Azuaga ya prepara su salida de Unicaja: en 2024 tras atajar la crisis de gobernanza

Unicaja Banco se prepara para la salida de uno de sus pilares de la última década. Manuel Azuaga, presidente del banco desde 2016, estaría trabajando en su retirada para la primera mitad de 2024, según fuentes financieras consultadas por El Confidencial. El adiós de este banquero malagueño es algo que se da por hecho desde hace tiempo en el entorno supervisor. Se espera que esta decisión sea anunciada próximamente.

Azuaga tiene mandato en vigor hasta la primavera de 2025, tras su reelección en la junta de accionistas de 2022. Sin embargo, a sus 76 años, habría decidido dejar el cargo una vez ya se ha pasado página tras la crisis de gobernanza en la que ha estado envuelta la entidad desde la fusión con Liberbank hace dos años.

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Las fuentes consultadas señalan que el proceso de sustitución de Azuaga todavía no está en marcha, pero se podría activar pronto. En tal caso, su sustituto podría tomar el relevo en los primeros meses de 2024. Este banquero ha sido clave en la historia reciente del banco andaluz, desde su salida a bolsa en 2017 hasta su fusión con Liberbank y el seguir siendo una de las pocas antiguas cajas en pie.

Todas las fuentes consultadas dan por hecho que le sustituirá un consejero-presidente independiente, algo que situará el banco en los mejores estándares de gobierno corporativo del Banco Central Europeo (BCE), como también se le está sugiriendo a Bankinter. Para el supervisor europeo, lo ideal es que todas las entidades tengan un presidente no ejecutivo con la consideración de independiente que haga de contrapeso del consejero delegado, en este caso, el recién nombrado Isidro Rubiales.

Trayectoria

Azuaga es licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Málaga. Llegó al grupo procedente de Caja de Antequera, donde se incorporó en 1986 como director de auditoría y control interno. En 1991 fue nombrado subdirector general de control de Unicaja. En 2004 dejó la entidad para fichar por Aena como presidente. Volvió al banco malagueño en 2008 como director de participadas y fue ascendido a director general en 2010. Le sumó la presidencia del banco adquirido Banco Ceiss en 2014, hasta que Braulio Medel confió en él para relevarle al frente del banco cuando se vio obligado a retirarse en la fundación, en 2016.

Su gestión posterior le llevó a un distanciamiento con Medel que explicó muchos de los hechos recientes que se han vivido en el banco. Azuaga apostó por la salida a bolsa del banco en verano de 2017, frente a otras fusiones que planteó el banquero sevillano (con Santander y Popular), algo que los distanció.

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Esto hizo que Medel apoyara al equipo asturiano de Liberbank en la fusión de finales de 2020, provocando una crisis institucional en otoño de 2021. Esta derivó en la salida de Medel de la Fundación Unicaja y en una serie de acontecimientos que culminaron con la dimisión del CEO asturiano Manuel Menéndez.

Tras este episodio, Unicaja Banco está levantando cabeza a nivel de gobierno corporativo con una serie de cambios que se han ido aprobando en los últimos meses. En primer lugar, el nombramiento por unanimidad del CEO Rubiales, que está tratando de remontar la actividad y transformación de la entidad. En segundo lugar, la incorporación de varios consejeros independientes. Y, por último, la salida de consejeros como Oceanwood, un fondo oportunista (ya disuelto) que generaba roces en el consejo. Es probable que su silla sea ocupada por el accionista Tomás Olivo, como publicó este medio.

Tras estos vaivenes y posterior estabilización, Azuaga ha encontrado el entorno propicio para dar un paso atrás y dejar que un nuevo presidente lidere la gobernanza del banco, que ya está estabilizado, pero tendrá nuevos retos.