Ikea lanza una colección de productos 'slow life' de edición limitada

Hace ya diez años, el gigante de la decoración nórdica, Ikea, comenzó a asociarse con empresas sociales, comprometidas con la creación de empleo y el empoderamiento de las personas más necesitadas. Aquella iniciativa cobra ahora una dimensión global con Vårdande, la nueva colección, de edición limitada, creada por la marca en asociación con cinco empresas sociales procedentes de la India y Vietnam.

Esta colaboración tiene como objetivo mejorar los medios de vida de los productores, procedentes de grupos marginales, ofreciéndoles un empleo a largo plazo mientras trabajan con materiales naturales y sostenibles. Pero además, también pretende ofrecer a los consumidores objetos de decoración que fomenten su bienestar, que inviten a parar, a llevar una vida en armonía tanto con el exterior como con su interior y que ayuden a practicar eso que ahora conocemos como ‘slow life’.

Los productos de Vårdande no solo se han creado en Asia, sino que también se han inspirado en sus tradiciones, en sus rituales de cuidado personal, en su búsqueda de la plenitud mental, en el valor de lo artesano…, para buscar el equilibrio entre el cuerpo y la mente, en un lugar tan íntimo como es el hogar. De hecho, es una colección pensada para tomarse un momento para nosotros mismos, descansar, plantar los pies en la tierra y disfrutar de lo que nos rodea sin prisa y con atención. Y para ello propone objetos pequeños y de diseño delicado con los que realizar cambios sutiles en la decoración de la casa, aportando un toque de originalidad, tranquilidad y contacto con la naturaleza que ayude a reconectar con uno mismo.

¿Un ejemplo? Su delicado móvil colgante, inspirado en los carrillones de viento. Las campanas, que imitan a unas conchas procedentes del sur de la India, al chocar entre sí consiguen aportar una ligera musicalidad a cualquier estancia con un sonido relajante y evocador. También lo son sus macetas trenzadas con fibras vegetales, con un diseño original y natural que permite dar el protagonismo que merece a la planta que contenga, pero también resulta un objeto bello y decorativo aun estando vacía. En definitiva, son detalles que pueden cambiar la concepción de un espacio y convertirlo en un refugio de paz.

Esta colección también busca recuperar esa conexión con la naturaleza en el exterior. Para ello, Ikea propone bolsas, cestas, ideas de almacenamiento inteligente y textiles, entre otros. Todos ellos artículos ligeros y fáciles de transportar para ser consciente de la relación y respeto por el medioambiente. Su cesta con doble asa y compartimentos internos es una buena muestra: fabricada en yute 100 %, es ligera, organizada y un aliado para un pícnic veraniego en cualquier lugar, desde un bosque perdido, hasta la terraza de casa. Además, ha sido confeccionada con yute sostenible procedente de Classical Handmade Products, una entidad de Bangladés, comprometida con crear empleo para las mujeres de los pueblos cercanos, que les ofrece un servicio de cuidado infantil al lado de sus trabajos.

Siguiendo esa mentalidad 'slow life', de saber parar y cuidarse, la colección nórdica hace especial hincapié en el momento baño; concebido como un ritual de belleza, gracias a sus textiles sencillos diseñados con el patrón de 'gofre' por un lado, y rizo, por el otro. Así, logra generar una combinación de comodidad y textura para crear un ‘spa’ en tu propia casa. Su kimono, realizado en 100 % algodón, de aspecto arrugado y con delicados hilos bordados en las mangas y los bolsillos, otorgará una sensación de segunda piel que se convertirá en un bálsamo de bienestar para poner el broche final a dicho ritual.

Los productos de la colección de Vårdande están disponibles en las tiendas de Ikea desde comienzos de agosto. Además, gracias a sus nuevas tarifas de paquetería, también podrán adquirirse 'online' o a través de su servicio de venta telefónica; y recibirlos en casa o en cualquiera de los 2000 puntos de entrega desde dos euros.