Es noticia
El Real Madrid se inmola en liga ante el Villarreal y nace una estrella llamada Chukwueze (2-3)
  1. Deportes
  2. Fútbol
Antes del Chelsea

El Real Madrid se inmola en liga ante el Villarreal y nace una estrella llamada Chukwueze (2-3)

El Atlético de Madrid tiene a los de Ancelotti a cinco puntos y con un partido menos. Carletto hizo varias rotaciones en un planteamiento suicida. Chukwueze dejó un gol de época

Foto: Chukwueze, en una de sus mejores actuaciones. (EFE/Chema Moya)
Chukwueze, en una de sus mejores actuaciones. (EFE/Chema Moya)

Que el Real Madrid tenía la liga imposible se sabía desde hace varias jornadas. Que el equipo de Carlo Ancelotti va a sufrir hasta final de la temporada para retener la segunda plaza no se veía venir. Derrota dolorosa del conjunto madridista en el Santiago Bernabéu ante un Villarreal que prolonga su buena racha de resultados gracias a un Samu Chukwueze en modo estelar. Dos goles, uno de ellos de época, que contrarrestaron los tantos de Pau Torres en propia puerta y de Vinícius Jr. Morales sumó el otro tanto del equipo de Quique Setién en el 2-3 definitivo. Ancelotti desprotegió al equipo con numerosas rotaciones, pensando en la Champions League del miércoles ante el Chelsea. El Atlético de Madrid podría ponerse a dos puntos de su vecino si gana al Rayo Vallecano.

El partido se disputó sin centro del campo. Había una agujero de 50 metros de césped entre ambas zonas de peligro. Como un combate de boxeo donde no está permitido tener la guardia alta. El primer tanto de la noche surgió de las botas de Marco Asensio, que en esta ocasión había olvidado la posición de extremo derecho para colocarse por delante de Tchouaméni, a modo de falso interior. Por el carril del 10, el español reventó a su marca, con un Villarreal flojito en las acciones defensivas. Ya dentro del área cedió a Vinícius, que se quedó sin espacios. Cuando la jugada parecía perdida, Asensio se volvió a hacer con el esférico, intentó centrar al bulto y la pelota impactó en Pau Torres para alegría del Santiago Bernabéu. Lo celebró Marco, aunque no le vaya a contar, pero sin él no habría habido gol.

Foto: Benzema celebra uno de sus tantos. (EFE/Enric Fontcuberta)

Samu Chukwueze tuvo una gran ocasión del Villarreal minutos después del tanto madridista. El vertiginoso extremo derecho burló a Nacho, encaró a David Alaba y, con toda la portería para un disparo franco, el balón se marchó fuera de los dominios de Courtois. A pesar de que el partido de ida y vuelta suele ser un dolor de muelas para los porteros, el belga se sintió bastante cómodo ante el acoso del Submarino Amarillo… Al menos en la primera mitad.

El colegiado del encuentro, Alberola Rojas, colaboró en el altísimo ritmo que se vivió en el Santiago Bernabéu. Arbitraje modo Premier League, modo Champions League o llámenlo como quieran. Para pitar la falta, hacía falta más que el contacto. Y casi le cuesta un disgusto a Parejo. El centrocampista había arrebatado el balón a Vinícius en su propia área; acto seguido, el brasileño se levantó para presionar y Parejo se marchó al suelo en cuanto notó el contacto. Jugadas que siempre se pitan, pero que Alberola Rojas no aceptó. A punto estuvo Lucas Vázquez de rematar a puerta vacía.

