Los Polanco apuestan fuerte por el golf y tenis como complemento a su negocio inmobiliario

La familia Polanco, fundadora de Prisa, ha decidido realizar una reorganización societaria. Tropical Hoteles, la firma con la que explotan turísticamente un conjunto de apartamentos y dos hoteles, gestionan un campo de golf y desarrollan el proyecto inmobiliario Abama Luxury Residences, ha mandado parte de su negocio, como es el de las actividades de golf y tenis, a otra sociedad: Abama Golf y Tenis SL. Así, buscará potenciar la celebración de eventos deportivos tanto nacionales como internacionales.

La compañía pretende seguir celebrando campeonatos de golf y torneos de tenis como la WTA y la ATP Challenger, celebrados a finales de 2021, y que esperan acoger también este año tras la compra del Club Deportivo Abama, junto a la organización de 'stages' de equipos profesionales. El objetivo es, según señala la propia compañía a El Confidencial, contribuir al desarrollo y promoción de la marca destino Abama Resort (de lujo) Tenerife y del municipio de Guía de Isora en su conjunto, como un producto turístico de referencia en lo deportivo, complementario a su faceta turística y su división inmobiliaria.

En Abama Golf y Tenis, también agruparán otras actividades de ocio menos relevantes, pero que también generarán ingresos para la compañía, como un campamento infantil al aire libre. Abama Kids Camp, como fue bautizado, se ofrece como un servicio más a los huéspedes de sus hoteles cinco estrellas Las Terrazas de Abama Suites y Los Jardines de Abama Suites, así como a los propietarios que han comprado una vivienda en Abama Resort y que suman alrededor de 400 familias.

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Con esta escisión de parte de su negocio, la familia Polanco logrará ampliar su gama de servicios y, sobre todo, controlarlos con una división autónoma dentro de la compañía, lo que les permitirá optimizar su gestión empresarial en un momento de crecimiento y reorganización de las actividades de Abama Resort. De hecho, acomete esta operación tras el impacto del covid, que provocó que el beneficio de Tropical Hoteles se desplomara de los 21,13 millones hasta los 3,08 millones en 2020, tras caer sus ingresos de los 14,8 hasta los 8,78 millones.

Resultados que podrían haber mejorado el pasado curso y, sobre todo, este año. En la presentación de sus cuentas en el Registro Mercantil, la compañía señaló que las perspectivas eran que a partir de finales de 2021 y durante 2022 comience progresivamente una tendencia al alza en ingresos y márgenes. Así, el complejo inmobiliario de Abama busca consolidarse como un destino de referencia dentro del segmento residencial de lujo en Tenerife.

Pérdidas de su matriz

Tropical Hoteles se integra dentro de su matriz Rucandio, que no ha logrado dejar atrás las pérdidas al arrojar un resultado negativo de 10 millones frente a los 12,6 millones perdidos en 2019, y entre las que destaca su participación en Prisa. Todo ello, debido a que la cifra de ingresos consolidada del grupo fue de 30,66 millones, sufriendo una disminución del 41,06% por el golpe de la pandemia en el sector turístico. De hecho, y dentro de su actividad inmobiliaria para el desarrollo residencial del Complejo Abama, vendió un total de nueve unidades entre parcelas y villas de uso residencial, una menos que en 2019, ascendiendo el montante a 22,2 millones.

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El impacto de la pandemia hizo que una de sus sociedades, Abama Terraces (apartamentos turísticos), obtuviera un préstamo con garantía ICO de 600.000 euros con vencimiento a cinco años. Por su parte, otra sociedad de los Polanco, como Tropical Turística Canaria —integrada en Tropical Hoteles—, logró uno por un importe de 500.000 euros con el mismo plazo de duración. Así, el montante pedido al Instituto de Crédito Oficial asciende hasta los 1,1 millones.