Es noticia
Carletto, el madridismo tiene derecho a saber cómo este Barça le saca 12 puntos en liga
  1. Deportes
  2. Fútbol
Lo mejor y lo peor

Carletto, el madridismo tiene derecho a saber cómo este Barça le saca 12 puntos en liga

¿Sonó la música de la Champions? ¿LaLiga es un torneo menor que se puede tirar a la basura? ¿Este Barça era un espejismo? El Clásico de Copa deja cuestiones por resolver

Foto: Benzema celebra uno de sus tantos. (EFE/Enric Fontcuberta)
Benzema celebra uno de sus tantos. (EFE/Enric Fontcuberta)

"Antes que todo, quiero felicitarlos. Es un orgullo ver un partido así, para mí y para todos nosotros [el equipo técnico] que trabajamos con ustedes. Primero, felicitarlos. Segundo, he dicho una mentira: no era la final, era la semifinal y ahora la final tenemos que jugarla. Y tercero... ¡Día libre mañana!". La charla de Carlo Ancelotti en la celebración del vestuario en la victoria contra el Barça evidenció lo mejor que tiene el técnico italiano en su libreta: la gestión de grupo. La primera media hora de la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey ofreció el mismo partido errático que en los anteriores Clásicos. Exactamente el mismo encuentro. El día de la marmota. El Camp Nou rugía, como pocas veces antes, con fe ciega en el aliento victimista impuesto por las altas instancias del club en el Caso Negreira. El mundo contra el Barça; así, así, así gana el Madrid y la influencia de la Central Lechera. Todo sea por no aceptar que pagar siete millones de euros al vicepresidente de los árbitros es algo, como mínimo, éticamente injustificable. La Justicia (y la UEFA) decidirá el resto.

Volvamos al terreno de juego. Gozó el Camp Nou durante largo rato. Ahí estaba un Barcelona que ganaba terreno a base de presionar la salida de balón madridista y un conjunto merengue incapaz de jugar su fútbol. Pero hay algo innegable en el equipo visitante, ni baja los brazos ni deja de competir. En diez minutos psicológicos (los cinco últimos de la primera mitad, los cinco primeros del segundo tiempo), dieron la vuelta a la eliminatoria. Los de Ancelotti olieron la sangre y exhibieron su pegada, mientras que los pupilos de Xavi Hernández se diluyeron de forma dramática en cuanto el partido subió de exigencia. No sonó la música de la Champions League, pero los merengues la escucharon con auriculares. ¿Cómo puede haber 12 puntos de diferencia entre estos dos equipos en la tabla de clasificación liguera?

Foto: Robert Lewandowski se lamenta durante el partido. (EFE/Alejandro García)

Lo mejor | Benzema regresa justo a tiempo

Errático y fuera de forma. La temporada del Balón de Oro no es la del pasado curso. Karim Benzema ha arrastrado problemas físicos que le han impedido rendir al nivel de superestrella que acostumbró a regalar partido tras partido en la 2021/22. Pero en la vuelta de la semifinal de la Copa del Rey se volvió a demostrar que, para que el Real Madrid gane títulos esta temporada, necesita una gran versión de su capitán. Y en el Camp Nou se vio. Participativo, agresivo en la presión y con un hambre de gol voraz.

placeholder Benzema acaricia el balón en el último tanto. (EFE/Enric Fontcuberta)
Benzema acaricia el balón en el último tanto. (EFE/Enric Fontcuberta)

El delantero centro se marchó de la ciudad condal con tres goles y una asistencia. En sus tres tantos, el francés no remató, sólo sopló a la pelota y esta hizo el resto. Liviano, pero letal. Monsieur Benzema ha vuelto justo a tiempo para la fase final de la temporada, con la liga perdida, pero con el Madrid como favorito para la final de la Copa del Rey y en cuartos de final de la Champions League.

