El PSOE difunde un sondeo exprés que muestra la fuerte caída de Carmena y el PP

Las elecciones municipales en Madrid en 2019 tendrían dos damnificados claros. De un lado, el PP, la fuerza hegemónica en el ayuntamiento de la capital y en la comunidad durante dos décadas, y también la propia Manuela Carmena, alcaldesa desde hace tres años. Ambas formaciones caerían respecto a los últimos comicios, frente a la subida de PSOE y Ciudadanos, según una encuesta encargada por Ferraz y realizada entre el 13 y el 18 de abril.

La dirección socialista ya distribuyó la semana pasada un sondeo con estimación de voto regional, justo tras el estallido del caso máster de Cristina Cifuentes y presentada la moción de censura contra ella. Y ahora difunde un estudio centrado en la ciudad, a partir de 1.180 entrevistas válidas, y justo cuando se conoce que el líder socialista en Madrid, José Manuel Franco, ofreció de forma "informal" la candidatura de su partido a la propia Carmena. El barómetro coloca al PP aún como primera fuerza, con un 23,9% de los votos, y 14 escaños, por el 34,6% y 21 asientos en el pleno que obtuvo Esperanza Aguirre en las elecciones de 2015. Le seguiría, como segunda formación, el PSOE, apenas una décima por debajo, con un 23,8% y también 14 actas. Y justo por debajo Ciudadanos, con un 23,5% y 14 concejales. Ahora Madrid se quedaría con un 19,2% y 12 representantes.

La encuesta del PSOE atribuye otros tres ediles y un 5,3% de los sufragios a Izquierda Unida. Hace tres años, ambas fuerzas progresistas concurrieron por separado, pero la antigua IUCM —que se quedó fuera del consistorio, al no superar el umbral del 5%— fue expulsada por la cúpula federal, de forma que la IU madrileña que hoy depende de Alberto Garzón es la que está integrada en el partido instrumental que lidera Carmena, aunque no está nada claro que para 2019 vayan a ir a las urnas de forma conjunta. La precisión es importante porque si se suman los 12 escaños de Ahora Madrid y los tres de IU se llegaría a los 15 ediles. Aun así, cinco menos que los que tiene el grupo actual de la alcaldesa. Con esta composición del pleno, la izquierda mantendría la mayoría, pero muy por los pelos: 29 frente a 28 concejales. Es decir, que el peso de los dos bloques se mantendría exactamente igual, siempre según este sondeo. La diferencia radicaría en la correlación de fuerzas dentro de cada uno de los bloques.

La mayoría de izquierdas se repetiría en 2019, aunque por los pelos, como ahora: 29 ediles de PSOE, Ahora Madrid e IU y 28 de PP y Cs

Así, los populares, que gobernaron la capital desde 1991 hasta 2015 con amplísimas mayorías absolutas, son los que sufrirían un mayor castigo, al pasar del 34,55% (563.292 votos) al 23,9% en abril de 2018. De 21 a 14 ediles y 10,65 puntos menos. Su bajada es compensada por el espectacular crecimiento de Ciudadanos, pues su 11,41% (186.059 papeletas) y siete representantes se convertirían en un 23,5% y 14 escaños. Duplicaría su número de representantes en el pleno y avanzaría 12,09 puntos. El PSOE, que se convirtió en tercera fuerza en 2015, apuntándose un escaso 15,28% (248.152 sufragios) y 9 ediles, subiría hasta el 23,8% y los 14 concejales (8,52 puntos de crecimiento). Ahora Madrid, que se estrenó en las urnas hace tres años, perdería 12,3 puntos (del 31,85% al 19,2%), aunque si se suman los 5,3% que la encuesta asigna a IU se quedaría en 24,5%, 7,35 puntos menos que en los últimos comicios.

