Iberdrola relega a España en sus inversiones tras cargar contra los impuestos

Iberdrola ha presentado su nuevo plan estratégico y España no será el destino principal de sus inversiones tras los impuestos del Gobierno presidido por Pedro Sánchez y que han levantado grandes críticas en la cúpula de la energética presidida por Ignacio Galán, puesto que destinará más dinero a Estados Unidos, Reino Unido y lo mismo a la región de Latinoamérica.

Así, la compañía prevé unas inversiones brutas de unos 41.000 millones de euros en el periodo 2024-2026 para alcanzar un beneficio neto de entre 5.600-5.800 millones de euros al final del periodo, según las cifras presentadas con motivo de su Capital Markets Day que se celebra este jueves en Londres.

De esta cifra inversora, que incluye la compra del 18,4% de Avangrid por unos 2.280 millones de euros para hacerse así con el 100% de su filial estadounidense, los socios de la compañía en renovables, como el fondo soberano noruego Norges o Masdar, contribuirán con 5.000 millones de euros, llevando así la inversión neta de Iberdrola a los 36.000 millones de euros.

El 85% de las inversiones tendrán por destino mercados con rating A; siendo Estados Unidos el principal foco inversor para la energética, con el 35%; seguido del Reino Unido (24%), Iberia —España y Portugal— (15%), Latinoamérica (15%) y Alemania, Francia, Australia y otros países de la Unión Europea (11%).

Así, el montante que destinará a Iberia será de unos 5.400 millones si tenemos en cuenta el que realizará únicamente Iberdrola y algo más de 6.000 millones al incorporar las aportaciones de sus socios. Esta cuantía es bastante inferior a los 8.000 millones que se comprometió a invertir en España en su anterior hoja de ruta para liderar la transición energética entre 2018 y 2022.

Por negocios, las redes eléctricas serán el principal segmento de estas inversiones, con el 60%, unos 21.500 millones de euros, dedicados principalmente a ampliar y reforzar las redes en EEUU, Reino Unido, Brasil y España.

La actualización de su hoja de ruta también incluye una mejora del 20% del dividendo. Supondrá una retribución de 11.000 millones de euros hasta 2026, según los datos aportados por la compañía al mercado. Así, destinará entre el 65% y el 75% del beneficio, lo que permitirá alcanzar un dividendo de entre 0,61 y 0,66 euros por acción en 2026. Además, el grupo fija un suelo del dividendo de 0,55 euros para este periodo, dentro del programa de Iberdrola Retribución Flexible, que incluye la recompra de títulos.