Del Cerro Grande propicia una lluvia de goles para romper la sequía del Barça (4-0)

Lluvia de goles en el Camp Nou para un Barça en sequía (4-0). El conjunto de Xavi Hernández hundió al Real Betis en el Camp Nou tras recuperar su once de gala a excepción de Ousmane Dembélé. Con Pedri como titular, el equipo volvió a disponer del esqueleto de cuatro centrocampistas y, por tanto, de más control y velocidad en la circulación de la pelota. El gol inicial de Andreas Christensen en el primer remate entre palos azulgrana, junto a la injusta expulsión de Edgar González tras una primera amarilla donde tocó balón, dejó al conjunto verdiblanco noqueado. Luego llegaría el tanto de Robert Lewandowski y el de Raphinha. Al final de la primera parte, el Barça tenía el partido en el bolsillo y el Betis debería afrontar una segunda parte durísima, donde llegó el cuarto tanto de la noche tras el tanto en propia puerta de Guido Rodríguez. Lamine Yamal debutaría con 15 años en el Barça. La noche fue negra para los béticos, que terminaron con Joaquín Sánchez lesionado tras entrar y recibir la ovación del Camp Nou.

Empezó el encuentro con un Betis tímido y un Barça crecido. Después de que el director de fútbol azulgrana, Mateu Alemany confirmara en la previa del encuentro que "este va a ser un verano interesante" en cuanto a fichajes se refiere, el Barça saltó al campo muy convencido. Los culés movían la pelota con brío y un Pedri que dotaba todo de sentido. La presión pospérdida también era eficaz. El Betis estaba muy cerca de la portería de Rui Silva y los de Xavi ostentaban el dominio absoluto de la pelota a la espera de los contragolpes visitantes.

Las malas noticias para los béticos no tardaron en llegar. En el minuto 11, un pilar defensivo como Luiz Felipe cayó lesionado. Entró Edgar González en su lugar en un movimiento decisivo para el devenir del encuentro. Solo cuatro minutos después, tras rechazar un saque de esquina, Raphinha centró sin oposición y Christensen entró como un elefante en una cacharrería para empujar el balón al fondo de la red. El Barça se adelantó en la primera gran ocasión clara ante un Betis timorato. El gol espoleó a los visitantes y llegaron los centros peligrosos de Juan Miranda y la dirección de Canales y William Carvalho. Luiz Henrique estuvo cerca del empate.

La expulsión de Edgar dinamitó el partido

Fue en ese preciso instante, con el Betis dando un paso hacia adelante y el Barça defendiendo cuando Edgar derribó a Raphinha en un contragolpe culé. El defensor bético había tocado la pelota al corte, pero Del Cerro Grande no dudó y le enseñó la cartulina amarilla. Edgar no se lo creía. El Betis siguió cargando el área. Primero con una nueva llegada de Luiz Henrique y luego con el zarpazo fuera de Willian José. No llegó el gol y sí la expulsión de Edgar en el minuto 33 tras una falta muy clara sobre Pedri que sí era tarjeta amarilla. Del Cerro Grande le enseñó la roja mientras Edgar protestaba y Joaquín Sánchez se indignaba en la banda.

Solo tres minutos después, Lewandowski marcó a placer el centro de Jules Koundé y en el 39, Raphinha marcaba el definitivo 3-0 tras el visto bueno del VAR. El Barça había matado el partido en la primera parte y la segunda era una oportunidad para ganar confianza e hinchar unas cifras goleadoras tímidas en las últimas jornadas. Retocó el equipo Pellegrini en la segunda parte con Paul Akouokou por Luiz Henrique y los andaluces salieron con la intención de recortar distancias. No se quedó lejos Miranda tras un buen centro de Ayoze. El cuatro del Barça, sin embargo, estaba mucho más cerca. Se le escapó a Lewandowski sistemáticamente.

Con todo a favor, Xavi dio minutos a Ansu Fati y Marcos Alonso por De Jong y Christensen. En el minuto 63, Joaquín Sánchez entró al campo y el Camp Nou le dedicó una gran ovación al extremo bético. Poco después, la afición culé también se emocionaría en la vuelta de Dembélé tres meses después de caer lesionado. El Barça no marcaría más goles, aunque tanto Araújo como Raphinha lo intentaron. La peor noticia de la noche se la llevaría Joaquín Sánchez en el minuto 80 al lesionarse de la rodilla en la temporada de su retirada y con el récord de más partidos disputados de la historia a tiro de piedra.

Solo un minuto después, Ansu Fati firmó una buena jugada individual y Guido Rodríguez introdujo la pelota en propia puerta al tratar de evitar el remate de Lewandowski. En el tramo final, el canterano Lamine Yamal debutó a los 15 años, el quinto más joven de la historia de LaLiga. El delantero estuvo a centímetros de marcar un gol en una noche histórica para él. Al final, 4-0 y LaLiga todavía más cerca.