Es noticia
Dimas ofrece dejar El Corte Inglés si le releva un profesional ajeno a las herederas
  1. Empresas
crónica de un consejo volcánico

Dimas ofrece dejar El Corte Inglés si le releva un profesional ajeno a las herederas

El aún presidente salvó este miércoles dos 'match ball' en un consejo volcánico, pero está dispuesto a dimitir como presidente si no le sustituye Marta Álvarez Guil

Foto: El presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno. (EFE)
El presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno. (EFE)

Calle Hermosilla 112, de Madrid. En la quinta planta de este vetusto edificio, de decoración 'vintage', con mobiliario de madera más propio de un ministerio que de una empresa que quiere competir con Amazon, se reunió ayer el consejo de administración de El Corte Inglés. Los 10 miembros del órgano de gobierno del que fue el mayor grupo de distribución de España se vieron las caras por primera vez tres meses después de la última reunión, prueba inequívoca del grado de beligerancia que han alcanzado las distintas familias herederas de los fundadores de la empresa de distribución.

La sesión estaba prevista para las 12:00, con cuatro puntos en el orden del día del consejo. Pero la pelea empezó antes, en las salas contiguas al despacho del presidente, cuando Marta y Cristina Álvarez Guil, las hijas del fallecido Isidoro Álvarez, propusieron incluir un nuevo tema a tratar: la destitución inmediata de su primo y presidente, Dimas Gimeno, sin esperar al consejo extraordinario que debe celebrarse a mediados del próximo mes de junio.

Foto: El presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno, las hijas de Isidoro Álvarez, Marta (2i) y Cristina, y Florencio Lasaga. (Fundación Ramón Areces)

Con expresiones cariacontecidas, las herederas legítimas de Isidoro entraron a mediodía a la sala de juntas sin conseguir su propósito. Florencio Lasaga y Carlos Martínez Echevarría, los octogenarios directivos coetáneos del que fuera presidente hasta su muerte en septiembre de 2014 —guardianes de los secretos más profundos de El Corte Inglés, que a principios de mayo apoyaron la dimisión del sucesor de Isidoro en un consejo extraordinario—, consideraron que no era el momento y no validaron la inclusión de ese nuevo punto a debatir.

Por tanto, Gimeno inició la reunión exponiendo su deseo de poner en marcha un plan estratégico, denominado ‘Creando Futuro’, para modernizar la compañía y adaptarla a las nuevas exigencias de los clientes. Pero pronto comprobó que su capacidad de convencimiento es limitada y gran parte de los presentes le espetaron que él ya no es la persona apropiada para desarrollar hojas de ruta relativas al negocio, al no tener ya funciones ejecutivas. Una labor que, según Marta y Cristina Álvarez, ya corresponde a los dos consejeros delegados, Víctor del Pozo y Jesús Nuño de la Rosa, nombrados a propuesta de ellas en octubre del pasado año. Especialmente dura fue Paloma García Peña, representante de Corporación Mancor, una sociedad de cartera dueña del 7% de El Corte Inglés propiedad de cuatro hermanos también con intereses muy distintos.

Foto: Foto: El Corte Inglés.

Lo mismo ocurrió con el segundo punto del día, la aprobación de la salida a bolsa como solución al conflicto accionarial. Una iniciativa que encontró una oposición similar y que, como con el primer asunto, no llegó ni a votarse. Así, con un tono de voz creciente y un lenguaje poco diplomático, más habituales de un mercado callejero que de un centro comercial cinco estrellas, los consejeros llegaron al punto relativo a la auditoría del área de seguridad, que tampoco pudo ser sometida al escrutinio de los presentes por no existir todavía el informe encargado hace más de cuatro meses.

Cuando el consejo llegaba a su fin, Marta y Cristina volvieron a la carga en el apartado de los ruegos y preguntas, momento en el que volvieron a solicitar la destitución de su primo. Con palabras gruesas, las hijas insistieron en pedir la cabeza de Gimeno, que la vio perder por minutos cuando le obligaron a salir de la sala del consejo para que fuese votada su continuidad. El cruce de acusaciones entre las herederas, Lasaga y Martínez Echevarría, con presencia digital del representante de Qatar a través de un plasma, fue de tal calibre que no se pusieron de acuerdo ni para votar a mano alzada.

Foto: Imagen del nuevo edificio de El Corte Inglés en Castellana.

A las 15:30, con las lanzas aún en posición de ataque, se decidió dar por concluida la reunión sin acuerdo alguno, señal evidente de la división interna y la incapacidad de los gestores para asumir responsabilidades. La salida del consejo de Marta fue abrupta, con portazo incluido, enfurecida por no haber conseguido guillotinar al aún presidente, cuya cabeza sigue pendiente de un hilo. El que todavía les une a Lasaga y Martínez Echevarría, que quieren evitar que se levanten las alfombras del pasado reciente de El Corte Inglés. Salvó dos mociones de censura en tres horas y media.

¿A qué se debió ese cambio de postura de la conocida como vieja guardia? A la reunión que el día anterior mantuvieron en secreto con Gimeno, su hermano Miguel Ángel y los dos consejeros delegados, Víctor del Pozo y Jesús Nuño de la Rosa, en la propia sede de la compañía. Los asuntos sobre potenciales pagos ilícitos que se trataron ahí llevan tanta dinamita que la razón aconseja a las partes no abrir la caja de los truenos.

La novedad es que Dimas se mostró en esa cita dispuesto a dejar la presidencia de El Corte Inglés a medio plazo, al constatar que ha perdido la confianza de gran parte del consejo. Pero su petición es que su puesto no lo ocupe Marta Álvarez, una persona sin experiencia en la gestión de una empresa que factura 15.000 millones y que ha pedido ser nombrada primera directiva ante la negativa de Manuel Pizarro a aceptar el sillón en medio de esta tormenta. El sobrino de Isidoro sigue en sus trece de no dimitir de forma voluntaria en los próximos 15 días ni en el próximo consejo extraordinario, pero sí a irse después del verano si el grupo designa a una persona ajena a las familias y con una reputación inmaculada. Virtudes que, visto lo visto, no se ven en el escaparate de El Corte Inglés.

Calle Hermosilla 112, de Madrid. En la quinta planta de este vetusto edificio, de decoración 'vintage', con mobiliario de madera más propio de un ministerio que de una empresa que quiere competir con Amazon, se reunió ayer el consejo de administración de El Corte Inglés. Los 10 miembros del órgano de gobierno del que fue el mayor grupo de distribución de España se vieron las caras por primera vez tres meses después de la última reunión, prueba inequívoca del grado de beligerancia que han alcanzado las distintas familias herederas de los fundadores de la empresa de distribución.

Dimas Gimeno Florencio Lasaga Manuel Pizarro Víctor del Pozo
El redactor recomienda