BBVA mantiene a nueve directivos imputados en el caso Villarejo en áreas clave

BBVA afronta el próximo lunes otro episodio clave del caso Villarejo, con la declaración de su presidente, Carlos Torres, como testigo. El banquero salmantino se juega mucho en este paso por la Audiencia, al que llega con parte de su cúpula tocada por la relación del banco vasco con el polémico comisario.

Desde que estalló este escándalo, la Audiencia Nacional ha imputado a 19 directivos y exdirectivos de la segunda entidad española, de los que nueve siguen en el banco en puestos de responsabilidad, una ha sido desimputada y otros nueve están fuera del grupo financiero, bien o porque juez empezó a investigarles cuando ya habían salido, bien porque han sido cesados o se han ido voluntariamente.

Entre los ejecutivos de confianza de Torres investigados que siguen en BBVA figura uno que hasta ahora se había creído que estaba fuera del banco, Eduardo Ortega, expresidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, que fichó por el grupo en 2014. Fue imputado en el caso Cenyt en 2019 y desde entonces hay múltiples noticias que le situaban fuera de la entidad, que no fueron desmentidas por el banco.

Sin embargo, sigue en un puesto de responsabilidad a nivel internacional de los servicios jurídicos. Desde BBVA, aclaran que no ha tenido participación en la investigación interna del caso Villarejo ni en su estrategia legal. Uno de los motivos por los que llegó al banco bajo la presidencia de Francisco González (FG) fue el de ganar influencia en los juzgados. Algo que, según las fuentes consultadas, podría haber influido en su continuidad, pese a haber dejado la primera línea de los Servicios Jurídicos. Ortega fue clave en algunos hechos ligados a los contratos de Cenyt, como la denuncia anónima contra Ausbanc.

Por encima de Ortega, hay tres investigados en el banco que figuran en el comité de dirección: Juan Asúa, asesor de Torres; Joaquín Gortari, director de Auditoría Interna y exjefe de gabinete del expresidente FG, y Paul G. Tobin, director de Comunicación. Tanto Asúa como este último han tenido en algún momento tareas ligadas a la investigación del caso y Gortari debería haber estado en puestos de responsabilidad de la misma, como auditor interno. Sin embargo, el banco excluyó a esta área de las tareas.

El resto de imputados que siguen en el banco tiene distintas responsabilidades en el equipo de Seguridad, del que partieron gran parte de los mandatos de BBVA a la empresa de Villarejo. Inés Díaz Ochagavía llegó a ser la principal responsable de esta división, hasta que fue relegada el año pasado. Esta investigada hizo una declaración que generó turbulencias en el banco. Recientemente, ha pedido que se archive el caso para ella.

También están investigados Nazario Campo y tres ejecutivos de Seguridad involucrados en el contrato de Anbycol, una empresa de Antonio Bonilla, exsocio de Villarejo, que BBVA contrató cuando este entró en prisión. Son Simón Galera, Óscar Santos y José Manuel Cantero.

¿Doble rasero?

Frente a estos imputados, hay otros que dejaron el banco como consecuencia directa del estallido del caso y que no están de acuerdo en las medidas tomadas por BBVA. El principal es Antonio Béjar, exdirector de Riesgos en España, que llegó a enfrentarse a la entidad en los tribunales, consiguiendo una indemnización de 1,3 millones. También está el caso del ex responsable de los Servicios Jurídicos Eduardo Arbizu, que salió en verano de 2019 después del archivo de un polémico expediente sancionador en su contra. Poco después dejó sus cargos otra persona de su equipo, José Manuel García Crespo.

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Europa Press

Otros tres que salieron del banco tras su imputación, aunque a priori no por nada ligado a ella, son el exjefe de Contabilidad Ricardo Gómez Barredo; un exdirectivo de banca comercial, Ignacio Pérez Caballero, y uno de los responsables del Departamento Financiero, Javier Malagón.

También hay otros tres exdirectivos investigados que ya estaban fuera del banco cuando fueron citados por la Audiencia: el propio FG, el ex consejero delegado Ángel Cano y el exdirector de Riesgos Manuel Castro.