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Ford España monta 'in extremis' un plan para Almussafes y el Perte del coche eléctrico
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AYUDAS DEL NEXT GENERATION

Ford España monta 'in extremis' un plan para Almussafes y el Perte del coche eléctrico

La filial española recibe autorización de la sede europea para presentar proyectos a las ayudas del Next Generation. La concesión será clave para asignar unidades a la planta valenciana

Foto: Stuart Rowley, presidente de Ford Europa. (Reuters)
Stuart Rowley, presidente de Ford Europa. (Reuters)
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Se despejó la incógnita. Ford España sí acudirá finalmente a la convocatoria de ayudas licitada por el Ministerio de Industria en el marco del proyecto estratégico (Perte) para la electrificación de la industria del automóvil. La filial de la multinacional americana ha contactado con sus principales proveedores para armar una propuesta de cadena de valor con iniciativas para acelerar la electrificación de la planta de Almussafes (Valencia). La factoría está pendiente de la asignación de nuevos modelos eléctricos, claves para la continuidad de la carga de trabajo a partir de 2024, cuando dejará de fabricar modelos de combustión como la furgoneta Transit, el S-Max o el monovolumen Galaxy, para quedarse solamente con el Kuga. El SUV representa en situación de normalidad del mercado el 50% de su producción, aunque Almusssafes vive actualmente inmersa en una sucesión de ERTE por la caída de la demanda y los problemas de suministros.

Hasta ahora, Ford no ha aclarado que pensaba acudir a la convocatoria de ayudas financiadas con el mecanismo europeo de recuperación Next Generation. Esta situación generaba mucha incertidumbre porque se interpreta el Perte del automóvil como una señal de luces largas. Las marcas que soliciten ayudas para realizar importantes inversiones se entiende que lo hacen con vocación de transformarse a largo plazo. Es el caso, por ejemplo, de Seat-Volkswagen, que, además de modernizar sus plantas de Landaben (Navarra) y Martorell (Barcelona), tiene previsto solicitar financiación para la que será la primera fábrica de celdas de baterías para coches en España, ubicada en terrenos de Parc Sagunt. La inversión conjunta de su proyecto español es de 7.000 millones.

Foto: EC.

La previsión de la central de Ford en Detroit es no comunicar hasta junio su decisión sobre la asignación de sus últimos modelos, por los que pugna también la planta alemana de Saarlouis. Sin embargo, según ha podido saber El Confidencial de fuentes del sector, Ford España ha recibido autorización de la dirección europea que preside Stuart Rowley para configurar proyectos ligados a la electrificación de la cadena de ensamblaje y pujar por el paquete de ayudas públicas que distribuirá el Gobierno. La multinacional ha comunicado a los proveedores con los que está cerrando la propuesta que la asignación de nuevas unidades y carga de trabajo en Almussafes está muy condicionada por la concesión de esas subvenciones públicas. Pero, al mismo tiempo, que el hecho de que Industria evalúe positivamente los proyectos y asigne recursos no implica necesariamente que finalmente Almussafes sea elegida para los nuevos modelos. La decisión sigue en el aire en cualquier caso. Eso sí, recibir los fondos ayudaría mucho a la planta valenciana.

El Gobierno ha tratado de implicar a Ford en el Perte desde que comenzó a fraguarse en el Ministerio de Industria. El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ya se reunió hace un año con Rowley en la Moncloa. La ministra Reyes Maroto visitó el pasado 6 de abril en Detroit al vicepresidente de Relaciones Gubernamentales de Ford, Matthew Godlewski, en Estados Unidos para tratar de convencerle de que se suba al plan de ayudas, dotado con un presupuesto de 2.975 millones de euros, de los que 1.425 millones se concederán en forma de préstamos y otros 1.550 millones a través de subvenciones.

Foto: Wayne Griffiths, CEO de SEAT-Volkswagen. (Reuters/Albert Gea)

En ese viaje, estuvo acompaña por la secretaria autonómica de Industria de la Generalitat valenciana, Rebeca Torró. La Administración valenciana también se ha comprometido a mantener e, incluso, incrementar los programas de ayudas a la I+D+i con los que desde hace años apoya a la factoría de Almussafes. La filial española ha recibido casi 150 millones en la última década en forma de subvenciones a proyectos de investigación y mejora de motores y vehículos, dentro del marco compatible con la política de Competencia de la Comisión Europea.

Ford, como el resto de aspirantes a la concesión de subvenciones y préstamos blandos, tiene hasta bien entrado mayo para preparar su propuesta. Industria había establecido vía Boletín Oficial del Estado el 3 de mayo como plazo límite para la presentación de ofertas. No obstante, el secretario general del Ministerio, Raül Blanco, anunció este viernes una modificación de la orden para ampliar hasta el 13 de mayo la ventanilla de recepción de iniciativas industriales.

Se despejó la incógnita. Ford España sí acudirá finalmente a la convocatoria de ayudas licitada por el Ministerio de Industria en el marco del proyecto estratégico (Perte) para la electrificación de la industria del automóvil. La filial de la multinacional americana ha contactado con sus principales proveedores para armar una propuesta de cadena de valor con iniciativas para acelerar la electrificación de la planta de Almussafes (Valencia). La factoría está pendiente de la asignación de nuevos modelos eléctricos, claves para la continuidad de la carga de trabajo a partir de 2024, cuando dejará de fabricar modelos de combustión como la furgoneta Transit, el S-Max o el monovolumen Galaxy, para quedarse solamente con el Kuga. El SUV representa en situación de normalidad del mercado el 50% de su producción, aunque Almusssafes vive actualmente inmersa en una sucesión de ERTE por la caída de la demanda y los problemas de suministros.

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