La estrella Malié o cómo por culpa de sus abuelos juega con España

Desde fuera, quizás sea difícil imaginar y creer que un extranjero puede sentir, luchar y jugar por otro país de la misma manera que por el suyo propio. Sin embargo, en las charlas privadas con fuentes de la Federación, de la propia plantilla o de su entorno, regularmente acaba saliendo el amor de estos rugbiers hacia el equipo y lo comprometidos que están. Charly Malié es un claro ejemplo. Francés, de 26 años, el único jugador de la selección española de rugby que juega en el Top 14 -la considerada mejor liga de Europa- y que tan solo un parto le ha alejado durante unos días de sus compañeros del XV del León.

El martes de la semana pasada, la Federación anunció que su apertura del Paloise no disputaría el encuentro del España-Alemania porque su mujer iba a dar a luz. El domingo por la tarde, unas horas más tarde del contundente 84-10 favorable a España, Malie fue papá. Este martes, sólo dos días después de haber conocido a su hija, cogió las botas, su camiseta roja y regresó a Madrid para continuar la última concentración antes del decisivo Bélgica-España, el que puede enviar al equipo de Santi Santos directamente al Mundial de Japón 2019.

La dificultad para negociar con su club, el Pau

Con mucha calidad y ritmo de juego, lee muy bien las jugadas de defensa. Tiene mucha personalidad con la pelota en la mano y se montan (entrenan) contras pensadas alrededor de Charly. Junto con Guillaume Rouet es la máxima figura del equipo y lleva desde 2011 enrolado con la selección española. Sólo ha podido jugar 9 partidos oficiales porque cuanto mejor es el equipo en el que un jugador está, más complicado es que el club ceda a su rugbier. En este caso, el equipo de Pau no sólo está en el equipo que marcha quinto del Top 14, también en uno que disputa los cuartos de la Challenge Cup. No obstante, cuando el objetivo es ir a un Mundial, los argumentos son más fuertes para ceder al jugador.

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

Al rugby se le llena la boca de "valores", pero España gana un torneo que no debía ni jugar

Víctor García

La primera vez que Charly Malié dijo “sí” a España fue por 'culpa' de sus abuelos españoles. La política de la Federación, en esta última década, ha sido la de reclutar a jugadores que puedan ser seleccionables -sin importar tanto dónde hayan nacido- siempre que tengan algún tipo de vínculo con España. El por aquel entonces seleccionador Regis Sonnes comenzó el trabajo y, apoyado en la labor de reclutamiento de Jean Michel Aguirre (el 'conseguidor' de la Federación en Francia), el actual entrenador nacional ha continuado dicha labor llevando a España a las puertas de un Mundial.

Esa excusa, la de tener algún vínculo con España, es una clave emocional para haber llevado al XV del León a la sorprendente situación en la que se encuentra en estos momentos. Cada uno tiene su historia, su motivo y su nexo de unión con la Piel de Toro. A Charly, concretamente, le motiva especialmente ver cómo sus abuelos se emocionan e ilusionan cada vez que su nieto juega por España. También le gusta entrenar en la ciudad de su equipo favorito de fútbol, el Real Madrid, y de su ídolo deportivo Cristiano Ronaldo. Aunque a partir de ahora, por lo que más querrá ganar desde ahora será por su hija... por Victoria.

TE PUEDE INTERESAR

Crónica de una histórica portada: cuando España dio una patada a un balón de rugby

Víctor García