La agresión de Gavi a Ceballos sin balón que enciende al madridismo por su bula arbitral

Gavi vuelve a estar en el punto de mira. El centrocampista del Barcelona es, sin ningún género de dudas, una de las grandes revelaciones del campeonato. A pesar de su insultante juventud, da la sensación sobre césped de ser un jugador curtido en mil batallas, con mucha experiencia y conocedor de lo que necesita su equipo en cada momento para ofrecérselo con un derroche físico y táctico más propio de un veterano que es un recién llegado a fútbol de élite. Pero, una vez más, volvió a quedar señalado por la bula arbitral que se tiene con él.

En el Clásico, Gavi volvió a quedar retratado. No es la primera vez que el andaluz muestra su peor versión sobre el césped, donde patadas y golpes sin balón se reproducen de manera continua sin que ningún colegiado y, lo que es más grave, sin que el VAR, actúe para sancionarle. Gavi hizo cinco faltas, más otras dos más graves que no fueron señaladas. Nacho solo dio una patada en todo el partido. Adivinen cuál de los dos jugadores vio la amarilla y tuvo que ser cambiado para evitar la roja...

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Las malas arte de Gavi volvieron a hacer acto de presencia en la segunda parte del tenso partido. En una disputa de balón, Gavi se protegió con el codo en alto, impactando contra la boca de Carvajal, en una acción que quedó impune. Posiblemente el centrocampista no tuviera intención de hacer daño, pero el peligro que supone ir con el brazo a esa altura y, sobre todo, el hecho de impactar contra el rival, debía de haberle supuesto, al menos, una amonestación.

Pero, sin duda, la acción más grave de todas tuvo lugar el minuto 88 cuando, en un contraataque del Real Madrid y veinte metros por detrás del balón, el azulgrana embestía por la espalda a Ceballos con el ánimo de golpearle, una acción que pasó desapercibida para todo el estamento arbitral desplegado en el Camp Nou. Y es que da la sensación de que hay bula arbitral con un Gavi que, partido tras partido, no duda sobrepasar ciertos límites sin que los árbitros sean capaces de tomar medidas contra él. Parece tener absoluta libertad para campar por el césped a sus anchas.

Ni el colegiado principal, ni los dos asistentes, ni el cuarto árbitro, ni los cinco encargados del VAR, fueron capaces de revisar una imagen que no tardó ni un minuto en hacerse viral en redes sociales, donde todos los espectadores que estaba haciendo el partido había observado una agresión... pero que ninguno de los jueces vio. Sin esférico de por medio, sin ánimo de jugar la pelota y completamente intencionado, Gavi golpeó a su rival con el objetivo de hacerle daño. Y ningún árbitro movió un dedo para analizar si la jugada era motivo de roja.

No es la primera vez que las cámaras captan a Gavi golpeando a un jugador del Real Madrid sin balón. Ya en el pasado Clásico de Copa, se pudo ver en un momento del partido cómo el centrocampista azulgrana se marchaba a por Vinícius y, sin que el balón estuviera en juego, le golpeaba por la espalda, momento en el que ambos se encararon. Pero no fue el único encontronazo, pues en el mismo partido se vio al andaluz llamando "hijo de p***" al brasileño, una grave falta de respeto que, de nuevo, ni el árbitro ni el VAR castigaban.

Y es que Gavi, en el Clásico, volvió a dar dos versiones muy diferentes: la del jugador inteligente, atrevido y qué es capaz de sostener la medular del equipo, y la del futbolista que supera en más de una ocasión la raya de lo permitido en un terreno de juego. Evidentemente, en este último caso, el problema no es suyo, sino de los arbitrajes que se lo permiten, sobre todo, cuando existe un agravio comparativo y al rival sí se le castiga lo que a Gavi se le concede constantemente.