Después de varias intentonas, y a pesar del gran partido de Courtois, el Villarreal empató el encuentro después de una exquisita acción individual de Chukwueze. El extremo volvió a demostrar su calidad, puro vértigo con la pelota en las botas. Se quedó solo delante de Nacho, le amagó con el cuerpo y le hizo un roto de época. Esta vez, sí decidió bien y fulminó a la portería merengue para igualar el partido a pocos minutos del final de la primera mitad. Hubo tiempo para la polémica después de una falta de Tchouaméni precisamente sobre Chukwueze. El francés llegó a tiempo y se lanzó al suelo, tocó con claridad la pelota, pero fue con los tacos por delante y la inercia le hizo impactar en su rival. Era una acción dura, aunque sin mala intención. Alberola Rojas se dejó llevar por su primera impresión y acabó en lance del juego. Algo que enfado, y mucho, a Quique Setién en la banda, que le cuestionó al cuarto árbitro si no era una jugada merecedora de la intervención del VAR.

placeholder Vinícius, el mejor del Real Madrid. (Reuters/Isabel Infantes)
Vinícius, el mejor del Real Madrid. (Reuters/Isabel Infantes)

La segunda mitad comenzó con alegrías para el Santiago Bernabéu. Una vez más, la defensa del Villarreal demostró estar muy flojita. Vinícius se la echó larga y cuerpeó más que dos defensas para luego poner por delante al Madrid ante un Pepe Reina que poco pudo hacer. Mucho mérito para el brasileño, protagonista absoluto del ataque merengue, pero se lo habían puesto demasiado fácil.

El partido continuó roto. Sin centro del campo, sin estabilidad, todo ocasiones. Y ahí empezó a perdonar el Real Madrid. Vinícius tuvo dos clarísimas, con Pepe Reina vendido, que se marcharon por centímetros. Ancelotti, a medio camino del resultado y de la cercanía del Chelsea, quitó a Karim Benzema (no demasiado brillante en el encuentro) y dio entrada a Federico Valverde. Ni con esas logró más control el equipo del técnico italiano.

Llegó entonces un nuevo arreón de los de Quique Setién. Fantástica apertura de Baena a un Chukwueze que se internó en el área para ponerla rasa. Jugada enmarañada, pero que acabó con un disparo a quemarropa de Morales, recién entrado al campo. El linier había levantado el brazo, pero poco tardó el VAR en corregir y dar validez a un gol legal. Ancelotti reaccionó metiendo a Luka Modric en el césped por Tchouaméni. Partido complicadísimo, y que deja muchas dudas, para el pivote francés.

Lo intentó el Real Madrid con más ímpetu que calidad en los minutos finales

Sonaron los tambores en el Bernabéu, que, al menos, disfrutó del espectáculo. Modric puso un centro precioso para Marco Asensio, quien remató con una semivolea para que Pepe Reina se luciera con un paradón. Pero quien se iba a lucir, otra vez, era Chukwueze para dejar uno de los grandes goles de la temporada. Encaró en banda, se marchó hacia fuera y zurdazo a la escuadra de Courtois. Ni el inmenso belga pudo hacer nada. Golazo de época.

Alberola Rojas, que acaparó varios minutos de protagonismo en el partido, no se pensó demasiado un penalti por mano de Mandi. Es la historia de siempre con las manos. El defensa del Villarreal tenía la mano extendida, pero estaba tocando el suelo al corte. Después de varios minutos, el colegiado se fue a verla a la pantalla y concluyó que la pelota había tocado antes el pecho de Mandi y que, por lo tanto, no era pena máxima. Lo intentó el Real Madrid con más ímpetu que calidad en los minutos finales. LaLiga estaba perdida, pero se empieza a complicar la segunda posición, con el Atlético de Madrid a cinco puntos y con el partido de esta jornada, ante el Rayo Vallecano, pendiente.

Que el Real Madrid tenía la liga imposible se sabía desde hace varias jornadas. Que el equipo de Carlo Ancelotti va a sufrir hasta final de la temporada para retener la segunda plaza no se veía venir. Derrota dolorosa del conjunto madridista en el Santiago Bernabéu ante un Villarreal que prolonga su buena racha de resultados gracias a un Samu Chukwueze en modo estelar. Dos goles, uno de ellos de época, que contrarrestaron los tantos de Pau Torres en propia puerta y de Vinícius Jr. Morales sumó el otro tanto del equipo de Quique Setién en el 2-3 definitivo. Ancelotti desprotegió al equipo con numerosas rotaciones, pensando en la Champions League del miércoles ante el Chelsea. El Atlético de Madrid podría ponerse a dos puntos de su vecino si gana al Rayo Vallecano.

Real Madrid
El redactor recomienda