediante una rueda de prensa la próxima semana, según fuentes cercanas al proceso.

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Madrid suele ser el epicentro que marca la línea organizativa en el resto de territorios, por lo que no esconden su temor a que no haya primarias proporcionales, que salvaguarden el peso en las listas electorales de las distintas sensibilidades y, sobre todo, a sectores provenientes de movimientos sociales y sociedad civil. El ejemplo del Ayuntamiento de Madrid, donde el equipo de la alcaldesa Manuela Carmena pretende evitar primarias para configurar la lista de Ahora de Madrid, no es alentador para sus intereses.

El nuevo proyecto se mirará en el espejo de la experiencia fundacional de Ahora Madrid y tratando de reproducirla en la Comunidad de Madrid

Podemos en Movimiento, el espacio en el que se referencia el sector anticapitalista en Madrid con la portavoz en la Asamblea Lorena Ruiz-Huerta como principal cara visible, decidió por estos motivos autodescartarse del proceso de primarias que arrancó este viernes con la presentación oficial de la candidatura de Errejón. Su primer mensaje fue extender la mano tanto a PSOE como a Ciudadanos para evitar la investidura de un candidato popular en sustitución de Cristina Cifuentes. Un ofrecimiento que hace hincapié en el marco regenerador, una de las líneas maestras en las que centrará su campaña electoral.

"Cierre a la construcción de un bloque histórico"

Desde el sector anticapitalista explican que participar de un acuerdo de este tipo para configurar la candidatura supondría legitimar una deriva que entraría en contradicción con el espíritu del 15-M y un cierre a la construcción del "bloque histórico" que no deje a ningún sector progresista fuera, ya sean fuerzas políticas o movimientos populares. Fuentes cercanas a la Secretaría de organización del partido justifican el formato el acuerdo para las primarias como única salida al conflicto que estalló con los hechos del 18 de abril y que venía precedido por el pulso del precandidato para tener las manos libres y contar con total autonomía, casi para convertir la comunidad en una suerte de baronía. Explican por ello que se trata de una excepción y que no se reproducirá en otros territorios. Con todo, desde Anticapitalistas valorarán cada proceso para decidir los pasos a dar en los diferentes territorios.

Estos movimientos se producen después de que la dirección rompiese conversaciones con 'anticapis' y el PCM plantease a IU ir en solitario

Todos estos movimientos se producen después de que la dirección del partido rompiese conversaciones con Anticapitalistas y el Partido Comunista de Madrid (PCM), mayoritario en Izquierda Unida, abriese un debate en el que se plantean diferentes escenarios, entre ellos concurrir en solitario o con las fuerzas "de izquierda netamente rupturistas" e incluyendo a los sectores "desencantados con la versión más institucional de Podemos". Su máxima es celebrar primarias conjuntas, recalcando que "no entendemos la convergencia como el resultado de un acuerdo sobre hechos consumados sino como un proceso vivo, propiedad de sus partes e integrantes. La candidatura de Errejón, quien siempre se mostró reacia a la integración con IU, tampoco supone el mejor escenario para sus intereses.

El diputado regional Raúl Camargo, perteneciente a Podemos en Movimiento, ya avanzaba la pasada semana en las páginas del diario Público que "vamos a iniciar un movimiento para tratar de convencer a todo el mundo (incluidos Errejón-Espinar) de que hay otra forma de hacer las cosas que puede ser más útil, tanto para ganar como para transformar las cosas. El papel de Podemos, como siempre hemos creído, debe ser el de catalizador de procesos más amplios". Al mismo tiempo advertía ya que "la forma de entender las primarias de Podemos aleja a la gente de la participación, generan desafección en amplios sectores de la sociedad y fomentan una lógica de competencia despiadada más propia de una empresa que de un espacio político que aspira a transformar la sociedad". Las convulsiones continúan en Podemos y la unidad popular peligra, al menos, en la Comunidad de Madrid.