Es noticia
Las calabazas de Merino al Aston Villa, que pagaba su cláusula, explican el gran éxito de la Real
  1. Deportes
  2. Fútbol
EL NAVARRO RECHAZÓ LA OFERTA

Las calabazas de Merino al Aston Villa, que pagaba su cláusula, explican el gran éxito de la Real

Esta decisión fortalece el modelo del club donostiarra, cuyo éxito radica en que los futbolistas de casa no quieran irse y los de fuera estén deseando venir y, como Mikel, quedarse

Foto: Mikel Merino, en el partido ante el Betis. (EFE/Javier Etxezarreta)
Mikel Merino, en el partido ante el Betis. (EFE/Javier Etxezarreta)

Con la reelección de su presidente, Jokin Aperribay, hasta 2027, y las renovaciones, primero del entrenador, Imanol Alguacil, hasta 2025, y este mismo jueves del director de fútbol, Roberto Olabe, hasta 2026, la Real Sociedad ha apuntalado el futuro de un club que vive un presente esplendoroso tanto desde el punto de vista económico, social y, lo más importante, deportivo. El club donostiarra ha implantado un modelo basado en lo que ha sido siempre, un equipo de cantera, donde el éxito radica en que los futbolistas de casa no quieran marcharse y los que llegan de fuera estén deseando hacerlo y después quedarse.

El pasado 27 de diciembre, COPE Gipuzkoa informó de una comida del presidente y el director de fútbol con Mikel Merino, en la que, según el mismo medio, Aperribay y Olabe propusieron al centrocampista navarro ampliar su contrato, el cual renovó en 2020 hasta 2025. Sin embargo, lo que realmente llevó a los dirigentes del club donostiarra a realizar este movimiento fue el hecho de que el Aston Villa quería pagar los 65 millones de la cláusula de rescisión que Merino tiene para el mercado de invierno, pues en el de verano es de 60, si bien fue el propio Mikel quien rechazó una oferta que mejoraba notablemente su ficha.

Foto: Mikel Merino, en el derbi de la Real contra el Athletic. (EFE/Juan Herrero)

A diferencia de Unai Emery, técnico del club de Birmingham, que no dudó en rescindir su contrato a mitad de temporada con el Villarreal, previo pago de una cifra cercana a los 6 millones por su traspaso, más otros 6-7 de salario por cada uno de los cinco años que firmó, es evidente que Merino ha priorizado otros aspectos tanto o más importantes que el dinero, como son lo a gusto que personal y deportivamente se encuentra en San Sebastián y un club con un proyecto ambicioso como el de la Real. Tras abandonar muy joven Osasuna, sus experiencias en el Borussia Dortmund y el Newcastle le curtieron. Con 175 partidos, en los que ha marcado 18 goles y dado 23 asistencias, su fichaje por la Real le valió para consagrarse.

Al igual que el club donostiarra no quería desprenderse de una de sus principales figuras, Merino ha demostrado con hechos lo que en tantas ocasiones ha declarado. "En el momento de mi fichaje tenía claro que quería volver a un entorno familiar. Un lugar con una ideología, una forma de ser y un club tan parecido a lo que había sido mi casa. Si a eso le juntas la cantidad de talento que tiene la Real, lo bien que trabaja la cantera y la ambición del proyecto que me propusieron, el resultado es lo que pensé que era una combinación completa para triunfar", confesó Mikel al poco de ganar la Copa del Rey ante el Athletic.

placeholder Mikel Merino, junto a sus compañeros de la Real, tras ganar la Copa. (EFE)
Mikel Merino, junto a sus compañeros de la Real, tras ganar la Copa. (EFE)

Los tiempos han cambiado

Precisamente, en otros tiempos no tan lejanos el club bilbaíno habría sido el destino más lógico para el navarro. "Yo no voy a desmentir al Athletic, ellos sabrán lo que tienen que comentar", dijo Miguel Merino, exfutbolista y padre de Mikel, sobre unas declaraciones en las que el entonces presidente del club rojiblanco, Josu Urrutia, negó rotundamente el interés por su hijo. Esto, de ser verdad, habría sido una torpeza mayúscula, aún más teniendo en cuenta el reducido mercado que se autoimponen en Ibaigane. Pocos fichajes como el del navarro, por el que la Real pagó 12 millones de euros, podían haber reforzado mejor al Athletic.

Sin embargo, lo explicó Miguel Merino. "Dentro de un fichaje, hay que tener en cuenta muchos matices y, valorando todo, la Real era la opción más importante", dijo el ex jugador de Osasuna, después de que el 13 de julio de 2018 la Real anunciara un fichaje que sin duda marcó un antes y un después en la historia del fútbol vasco. Desde que el club donostiarra tiene capacidad económica para competir con su eterno rival, las cosas han cambiado. De ahí que, como aquí ha sido explicado, el Athletic que presidía Aitor Elizegi se opusiera al acuerdo de LaLiga con CVC, que permite a los clubes disponer de recursos para crecer estructuralmente.

Foto: El realista Mikel Merino, en el partido de la Selección española contra Suiza. (EFE) Opinión

Como es lógico, dadas sus prestaciones, Mikel Merino está en el punto de mira de muchos de los grandes clubes de Europa. Sin ir más lejos, otro club de la Premier como el Manchester City valoró su fichaje durante el pasado verano, aunque finalmente Pep Guardiola no se decidió a dar el paso. El hecho de que Luis Enrique no le incluyera en su lista para el Mundial pudo parecer un paso atrás en la proyección del "mejor jugador de la Liga", como le definió su entrenador. Sin embargo, visto el fiasco de Qatar, es evidente que tanto Merino como sus compañeros Brais Méndez o Zubimendi han salido reforzados.

A diferencia de Álex Moreno, otro del que se olvidó Luis Enrique y por el que el Aston Villa ha pagado al Betis unos 13,5 millones de euros más variables, Mikel rechazó la oferta del club de Birmingham, algo que en la Real han celebrado y valorado, de ahí la mejora de contrato que a buen seguro le plantearán. Es lo que tiene ser un club económicamente saneado, socialmente ilusionado y deportivamente ambicioso, hasta el punto de que, a diferencia de lo que sucedió desde el caso de Loren al más reciente de Íñigo Martínez, los jugadores de Zubieta quieran seguir en Zubieta y los que llegan de fuera no solo estén deseando hacerlo, sino, como en el caso de Merino, tampoco quieren irse. ¿Hasta cuándo? La capacidad de la Real para mantener esa ambición lo dirá.

Con la reelección de su presidente, Jokin Aperribay, hasta 2027, y las renovaciones, primero del entrenador, Imanol Alguacil, hasta 2025, y este mismo jueves del director de fútbol, Roberto Olabe, hasta 2026, la Real Sociedad ha apuntalado el futuro de un club que vive un presente esplendoroso tanto desde el punto de vista económico, social y, lo más importante, deportivo. El club donostiarra ha implantado un modelo basado en lo que ha sido siempre, un equipo de cantera, donde el éxito radica en que los futbolistas de casa no quieran marcharse y los que llegan de fuera estén deseando hacerlo y después quedarse.

Aston Villa FC Premier League Mercado de fichajes
El redactor recomienda