Sin candidatos aún

El sondeo exprés difundido por el PSOE —el trabajo de campo se realizó entre el 13 y el 18 de abril, con un margen de error del ± 2,9%— tiene un alcance limitado, no obstante. Ningún partido tiene a sus candidatos oficialmente nombrados. Para empezar, no es seguro al cien por cien que Carmena repita. El PSOE tampoco tiene a ningún referente de forma claramente señalada, aunque es obvio que no repetirá en ningún caso Antonio Miguel Carmona, que llevó a su partido a los peores resultados en la ciudad, como tampoco promocionará a la actual portavoz, Puri Causapié. Lo máximo a lo que ha llegado Pedro Sánchez es a advertir de que será una mujer —que haría tándem con el exministro Ángel Gabilondo en la comunidad— y que será una candidata "muy potente", con "visos de ganar" a la actual regidora. Pero el único nombre que sigue en las quinielas es el de Beatriz Corredor, miembro de su dirección federal. Ferraz ha desautorizado por completo a Franco, al tantear sin su conocimiento a Carmena, siquiera de forma "informal".

Para Ferraz, que ha desautorizado el tanteo de Franco a Carmena, los datos explican por qué la alcaldesa se piensa tanto su candidatura

Los populares tampoco tienen a su número uno claro. Aguirre dejó su acta el año pasado, tras el estallido del caso Lezo, dejando la portavocía en manos del concejal José Luis Martínez-Almeida, y ahora la presidenta regional y de la formación, Cristina Cifuentes, está muy tocada por el caso máster. La única aspirante más clara es la actual portavoz municipal de Cs, Begoña Villacís, que forma parte de la cúpula nacional de su partido y que cuenta con una gran proyección mediática.

Para el PSOE, los datos de este sondeo explican "por qué Carmena tiene tantas dudas acerca de su propia candidatura", porque "no quiere ir como cabeza de cartel para perder" en 2019. La alcaldesa aún no ha revelado qué hará, aunque en su equipo siempre han insistido en que ella quiere tener garantías de que si da el paso cuente con un equipo de su confianza. No como ahora, cuando la división entre sus propios concejales es patente.

Ferraz señala como autor de su encuesta al Equipo MEG. Se trata de una cocina de estimación de voto que realizan los técnicos de la casa para las elecciones municipales, europeas y generales, a partir de datos ofrecidos por institutos de opinión privados contratados, que la cúpula de Sánchez prefiere no identificar.

El PSOE pide a la Mesa del Congreso que reconsidere los vetos a las iniciativas de la oposición

El Grupo Socialista registró este jueves una iniciativa [aquí en PDF] dirigida a la Mesa del Congreso para que reconsidere la admisión a trámite de proposiciones de ley presentadas por los grupos parlamentarios o las Cámaras autonómicas vetadas por el Gobierno. 

Fue esta semana cuando se conoció una sentencia del Tribunal Constitucional en la que sí reconoce la capacidad de veto del Ejecutivo, en virtud del artículo 134.6 de la Carta Magna, pero con límites: solo puede afectar a medidas que “incidan directamente sobre el Presupuesto aprobado", esto es, sobre ‘los gastos e ingresos del sector público estatal’”, y además dicha incidencia sobre las cuentas públicas debe ser “real y efectiva” y ha de referirse al Presupuesto en vigor, no a presupuestos futuros.

El PSOE, en su escrito, defiende por tanto que la Mesa reconsidere la calificación de las 58 proposiciones de ley rechazadas por el Ejecutivo, y en especial las 11 de los socialistas. La portavoz parlamentaria, Margarita Robles, exigió a PP y Cs, que cuentan con mayoría en el órgano rector, que hagan que la legislatura sí sea "operativa" y que les dejen trabajar en favor de los ciudadanos, permitiendo la tramitación de iniciativas "de alto contenido social", como la universalización del derecho a la asistencia sanitaria pública, la revalorización de las pensiones, la reforma de la Ley de Memoria Histórica o la supresión de las tasas judiciales.

🙌 Menos vetos y más Parlamento 🏛️. Exigimos que se levante el veto a las 58 leyes paralizadas por el gobierno. El TC nos ha dado la razón. Acabamos de registrar una iniciativa que te explica Margarita Robles 👇👇👇#MenosVetosMásDemocracia pic.twitter.com/g9UIjdLk9R

 

Hasta ahora, PP y Cs asumían el automatismo del veto del Ejecutivo, mientras que el TC confiere a la Mesa la facultad para discriminar si ese veto "procede o no".