El Real Madrid juega con fuego, pero se impone al Rayo Vallecano (2-1)
Después de una gran primera mitad de dominio y goles, el Madrid vuelve a hundirse cuando iba por delante en el marcador y los de Iraola a punto estuvieron de llevarse el empate
Las dos caras del Real Madrid. Una ofrece una imagen de fútbol vistoso y dominante, aprieta con presión adelantada y encuentra gol con facilidad. La segunda es la de la desidia, los jugadores con los brazos en jarra siendo incapaces de cerrar un partido con autoridad. Mejoró el equipo de Carlo Ancelotti lo visto durante la semana, imponiéndose a un Rayo Vallecano que fue de menos a más en el Santiago Bernabéu. Toni Kroos abrió el marcador (Vinicius lo había hecho previamente, pero la jugada venía anulada por un fuera de juego de Karim Benzema), con un espléndido remate tras servicio de Marco Asensio. El 'nueve' madridista hizo lo propio en el segundo tanto, aprovechando un centro medido de David Alaba, que se incorporó al ataque como lateral. No supo el Madrid sentenciar el partido y los de Iraola se rebelaron de la mano -o de la cabeza, mejor dicho- de Radamel Falcao, quien puso el definitivo 2-1 en el marcador. El runrún volvió a aparecer en la casa del Madrid, con el Rayo teniendo una clarísima oportunidad de empate en los minutos finales.
Lo mejor | El equipo tiene líderes
No era un partido sencillo en el Santiago Bernabéu. Aunque el equipo obtuvo la victoria en la visita del Shakhtar Donestk en la pasada jornada de Champions, la imagen no fue buena. Y así se lo hizo saber el público, que dedicó su primera pitada en esta segunda etapa de Carlo Ancelotti. Si algo es innegociable en la parroquia blanca es el esfuerzo y compromiso. El miércoles faltó actitud, toda la que hoy le sobró al Real Madrid. El intrépido Rayo Vallecano, una de las revelaciones del campeonato, apenas intimidó la portería protegida por un Thibaut Courtois solvente, como toda la temporada.
Si algo tiene Ancelotti sobre el campo es líderes. David Alaba otorga jerarquía a la defensa, incluso incorporándose al ataque como ‘falso’ lateral izquierdo como en el tanto de Benzema. El francés ya no sufre para marcar y Vinicius parece empeñado en demostrar que lo suyo no es cosa de una noche. A punto estuvo el brasileño de marcar un gol maradoniano de no ser por la acción defensiva de Óscar Valentín, sacándola la pelota bajo palos. Punto y aparte para Toni Kroos, que cada día luce más entonado como el motor del centro del campo.
Lo bueno | Falcao solo necesita diez minutos
Siete partidos, apenas 330 minutos disputados y cinco goles. Radamal Falcao llegaba tocado al Santiago Bernabéu, un estadio que ya conquistó en su pasado rojiblanco y que tuvo opciones de ser su casa en el pasado. Iraola le sacó cuando más lo necesitaba el Rayo Vallecano. Llegar y besar el santo. Imposible hacer menos con más. El colombiano cazó un centro medido para rematar con la cabeza, su gran especialidad, y dejar en nada la estirada de Courtois. Apenas unos minutos después, los problemas físicos de Falcao le obligaron a ser sustituido cuando no llevaba ni diez minutos jugando. Se perderá también el parón internacional con Colombia. Si alguien se pensaba que el 'Tigre' venía a Vallecas de vacaciones...
Lo normal | Asensio se entona, pero hay que exigirle continuidad
Lo de Marco Asensio es una perpetua montaña rusa. La lesión de Rodrygo dejó un hueco en el extremo derecho que no tiene dueño en el actual Madrid. Ancelotti sorprendió frente al Shakhtar apostando por Lucas Vázquez: una indirecta evidente para Asensio y Eden Hazard, los dos candidatos a priori para dicha demarcación. El español parece haber entendido la jugada. Frente al Rayo Vallecano completó una gran actuación, jugando con inteligencia, amenazando con su zurda y hasta asistiendo al golazo de Toni Kroos.
Cerca estuvo de llevarse su propio gol en una contra, su vaselina acabó en intento. Cualidades tiene de sobra para ser importante en un Real Madrid ganador, pero de nada servirá este tipo de partidos si no encuentra una continuidad mínima. El Santiago Bernabéu está deseando volver a ver al Asensio que asomó hace ya cuatro temporadas.
Lo malo | Lo de Casemiro empieza a ser grave
Lento, torpe, desacertado con los pases, pérdidas absurdas… La temporada de Casemiro inquieta en la plana mayor del Real Madrid. Puede ser una cuestión física, su puesto de titular indiscutible -no tiene un relevo evidente en la plantilla- tampoco ayuda a dosificarle. Pero la realidad es que la versión del pivote está a años luz del mejor centrocampista defensivo del mundo que era la pasada temporada. Una cesión suya a punto estuvo de causar un drama en los minutos finales. Carlo Ancelotti planteó una presión alta en su medular. La entrada en el campo de Camavinga, sustituyendo a Luka Modric, permitió al equipo llegar a los espacios y asfixiar al Rayo Vallecano. Ni así brilló el 'catorce'.
En el campo no se le puede poner una sola pega si se habla de esfuerzo. Casemiro se marcha convocado con Brasil en el parón de selecciones, por lo que no tendrá oportunidad para descansar. El Real Madrid necesita a su escoba… Y es urgente.
Lo peor | Hazard ni está, ni se le espera
El drama de Eden Hazard es que el aficionado empieza a ni siquiera contar con él cuando visualiza la plantilla del Real Madrid. Ya no se le exige que resuelva partidos, conformándose el Bernabéu con que deje algún detalle de su (innegable) calidad. Ancelotti insiste en que hay que tener paciencia con el belga, en que sigue siendo un jugador aprovechable. Ya van dos temporadas con continuos problemas físicos. Hoy tuvo diez minutos sin relevancia.
Gareth Bale y su actitud (una vez más, molestando al club por su evidente ejercicio de doble rasero con Gales) sirven de paraguas para Hazard. Solo hay tiempo para un chaparrón por semana.
Las dos caras del Real Madrid. Una ofrece una imagen de fútbol vistoso y dominante, aprieta con presión adelantada y encuentra gol con facilidad. La segunda es la de la desidia, los jugadores con los brazos en jarra siendo incapaces de cerrar un partido con autoridad. Mejoró el equipo de Carlo Ancelotti lo visto durante la semana, imponiéndose a un Rayo Vallecano que fue de menos a más en el Santiago Bernabéu. Toni Kroos abrió el marcador (Vinicius lo había hecho previamente, pero la jugada venía anulada por un fuera de juego de Karim Benzema), con un espléndido remate tras servicio de Marco Asensio. El 'nueve' madridista hizo lo propio en el segundo tanto, aprovechando un centro medido de David Alaba, que se incorporó al ataque como lateral. No supo el Madrid sentenciar el partido y los de Iraola se rebelaron de la mano -o de la cabeza, mejor dicho- de Radamel Falcao, quien puso el definitivo 2-1 en el marcador. El runrún volvió a aparecer en la casa del Madrid, con el Rayo teniendo una clarísima oportunidad de empate en los minutos finales.
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