Los jugadores del Real Madrid abandonan el camino marcado por Mourinho

"Los jugadores han abandonado el camino". Lo dijo José Mourinho minutos después de que el Espanyol lograra arrancar un empate en el Bernabéu el pasado domingo. La frase ha pasado inadvertida entre otras muchas que dio y que tildaban la Liga como imposible pero lo dicho por el portugués resume a la perfección la situación que atraviesa el Real Madrid. Jugadores por un lado y técnico por otro. Esta es la realidad que ha condenado al equipo blanco a malvivir en Liga y a pasar apuros en Copa y Champions. El discurso de Mourinho va por un lado y la implicación de la plantilla blanca va por otro. No hay sintonía y no es de ahora. Y en medio de este desorden, el club aprovechó la comida de Navidad para 'premiar' a la plantilla y al cuerpo técnico con un iPad mini.

Florentino Pérez ya tuvo conocimiento de esa separación de funciones en los primeros días de noviembre. Le preocupó lo que estaba viendo e incluso habló con alguno de los capitanes pero en todo momento pensó que el técnico iba a ser capaz de dar la vuelta a la situación. El tiempo le está quitando la razón. El portugués está a merced de los jugadores y éstos no responden. No parecen poner mucho de su parte. El presidente madridista sabe la tensión que se vive y quiso animar en todo momento al entrenador. Lo hizo primero en privado y después con algún gesto durante la comida que mantuvo con los primeros equipos de baloncesto y fútbol.

La plantilla ya no confía en Mourinho y poco a poco está reflejándose en los resultados y en la imagen del equipo. Hace un año pasaba por encima de los rivales y ahora pierde, empata y cuando logra ganar lo hace sufriendo, excepto en el partido ante el Atlético. Los jugadores son los que tienen la llave de lo que sucede sobre el terreno de juego. El entrenador blanco es exigente, acapara todo, ha lanzado pulsos a futbolistas con mucho peso dentro del grupo como Sergio Ramos, Casillas y Özil y eso termina pasando factura.

Ettore Messina pasó por una situación semejante

Xabi Alonso dio con la clave de lo que está sucediendo nada más terminar el partido en los micrófonos de Digital Plus. "Lo que nos vale es lo que nos transmite a nosotros el técnico dentro del vestuario. Debemos acatar lo que nos diga el míster", declaración implícita de que no siempre es así, de que la opinión de Mourinho está perdiendo peso dentro del grupo. 

El Real Madrid, en este caso con el equipo de baloncesto como protagonista, vivió una situación muy parecida con Ettore Messina. El italiano acaparaba poder, protagonismo, lanzaba mensajes hacia determinados jugadores hasta que logró poner a todos de acuerdo para terminar con su carrera en el club blanco y se vio incapaz de controlar al grupo y de obtener buenos resultados. Mourinho parece que tiene unas raíces más profundas dentro de la entidad pero si los jugadores no acompañan no hay nada que hacer. Por el momento van a seguir conviviendo con el aliciente de la Champions en el horizonte aunque cualquier fallo inesperado puede desatar la tormenta definitiva, la que signifique el fin de una relación más que deteriorada. Y todo esto teniendo en cuenta que Mourinho ya conoce el interés del PSG por él de cara a la próxima campaña.