Lo bueno | Ancelotti cumple la promesa con Arrasate

"Nos vemos en la final de la Copa". Las risas de Carletto y Jagoba Arrasate en el último encuentro entre Osasuna y Real Madrid, donde los madridistas se impusieron 0-2 en un durísimo partido, venía por la promesa que el italiano le espetó a su compañero de profesión. Ahí, le citó a reencontrarse con un título de por medio, la Copa del Rey. Osasuna hizo lo suyo con una histórica victoria en San Mamés ante el Athletic Club. El Real Madrid dio una lección de autoridad -más que de buen juego- para machacar al Barça con un 0-4 para el recuerdo. "Era una broma y ahora es una realidad. Será una final con un gran ambiente", se limitó a señalar Ancelotti. La última vez que el Madrid ganó la Copa fue en el 2014, contra el Barça en Valencia, con aquel icónico gol de Gareth Bale y su carrera ante Marc Bartra. ¿Se acuerdan quién se sentaba en el banquillo merengue?

Lo normal | Hay que preguntarle a Carletto

Pero no todo son buenas noticias para el Real Madrid. Hay una pregunta que incómoda a la afición blanca, pese a que no empañe la importante y contundente victoria en el Camp Nou. ¿De verdad es este Barça un equipo tan grande como para que te saque 12 puntos en la liga? A falta de dos meses de competición, el torneo doméstico está decidido y el Madrid jugará los encuentros ligueros para sostener el segundo puesto y como preparación de la Champions League como única atracción relevante. Falta de ambición, de planificación deportiva o de energía. Pero visto el nivel que puede alcanzar el Madrid y las limitaciones del FC Barcelona, es injustificable el paseo de los de Xavi Hernández en la competición desde el punto de vista del madridismo.

Lo malo | ¿Y Lewandowski?

Que Robert Lewandowski es uno de los mejores delanteros de la historia del fútbol moderno no se escapa a nadie. Que su aportación para el Barça en partidos de élite está brillando por su ausencia, tampoco. El polaco volvió a estar desaparecido. Una vez más. Como en las grandes derrotas del club desde que fichase por los blaugranas el pasado verano. Si los culés realizan una importante inversión por un killer de 34 años es, precisamente, para que dar el do de pecho en partidos como este.

Foto: Camavinga, un joven con alma de veterano. (Cordon Press)

Ojo, sus números no engañan: ha celebrado 27 goles en los 35 disputados con la camiseta del Fútbol Club Barcelona. Pero su rendimiento en los momentos decisivos deja un regusto amargo.

Lo peor | La desaparición del Barça de Xavi

¿Qué le sucedió al Barça para autodestruirse en diez minutos? Xavi Hernández había conseguido comerle la tostada y la moral a Ancelotti en los pasados Clásicos. Y la primera mitad del partido, a excepción de cinco minutos de furia del Marid, así lo demostraron. El primer gol madridista llegó en un contraataque después de una clarísima ocasión culé. El segundo, después de salir dormidos del descanso. Hubo un amago de rebelión con el 0-2 en el marcador. Pero ahí se vieron las costuras de un equipo que, bajo presión en la élite del fútbol europeo, no sabe competir.

Foto: Benzema y Vinícius celebran un gol en el Camp Nou. (EFE/Alejandro García)

Sin demasiado esfuerzo madridista, el Barça desapareció del campo. Recibió un 0-4 que pudo ser mucho mayor si el Real Madrid llega a apretar el acelerador y cae eliminado de la Copa del Rey. Ahora solo queda celebrar la liga… y mirar de reojo al Madrid en Europa.

"Antes que todo, quiero felicitarlos. Es un orgullo ver un partido así, para mí y para todos nosotros [el equipo técnico] que trabajamos con ustedes. Primero, felicitarlos. Segundo, he dicho una mentira: no era la final, era la semifinal y ahora la final tenemos que jugarla. Y tercero... ¡Día libre mañana!". La charla de Carlo Ancelotti en la celebración del vestuario en la victoria contra el Barça evidenció lo mejor que tiene el técnico italiano en su libreta: la gestión de grupo. La primera media hora de la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey ofreció el mismo partido errático que en los anteriores Clásicos. Exactamente el mismo encuentro. El día de la marmota. El Camp Nou rugía, como pocas veces antes, con fe ciega en el aliento victimista impuesto por las altas instancias del club en el Caso Negreira. El mundo contra el Barça; así, así, así gana el Madrid y la influencia de la Central Lechera. Todo sea por no aceptar que pagar siete millones de euros al vicepresidente de los árbitros es algo, como mínimo, éticamente injustificable. La Justicia (y la UEFA) decidirá el resto.

Real Madrid