El pacto histórico Márquez-Honda para alejar la chequera de Ducati en MotoGP

Marc Márquez, Honda y Repsol, un trinomio perfecto que este jueves extendió su relación para cuatro años más, hasta 2024. La renovación era un hecho desde hace tiempo, pero se ha oficializado en las últimas horas. A ninguna de las partes le interesaba otra cosa. Marc, al contrario que otros pilotos, solo quiere ganar para la fábrica del ala dorada, la que considera su casa móvil desde que en 2013 la dirección de HRC le diera la oportunidad de su vida en MotoGP. Los nipones tampoco estaban dispuestos a perder a su estrella, con el que han conseguido alcanzar una dimensión hasta ahora desconocida pese a que campeones los han tenido de todo tipo. Y luego está Repsol, la tercera pata. La petroquímica española es patrocinadora principal de Honda desde 1995 y de Marc desde antes de su irrupción en el mundial.

Así las cosas, las cartas estaban marcadas. Ducati llegó a ofrecer importantes cifras, pero no había opción "aunque hubieran puesto Italia entera", aseguran fuentes del equipo a El Confidencial. La renovación de Marc no es una cuestión económica -pese a que su contrato mejora para destacarse aún más como el mejor pagado del 'paddock' (no se conocen cifras exactas, pero venía cobrando unos 10 millones anuales)- sino de sensaciones. El catalán está seguro de tener la mejor moto, material, equipo de trabajo y ambiente en el box. Así ha sido en el pasado, seis títulos en siete campañas, y así se espera que sea en el futuro inmediato. La presencia este curso de su hermano Álex, que desea que ayude a crecer el proyecto, otro aliciente para terminar de estampar su firma. Mejor rodeado, imposible. La familia al completo.

Cuatro años (algo histórico) y no dos, como se venía realizando hasta ahora, de relación contractual. Más que un riesgo, desde el Repsol-Honda entienden la jugada como una inversión muy rentable. Marc tiene aún 27 años, disfruta de una gran proyección mediática y su personalidad, alegre y vitalista, acapara todas las miradas y atrae negocio, cosa que no es menor en el deporte profesional. Su gran labor la temporada pasada, en la que se paseó como Pedro por su casa tras superar una lesión de hombro, obligó a Honda a acelerar el proceso ante los diferentes cantos de sirena que llegaban de todas partes. Marc dijo que escucharía ofertas y lo hizo, pero los de Tokio siempre fueron su prioridad, así se lo hizo saber a los mandamases. "Las dos partes queríamos seguir juntas", comentó Yoshishige Nomura, presidente de HRC.

Pulverizar todos los records

En su anterior renovación (2018) el de Cervera fue muy explícito en sus solicitudes: quería una moto mejor, a su medida. La fábrica tomó nota y se puso manos a la obra para satisfacerle. Desde entonces, la RC213V ha sufrido un proceso de transformación tremendo: electrónica, basculante, potencia... hasta encajarle como un guante. Marc está comodísimo, pues ha pasado de arriesgar en cada carrera para rascar victorias a controlar la situación y ni siquiera los últimos test de Malasia, donde ha comprobado 'in situ' el avance de la competencia, le hacen dudar lo más mínimo de la nueva versión de su montura, un tanto eclipsada por Yamaha, KTM y Aprilia, dispuestas a batallar.

Actualmente, Marc es el piloto con mayor número de victorias con Honda en MotoGP (56), tercero de la historia. Por delante solo tiene a Agostini (68) y Valentino Rossi (89). El objetivo es claro: seguir sumando triunfos para pulverizar todos los records. Son muchos los que dicen que, sin el de Cervera, Honda sufriría escasez de resultados. Por si los rumores fueran ciertos, los japoneses prefieren taponar la herida a caer en la hemorragia. Marc también se ha dejado querer. Sería impensable que cualquier otro piloto firmara para tanto tiempo. Marc tendrá 32 años cuando su contrato se extinga en 2024, toda una vida deportiva. Para entonces ya podría ser, y con diferencia, el piloto más lauredado de la historia de la categoría reina. Agostini posee ocho títulos, por los seis del catalán, que esté año puede atrapar a Rossi, con siete.

El fin de Honda antes de arrancar el curso ya está hecho, renovar a Marc. Ahora ambas partes podrán centrarse únicamente en el trabajo en pista. El mundial arranca el 8 de marzo en Qatar, donde este fin de semana y hasta el lunes se disputarán los segundos test de la pretemporada, ideales para continuar la puesta a punto. Marc, aún en proceso de recuperación de su reciente lesión en el hombro, volverá a subirse a a la moto con la tranquilidad de tener su futuro completamente resuelto.