El Atlético amarra LaLiga en Cádiz y Luis Suárez ya marca hasta de falta (2-4)

A punto de cumplirse el triste aniversario del fallecimiento de Luis Aragonés, el Atlético de Madrid brindó un homenaje a su símbolo repitiendo su frase más conocida: “Ganar, ganar y volver a ganar”. Imparable está el equipo de Diego Pablo Simeone en LaLiga, aprovechando un nuevo fallo del Real Madrid -que perdió en casa frente al Levante (1-2)- para aumentar la distancia hasta los 10 puntos con un partido menos en su calendario. Los rojiblancos vencieron a domicilio a un valiente Cádiz por un resultado final de 2-4, en un partido que pudo acabar en empate de no ser por Jan Oblak.

TE PUEDE INTERESAR

El Real Madrid sufre otro porrazo en la Liga contra un buen Levante y el VAR (1-2)

Ulises Sánchez-Flor

Luis Suárez, una vez más, fue el mejor jugador de campo de los colchoneros. El charrúa anotó dos goles, uno de falta directa y otro de penalti, para sumar 14 goles en la competición doméstica. Saúl sumó un gol a su estadística de la temporada, mientras que el incombustible Álvaro Negredo fue el goleador por partida doble del Cádiz. El líder sale victorioso de otra jornada más tras un encuentro con emoción, golazos y polémica, pero con el resultado habitual para los rojiblancos. A día 31 de enero, parece que solo un milagro o una crisis de época podría evitar ver a Koke Resurrección levantar el trofeo de campeón dentro de cuatro meses. El capitán del equipo marcó el gol de la tranquilidad en los minutos finales del partido, tras una buena jugada de Ángel Correa en el área gaditana.

Nada más comenzar la segunda mitad del encuentro, Thomas Lemar se internó en el área cayendo frente a la presión de Mauro. El defensa del Cádiz midió mal la carrera con el francés, soltándole una pequeña patada que, con bien criterio, el árbitro señaló como penalti. Luis Suárez aprovechó la oportunidad, situándose como claro aspirante al pichichi de la temporada 2020/21.

Pasado el minuto 70 de encuentro, cuando más cómodo parecía sentirse el Atlético de Madrid, el equipo dirigido por Álvaro Cervera intentó demostrar su carácter de mata gigantes. Un mal despeje de cabeza de Giménez, que chocó con su compañero Lemar en el salto, precipitó un balón franco para Álvaro Negredo. El killer de los gaditanos efectuó un remate mordido, en semi fallo, pero suficientemente ajustado como para colarse por pegado al palo de Oblak. Enorme enfado del esloveno con sus dos compañeros. Solo el Real Madrid consiguió hacerle dos goles a los rojiblancos en la única derrota en LaLaliga de los pupilos de Simeone.

A punto estuvo de conceder tres goles Oblak de no ser por sus reflejos. Un balón caído del cielo en el minuto 78 le exigió una colosal parada que evitó el tanto de los gaditanos. De nuevo estuvo la defensa rojiblanca débil y de nuevo el gigante esloveno demostró ser -con permiso de Suárez- el jugador más decisivo del líder de LaLiga. El Atleti estuvo incómodo en el último tramo del encuentro, sin contundencia para defender los centros laterales del Cádiz. El gol de Koke evitó intranquilidad en el tiempo añadido.

Golazo de falta de Suárez y polémica mano de Koke

Luis Suárez estrenó el marcador, una vez más, anotando su primer gol de falta directa con la camiseta rojiblanca. Era el minuto 28 de partido y uruguayo pidió la responsabilidad de tirar la falta sobre la portería de Ledesma, nada pudo hacer el guardameta ante un disparo colocado, con rosca y por encima de la barrera. Ejemplar lanzamiento del charrúa que se estrena en esta categoría con el Atleti, aunque ya marcó de falta en LaLiga en el año 2016, cuando celebró gol como jugador culé frente al Betis. En su etapa como jugador del Liverpool, Suárez acostumbraba a ser lanzador a balón parado, tras su fichaje por el Barça, la presencia de Leo Messi impidió conocer más sobre esta faceta.

Poco antes, Suárez apunto estuvo de inaugurar su cuenta goleadora con un remate a escasos metros del área repelido por Mauro, cuando el charrúa ya cantaba gol. Quien demostró también ser un goleador puro fue Álvaro Negredo. El veterano delantero centro español aprovechó una de las pocas ocasiones concedidas por el Atleti con un disparo desde fuera del área que sorprendió a Jan Oblak. El marcador situó el empate en el partido hasta que Saúl remachó un balón en segunda jugada de un córner para sorprender a Ledesma.

La polémica del partido llegaría en el tiempo de prolongación de esta primera mitad. Koke Resurrección se lanzó al suelo, cortando con la mano un balón en el área. Gil Manzano no dudó, señalando el punto de penalti. En las repeticiones que se pudieron ver en el VAR, el capitán rojiblanco corta de manera clara la pelota con su mano, pero esta se encuentra apoyada en el césped. Según la norma, si la extremidad se encuentra apoyada en el suelo y esta sirve como punto de equilibrio para el cuerpo del futbolista, esta no será nunca penalti.

La jugada era interpretable, ya que Koke va al suelo con la mano justo en el momento en que el balón pasa por su lado. El VAR avisó al árbitro, que tras ver la repetición acabó por anular el penalti. Segundos antes de la polémica acción, Giménez acabó tendido en el suelo por una supuesta falta de Negredo que la tele asistencia no entró a valorar y que podría haber ahorrado la polémica de la mano del capitán rojiblanco.

Las bajas por coronavirus de Mario Hermoso y Yannick Carrasco condicionaron la convocatoria del Cholo Simeone. El entrenador argentino, a pesar de ser dos jugadores fundamentales para su alineación con carrileros, decidió no modificar el sistema. Saúl Ñíguez sustituyó al belga en la banda, asociándose más por dentro para compensar la falta de desborde en la comparativa. El azar premió al español con su segundo gol en la temporada. Felipe, por su parte, formó parte del trío de centrales junto a Giménez y Savic.

Joao Félix volvió a ser la nota negativa del encuentro para los intereses rojiblancos. Simeone no consigue reenganchar a la estrella portuguesa, que tras un inicio espectacular en la temporada, sufre una desconexión del juego del equipo. El luso fue titular por segundo partido consecutivo, pero fue cambiado en el minuto 60. Una hora de partido, el habitual tiempo que el técnico argentino le da a su pupilo.