Endesa busca director de RRHH en plena negociación de convenio con los sindicatos

Endesa está buscando nuevo director general de Personas y Organización, según confirman fuentes al tanto del proceso de selección. Se trata de un puesto clave en este momento en la alta dirección de la eléctrica cotizada en el Ibex 35, ya que la empresa lleva más de dos años negociando con los sindicatos el V convenio marco, en un clima de constante tensión entre la dirección y los representantes de los trabajadores.

El actual responsable, Andrea Lo Faso, termina ya su periplo en la firma española, donde recaló procedente de Enel en 2011, para regresar a la matriz italiana. Su salida responde a que finaliza el periodo máximo de expatriación del que disponía, con lo que su salida no está vinculada a la negociación del convenio, señalan fuentes conocedoras del proceso. Por su parte, fuentes oficiales de Endesa afirman que no hacen comentarios de procesos internos.

Para encontrar un sustituto, el consejero delegado de la eléctrica, José Bogas, ya ha activado el proceso de selección. Endesa ha ofrecido recientemente el puesto a la actual directora de Recursos Humanos de Vodafone España, Remedios Orrantia, quien sin embargo ha preferido mantenerse en su puesto. La jefa de personal de Vodafone ejecutó un ERE que afectaba a casi 1.000 trabajadores, 500 de los cuales tendrán que abandonar la compañía de manera forzosa. El proceso concluyó en marzo de este año.

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Por ahora, el proceso sigue abierto y la decisión de si será una designación por promoción interna o será alguien de fuera aún no está tomada, aseguran las fuentes consultadas.

El hecho de que Endesa haya puesto los ojos para este puesto en una ejecutiva cuya actividad principal es la reducción de plantilla ha hecho saltar todas las alarmas entre los sindicatos, que tras más de 70 reuniones de la mesa negociadora con la dirección aún no han llegado a un acuerdo para instaurar el nuevo convenio colectivo.

De hecho, llevan desde el final de 2018 sin un marco de relaciones laborales de empresa propio, una anomalía para una empresa de su tamaño. Esto deja a los trabajadores al albur que marca el Estatuto de los Trabajadores, aunque la empresa ha mantenido las condiciones del IV convenio colectivo.

La situación además no acaba de avanzar. Uno de los temas más polémicos ha sido hasta ahora la tarifa de la luz de empleados, jubilados y viudos de los jubiladas y jubilados. De hecho, desde el pasado 1 de octubre, los 26.000 pasivos de la compañía ya no disponen del pago de la energía que hasta ahora hacía la empresa.

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Con este panorama, la situación se está tensando. Los sindicatos siguen barajando movilizaciones. A finales de verano, la mediadora de la mesa negociadora, María Emilia Casas, magistrada hasta 2011 del Tribunal Constitucional, se congratulaba de que las partes acercaran posturas. No obstante, la negociación se aleja. Hay que tener en cuenta que la Audiencia Nacional falló a favor de la empresa antes del verano, después de que no se prorrogara la ultraactividad (periodo en el que se mantiene vigente el convenio si no hay un nuevo marco laboral) que venció el año pasado, esfumándose así la posibilidad que insinuó el Gobierno de extender este derecho ilimitadamente.

Ahora los sindicatos barajan movilizarse, tal y como hicieron en la junta general de accionistas celebrada en abril. Desde hace dos años, la empresa ya no hace la presentación de la Liga ACB —de la cual es principal patrocinadora y a la que da nombre— en la sede para evitar las críticas de los representantes de los trabajadores. El nuevo director de Recursos Humanos tendrá que lidiar con toda esta situación sin resolver desde hace ya más de dos años.