Es noticia
BBVA, Bankia y Caixa dejan la mayor industria catalana en manos de 'hedge funds'
  1. Empresas
VENDEN LA DEUDA CON PÉRDIDAS DEL 50%

BBVA, Bankia y Caixa dejan la mayor industria catalana en manos de 'hedge funds'

Los principales bancos acreedores de Celsa se han deshecho de la deuda que el grupo siderúrgico no puede pagar y que dará a los 'hedge funds' la mayoría del capital

Foto: Centro de producción de Celsa Barcelona. (Grupo Celsa)
Centro de producción de Celsa Barcelona. (Grupo Celsa)

Celsa, la mayor compañía industrial de Cataluña, vuelve a ser protagonista de los mercados financieros un año y medio después de firmar la refinanciación. Sus principales acreedores, liderados por BBVA, Bankia, CaixaBank y Sabadell, han vendido los 1.250 millones de euros de deuda calificados como no sostenibles con pérdidas del 50%.

Según han confirmado fuentes financieras, estos cuatro bancos han traspasado gran parte de estos 1.250 millones a la mitad de su valor nominal a ‘hedge funds’ o fondos oportunistas, al considerar que será muy difícil recuperar este crédito dada la evolución del grupo siderúrgico controlado por la familia Rubiralta. El único de los prestamistas que, de momento, no ha vendido su trozo del sindicado es Banco Santander, que pedía un precio mayor por su montante y que fue la entidad más beligerante en las negociaciones para la reestructuración.

Foto: El presidente de la Generalitat. (EFE)

Este préstamo tiene la condición de ser deuda convertible en capital, por lo que a su vencimiento dará a los tenedores de este pasivo la posibilidad de quedarse con la mayoría de la acciones de la multinacional. En otras palabras, si la compañía no consigue ingresos extraordinarios para hacer frente a esta deuda, serán los nuevos dueños de Celsa Group, que tiene 9.300 empleados en todo el mundo.

El acuerdo cerrado a finales de 2017 se estructuró en dos tramos. El primero, por 1.425 millones, se calificó como la deuda que la empresa acerera podía amortizar en un plazo máximo de cinco años, hasta noviembre de 2022. A su vez, este primer tramo estaba compuesto por 525 millones de euros de financiación del circulante y otros 900 millones con amortizaciones ordinarias semestrales crecientes a partir de mayo de 2018.

El segundo tramo ascendía a 1.250 millones y su vencimiento se extendió hasta 2023 en un solo pago. Pero se calificó de ‘no sostenible’, por lo que los acreedores ya daban por hecho que no podrían recobrar esta partida, casi un 40% del total. Era una quita encubierta para permitir que Celsa siguiera en funcionamiento y, de esta forma, no tener que provisionar la deuda en su integridad.

El primero, por 1.425 M, se calificó como la deuda que la empresa acerera podía amortizar en un plazo máximo de cinco años, hasta noviembre de 2022

Pese a que el grupo de los Rubiralta no tendría que hacer frente hasta dentro de cuatro años a esta parte del pasivo, la banca ha decidido deshacerse de este crédito por el temor a que, al vencimiento, se considere moroso y se tengan que quedar con las acciones de Celsa. Otras fuentes explican que este traspaso con pérdidas del 50% se explica por la obligación que tiene la banca de provisionar ya el crédito por parte del Banco Central Europeo (BCE).

Por otra parte, BBVA y Bankia también han vendido su parte del préstamo que le concedieron —los citados 525 millones— para hacer frente a los pagos diarios o circulante y quitarse de encima el riesgo de una industria que está sufriendo a nivel mundial por la guerra arancelaria.

Cumplimiento de objetivos

Fuentes próximas a Celsa señalan que la compañía está cumpliendo con las obligaciones que le impuso la banca cuando firmó la refinanciación de los 1.425 millones. Obligaciones relativas al cumplimiento de determinados ratios financieros, trimestralmente crecientes, vinculados a la obtención de una cifra mínima de beneficio de explotación o ebitda. Aunque, según estas fuentes, los números de Celsa están por debajo de los establecidos en el plan de negocio verificado por KPMG, son suficientes para hacer frente a los 1.425 millones de deuda sostenible.

Hasta la venta a los fondos buitre, los bancos con más exposición a Celsa han sido Banco Santander, que tiene en su balance 555 millones, BBVA (360 millones), CaixaBank (300 millones), Banco Sabadell (360 millones), Bankia (215 millones) y Abanca (140 millones).

Celsa, la mayor compañía industrial de Cataluña, vuelve a ser protagonista de los mercados financieros un año y medio después de firmar la refinanciación. Sus principales acreedores, liderados por BBVA, Bankia, CaixaBank y Sabadell, han vendido los 1.250 millones de euros de deuda calificados como no sostenibles con pérdidas del 50%.

Celsa Group Refinanciación KPMG
El redactor recomienda